sábado, 20 de agosto de 2011

Génesis Día 50

Son las doce menos cuarto de este soleado -aunque a medias- sábado veinte de agosto. Como quien dice se nos va el supuestamente mes más caluroso del año y aquí apenas lo hemos notado. Bueno, démosle el beneficio de la duda: aún le quedan once días para congraciarse con nosotros.

Ayer fue un día bastante completo. Por la mañana salí a dar un paseo con mi padre por El Muro y ahí asistimos a las típicas escenas de un San Lorenzo con la mayoría de la gente que se había animado a bajar al arenal, cubiertos con chaquetas o con sus propias toallas. El viento del Nordeste volvía a hacer de las suyas y además, en este caso sin sol siquiera.

Una buena comida precedió a la siesta de rigor porque para la tarde tenía planes. Por primera vez en meses tenía decidido salir a dar una vuelta por la zona de marcha -bueno por una de ellas, la de los que ya estamos un poco entraditos en años-. Así que a eso de las ocho ya estábamos por el Barrio del Carmen entre un bullucio de gente que como le decía yo en broma a mi mujer, si la Merkel se pasara por ahí, se llevaría las manos a la cabeza y cortaría de inmediato cualquier ayuda de Alemania o la UE para España, o al menos, para esa pequeña región de simpáticos comedores y bebedores en el Norte, donde la crisis parece que entra por el Este y sale por el Oeste. Increíble. Pero es que de verdad tuve que llamar a tres sitios para encontrar una mesa libre. ¿Quién dijo que la Semana Grande se había acabado?

Aunque casi todo estaba hasta las topes, la gente sigue tirándose a las terrazas, donde muchos pueden seguir fumando, así que encontramos un pequeño local completamente vacío en su interior donde nos metimos a tomar algo y a esperar allí a que llegaran mi primo y su pareja, con los que habíamos quedado para cenar luego. Ayer era día de familia, porque antes, camino del Carmen, me había encontrado por casualidad con la mayor de primas con sus dos peques. La niña es un auténtico polverín. No sé, tendrá cuatro añitos. Yo la verdad es que calculo fatal los años. Es una preciosidad que se gana a cualquiera con su sonrisa pícara, la misma que ha heredado de su madre. En cuanto al benjamín, desde su carrito de paseo, estaba por encima de todo lo que pasaba y se caía de sueño el pobre. Otra ricura. Parece mentira lo pequeñito que resulta a veces Gijón: antes de ayer me encontré con unos tíos por San Pedro y ayer con mi prima. A mí, particularmente, estos encuentros así casuales, me proporcionan mucha satisfacción, o como decimos por aquí, me prestan un montón.

Por lo que se refiere a la cena, espectacular. No recordaba lo exagerados que somos los asturianos para comer. Después de unas entradas bastante generosas, yo me decanté por un cachopo, y aquello era para verlo... Por supuesto no comí ni la mitad, y ya fue bastante. Un manzanilla para digerir aquel festín, mirada al reloj y... ¡pero si son las doce y media! Habíamos estado tres horas sentados charlando y el tiempo había volado. Se nota que tenía ganas de salir y charlar un poco, aunque a veces me da la sensación de que sólo hablo yo. Bueno, como siempre he hecho la verdad.

Y nada, que me encuentro muy bien, con pequeñas molestias, para qué os voy a engañar, pero que las llevo como buenamente puedo, a veces mejor, a veces peor. Ahora mismo lo que más fastidio me da es la puñetera úlcera que me ha salido en la boca. A ver si con las gárgaras de agua con sal mejora un poco y el lunes ya me dicen en el hospital de qué se trata exactamente. En cuanto a los picores por la cara, brazos y espalda, en ocasiones parece como si se reavivaran más y es cuando noto y puedo ver los diminutos granitos, como si de una reacción alérgica se tratara, pero bueno, también es llevadero. A todo se acostumbra uno mientras no sea muy molesto, claro está.

Bueno, a disfrutar de este finde, aunque sea sin fútbol, y de las vacaciones los que estéis en ella; un fuerte abrazo... "y mañana más".

3 comentarios:

  1. Disfruta cariño!! a mí me has sacado una sonrisa.
    Seguirá habiendo momentos malos, pero creo que los buenos que vas a disfrutar te van a compensar y mucho.
    Miles de besos

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  2. Hola Fili!!
    es una alegría leer que sales del 'nido' y poco a poco vuelves a tu vida :) Espero que muy pronto seas capaz de acabar el cachopo e incluso pedir un segundo :)
    Un besín

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  3. A 100 días del transplante y recuperando tu vida. Me alegro mucho. Disfruta todo lo que puedas a pesar de la incomodidad de esa enfermedad que no te deja sentirte como antes, pero mira todo lo que has pasado y dónde estás. Un abrazo y te sigo a pesar de los inconvenientes de la vida rural para internet... :)

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