jueves, 30 de junio de 2011

Día 530_46

Es la una en punto de este jueves treinta de junio, nublado, cuando comienzo a escribir el Blog. Justo con la de hoy cumplimos nada menos que cuatrocientas entradas en el blog. Casi nada. Una al día desde que me diagnosticaron la enfermedad salvo durante aquel periodo tras el trasplante autólogo, donde escribía únicamente después de las revisiones. Cuatrocientas entradas: eso es más de un año bregando contra una enfermedad que te machaca, más diría que psicológicamente que físicamente, salvo en los momentos más duros de los tratamientos, claro está. Pero que no sólo lo hace en tu persona, sino también en todos quienes te rodean. La cercanía ahora de una posible curación hace que no pueda dejar de pensar en esas personas. En primer lugar en mi mujer, Mónica, siempre a mi lado, sin desfallecer nunca y evitando que yo lo hiciera. Ella es la persona "culpable" de que yo haya sido tan necio a la hora de seguir siempre hacia adelante. Por supuesto mis padres y mi hermano -inmejorable donante- han sido otra de las columnas en las que me he apoyado. Y en mis suegros, siempre atentos cada vez que subía por Quintes para que todo estuviera perfecto. Pero sin olvidarme del resto de la familia ni de todos aquellos que con sus comentarios en el blog, mails, sms... me han obligado a seguir en esta lucha. Gracias a todos.

Los frutos todavía están por verse en su totalidad, pero de momento como se suele decir, aquí estamos, y mañana mucho mejor, porque si no hay novedades hacia las cuatro de la tarde estaré en mi casa. A partir de ahí serán dos revisiones semanales durante unas cuantas semanas hasta que el tema se estabilice, así que me queda hospital por tragar, aunque como es lógico no será ni de lejos lo mismo.

Los análisis hoy siguen en la línea de los últimos días, aunque dado que la hemoglobina ha bajado otro poquito, para tenerme en buen estado hasta el lunes - día de la primera revisión-, han optado por transfundirme dos bolsas de sangre esta tarde. Las plaquetas por su parte se han mantenido, y eso que ayer no realizamos ninguna transfusión.

Del tema urinario sigo percibiendo alguna mejoría, aunque leve, por lo que me parece a mí que durante algún tiempo no podré moverme mucho sin tener un baño a mano. De momento el finde por supuesto pienso pasarlo en el sofá debajo de la manta. Sobre eso no hay dudas.

Esta tarde lo que haremos también será una placa de control en el pecho, ya que aunque las auscultaciones no parecen percibir nada raro, ayer, tanto tras la comida como después de la cena, tuve sendos ataques de tos, como si tuviera algo que arrancar pero sin llegar a conseguirlo. Lo peor es el mal cuerpo que se te queda después de tanto esfuerzo.

Y nada más que contaros. Que me siento muy tranquilo. Pensaba que cuando me dijeran que me iba para casa me pondría a dar saltos de alegría, pero lo cierto es que me lo he tomado con bastante serenidad. Supongo que esta noche la pasaré ya con los nervios propios de la ocasión y que mañana hasta que no me vaya estaré a mil, pero de momento ya os digo que sigo como si nada.

Disfrutad de este último del mes de junio, que mañana estrenamos mes. Un fuerte abrazo de corazón a todos... "y mañana más"; eso sí, en edición vespertina, ya desde casa.

miércoles, 29 de junio de 2011

Día 530_45

Son justo las once y media de este miércoles veintinueve de junio, San Pedro y San Pablo, festivo en Gijón, cuando comienzo a escribir el Blog. Así que lo primero que toca es felicitar a mi padre, que para eso lo tengo al lado. Sin olvidarme por supuesto de mi hermano. Y con ellos de todos los Pablos y Pedros.

Pasando al tema central del blog, comentaros que esta noche ha vuelto a ser noche de continuos despertares por las ganas de ir al baño. En realidad lo más que logré dormir de forma seguida fue de seis y media a siete y media. El resto fueron cabezadas de apenas media hora. Hoy de todos modos parece que como arte de magia la orina no sale con tantos hematíes. Quizás sea una señal de la recuperación de la vejiga. A ver si aguanta.

Los médicos acaban de pasar por la habitación para confirmarme que hoy y mañana seguiremos con todas las probaturas pertinentes de cara a poder escapar el viernes. De momento me van a volver a meter suero como para una boda para proteger al riñón y de paso ayudar en la curación de la vejiga.

Lo que no vamos hoy es a infundir plaquetas. No es que hayan aumentado pero quieren ver cómo reacciono ahora estando un día sin recibir plaquetas. Por otra parte las defensas siguen en valores muy elevados después del chute de Neupogen de hace unos días. Por lo que se refiere a la hemoglobina, sigue algo peladilla, y del mismo modo que con las plaquetas, van a esperar a mañana a ver cómo evoluciona y en función de eso, ver si es necesario o no recurrir a una trasfusión para estar menos raspados y con más fuerzas.

Porque sí es verdad que en estos últimos días lo que me noto es más cansado, fatigado, como si en ocasiones me faltara un poco el aire. Será cuestión de darle al aparatillo de respiración -el de las bolitas- y hacer algo de bici. Ayer ya hice media hora y esta mañana llevaba poco más de diez minutos cuando llegaron los médicos e interrumpí la sesión. La acabaré ahora antes de la comida.

Así que poco más que añadir. En principio son dos días los que quedan y aunque soy consciente que el ir para casa no pondrá fin a todos estos pequeños efectos colaterales del tratamiento, sin duda, en casa todo se lleva con otra filosofía. Así que a apretar los dientes, echar mano de la reserva de paciencia y confiar que en estas dos jornadas nada se tuerza. Seguro que no.

Un fuerte abrazo a todos, disfrutad del día los que tengáis fiesta - y los que no también-... " y mañana más".

martes, 28 de junio de 2011

Día 530_44

Son las doce y cuarto de este martes veintiocho de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Parece increíble el cambio que ha pegado el tiempo, después de dos días en los que parecía que estábamos en el sur. Hoy sin embargo ha amanecido nublado, con un marcado descenso de las temperaturas, aunque en la 530 estamos a prueba de todo, por lo que seguimos disfrutando de unos cómodos 26 grados más o menos. Aun así no os creáis, que yo me siento casi de forma permanente destemplado. Es algo a lo que tendré que acostumbrarme porque será así durante unos cuantos meses como mínimo.

La noche fue quizás un poquito peor que las anteriores porque a los pequeños problemas que ya padezco se unió el que no sé por qué motivo mi nivelnde saturación de Oxígeno estaba por debajo de lo normal, así que me tocó poner una pequeña máscara conectada a una fuente de Oxígeno. Lo bueno es que evitó que se me taponaran las fosas nasales, con lo que la boca estuvo menos seca. Lo malo es el picor que sientes en la nariz y que a veces te hace estornudar. A ver si para esta noche tengo el tema corregido.

Por lo demás todo sigue muy similar a lo que os contaba ayer. Los valores hematológicos se mantienen en cifras estables y lo único que persiste dando fastidio es la dichosa meadera, que cada poco tengo que ir al baño y encima la orina sigue saliendo con una cantidad importante de hematíes.

De todos modos los médicos ahora mismo son partidarios de dejarlo a ver si cura solo, aunque de no ser así, hay tratamientos, si bien podrían afectar a mi riñón, que no es que esté muy boyante. Tendrán que valorar como siempre pros y contras.

La pregunta que nunca falta en estos encuentros es siempre misma: ¿y cuándo me voy para casa? De momento mantienen como fecha más factible el viernes, pero con las reservas oportunas. Es más, es posible que el mismo domingo tuviera ya que pasarme de nuevo por aquí para el primer control y ver si necesito alguna transfusión.

Bueno, ya tendremos tiempo de hablar de eso. De momento vamos a centrarnos en pasar un martes lo mejor posible. Un beso a todos... " y mañana más".

lunes, 27 de junio de 2011

Día 530_43

Son las doce menos cuarto de este calurosísimo lunes veintisiete de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Y lo hago ya con mi padre sentado a mi lado con sus pasatiempos, puesto que como os habían anticipado, haríamos un último cambio de acompañante para los últimos días.

Esta noche la volví a pasar más regular que bien: entre el atascazo de nariz que me produce el aire filtrado de la habitación, la boca reseca y sobre todo, las ganas de ir al baño cada poco que mantengo desde que me quitaron la sonda, el tema es que no dormiría más de veinte minutos seguidos en toda la noche. No os podéis imaginar las ganas que tengo de coger mi cama y dormir del tirón seis o siete horas. Tampoco pido más.

Los médicos han pasado no hace mucho y en general tenemos buenas noticias. La primera es que si no hay novedades, el jueves o el viernes a más tardar tendría el alta. Que nadie piense que eso supondrá decir goodbye al hospital, porque durante una buena temporada tendré que venir lunes y miércoles para los correspondientes controles.

Por otra parte, el tema de la vejiga muy poquito a poquito parece ir solucionándose, así que a ver simcon suerte para esta noche nos permite dormir algo mejor. Quizás a ello hayan contribuido las más de 60000 plaquetas que hoy disfruto, un récord que no recuerdo cuándo fue la última vez que había alcanzado. Probablemente desde la recaída.

Pero si las plaquetas se han portado bien, los leucocitos y neutrófilos han respondido de forma espectacular a la única inyección de Neupogen que pusimos ayer, de forma que han superado todos los valores que jamás mi cuerpo hubiera almacenado. Más de 12 mil leucos con cerca de 10 mil neutrófilos, más, menos. Creo que con estas defensas podremos tirar al menos un par de semanas sin problemas.

Finalmente los glóbulos rojos también han sido generosos con la bolsa de sangren que ayer me infundieron, subiéndome a casi diez el nivel de hemoglobina.

Lo que se me ha torcido un poco de nuevo es el tema del riñón, pero no de forma alarmante. Así que no me queda otra que seguir bebiendo mis más de tres litros diarios de líquido y esperar a que los médicos valoren sin disminuirme la concentración del fármaco que está originando el problema - pero que al mismo tiempo es el que me está protegiendo de rechazos- o si tal vez cambiarlo por otro parecido con menor toxicidad.

Así que más o menos eso es todo lo que puedo contaros en este lunes donde más de uno todavía se relame por el segundo puesto de ayer de Alonso. Un gran resultado pero que no debe hacernos perder la perspectiva a los ferraristas: estamos a 99 puntos de la cabeza, distancia del todo irrecuperable e inadmisible para un equipo como Ferrari. Por cierto: lo siento por Valencia pero me volvió a defraudar su GP. Muy discreto y sin apenas emociones, salvo lanque los cambios de gomas proporcionaron y algún que otro momento puntual como la salida -espléndidos los dos Ferrari- o el adelantamiento de Alonso a Webber.

Espero como podéis imaginaros que la semana transcurra lo más rápida posible y yendo siempre a mejor. Es lunes, estoy muy cerca de volver a casa y ahora, que es cuando mas cuesta, es cuando más debo mantener la calma y la concentración para que nada se tuerza.

Un fortísimo abrazo -lo de calurosísimo va en el ambiente-... "y mañana más".

domingo, 26 de junio de 2011

Día 530_42

Son las doce y cuarto de la mañana de este espléndido domingo veintiséis de junio. A estas horas seguro que la mayoría de vosotros estáis tumbados en alguna toalla, sintiendo la brisa del mar, o al amparo del frescor de una oportuna sombra. Lo cierto es que aquí en la 530 aunque el termómetro marca casi 28º no tengo una sensación especial de calor. De hecho ahora mismo mientras os escribo me estoy tomando una infusión templada, que tanta agua me estaba dejando el estómago como una charca. Ayer casi alcancé los tres litros y medio de líquido.

Bebiendo tanto no es extraño que mi vejiga siga siento la necesidad de vaciarse cada poco, así que por la noche no sé ni las veces que me levantaría, y ahora en la mañana, que llevo más de litro largo bebido, he perdido también la cuenta.

La médico que hoy está de guardia ha pasado y me ha vuelto a comentar que está todo dentro de la normalidad, y que es cuestión de que las cosas sigan su propio curso. Lo único reseñable es que los hematíes han bajado otro poco -con toda seguridad por la hematuria que sigue acompañando mi orina-, con lo que hoy me transfundirán una bolsa de sangre además de la habitual de plaquetas, si bien éstas, han superado las cincuenta mil. Por lo que se refiere a las defensas, como estamos también justo en el límite, pondremos una inyección de Neupogen para darles un buen empujón. Mañana veremos los efectos de todas estas acciones.

Lo que no cambia es la percepción de que mi alta no será como mucho antes de finales de la semana que viene. No sé, yo a veces pienso que lo mismo me toca todavía pasar el que fin de semana que viene aquí hospedado, pero bueno, en realidad, estando como estoy ahora, tampoco es mayor incoveniente salvo el lógico que representa llevar cuarenta y dos días encerrado en una habitación.

Para esta tarde tenemos previsto un último cambio de acompañante con la reentrada triunfal de mi padre. Necesito que Mónica los próximos días se centre en preparar la casa para que todo esté perfecto para cuando llegue, y además la verdad es que en los últimos días estaba con bastantes molestias en el estómago, y no es plan que empeore. La comida del hospital mata a un caballo. Será triste verla marchar, pero el pensar que muy pronto nos reencontraremos en casa me servirá también de motivación. Además será divertido volver a tener a mi padre conmigo. Veremos si me reconoce al llegar, porque han pasado casi tres semanas y mi aspecto no tiene nada que ver con el que él dejó cuando se fue.

Y nada más por este domingo. Mañana comenzamos una nueva semana, la séptima y ojalá que la última. Disfrutad de este magnífico domingo veraniego, bebed mucho, echaros cremita de verdad y saboread un buen helado italiano. Un abrazo muy fuerte para todos... "y mañana más".

sábado, 25 de junio de 2011

Día 530_41

Son las doce en punto de este sábado veinticinco de junio, día soleado y caluroso, cuando comienzo a escribir el Blog mientras escucho un poco de música relajante.

Porque la verdad es que necesito relajarme y tomármelo con calma, con paciencia; esa paciencia, palabra mágica en todos estos días y que a veces me costaba tanto encontrar. Digo que tengo que relajarme porque lo cierto es que desde que ayer me quitaran la sonda, mi estado ha cambiado bastante, en el sentido de que cada diez minutos a lo sumo necesito ir al baño. La noche fue así larga como podéis imaginaros. Todo guarda relación con el músculo de la vejiga, que al haber estado "en paro" durante los treinta días que llevé la sonda, ahora está vaguete y es como si tuviera otra vez que reeducarse. Parece mentira: más de treinta y cinco años currando y por treinta días de vacaciones ya se vuelve tonto.

Así que nada, los próximos dos o tres días me tocan complicados en ese sentido, pero bueno, es cuestión como siempre de no agobiarse y tomarlo como un paso que teníamos que dar en nuestro camino de curación y de vuelta a casa. Hasta que se recupere del todo lo que toca es beber mucho, unos tres litros diarios para que el mencionado músculo tenga trabajo a destajo y al mismo tiempo, contribuir así a expulsar todos los coágulos que todavía se me desprenden de las paredes de la vejiga.

Por lo demás no es que haya muchas novedades. Los valores hematológicos se mantienen y para hoy únicamente tenemos prevista una bolsa de plaquetas.

Lo que más deseo ahora es que por los menos los dos o tres últimos días de estancia aquí sean lo más llevaderos posibles, pero eso es algo que nadie puede garantizarte. Me conformo como siempre con ir pasito a pasito y que el finde pase de la mejor manera. Luego el lunes ya hablaremos de la próxima semana.

Nada más por este día veraniego. Disfrutad de él con moderación, no os vaya a dar una insolación o pilléis un quemazo de piel como para dormir en la bañera. Del Parchís no os cuento nada porque ayer no hubo enfrentamiento. Ya veremos si hoy estoy en condiciones de jugar una partidilla. Un fuerte abrazo a todos... "y mañana más".

viernes, 24 de junio de 2011

Día 530_40

Son las cuatro y media de la tarde de este veinticuatro de junio, viernes, cuando comienzo a escribir el Blog. Estando ya en pleno fin de semana intentaré ir al grano y no divagar tanto como otras veces.

Básicamente deciros que esta noche no ha sido muy diferente a las anteriores, aunque como el resto, ha pasado, que al final es lo que importa. Lo que sí es cierto es que me levanté quizás más cansado o fatigado que otros días. La razón probablemente se encuentre en que mi nivel de hemoglobina apenas supera los nueve puntos, así que aunque hoy no realizaremos transfusión alguna, es más que probable que mañana sí que la necesite.

Por otra parte las plaquetas han subido un poquito mientras que las defensas resisten por encima de las mil, con lo que en ese sentido estoy cubierto.

Lo más reseñable sin duda ha sido que hoy me han quitado la sonda urinaria. La pega ahora es que tengo que beber un montón para tratar de ir al baño cuanto más mejor y que de este modo la vejiga acabe su proceso de curación. Lo cierto es que está resultando bastante molesto y algo doloroso, pero hay que pensar que en dos o tres días el problema estará plenamente resuelto.

Por lo que se refiere a la fecha de alta, sin precisar un día en concreto, sí que hemos hablado de la posibilidad de que pudiera situarse a finales de la semana que viene. ¡Qué cerca y a la vez qué lejos!

En fin, que a ver si pasamos el finde tranquilo, donde no faltarán por supuesto los guiños a las motos y a la F1, con un GP de Valencia que esperemos que responda a la espectacularidad del resto de carreras que hemos presenciado en lo que va temporada, y a poder ser, que la victoria caiga del lado del Cavallino. Complicado será visto lo visto hasta ahora, aunque es cierto que los libres de hoy han dejado un pequeño hueco para la esperanza.

Y para los seguidores de la Reina del Cubilete, siento tener que darles la noticia que en lo que va de semana, el Duque del Dado, se impone por un rotundo cuatro a uno... Casi nada.

Así que lo dicho: que paséis todos un muy finde... " y mañana más".

jueves, 23 de junio de 2011

Día 530_39

Son las doce en punto de este nublado jueves veintitrés de junio, Noche de San Juan, Noche Mágica para muchos. Recuerdo la cantidad de veces que desde niño fui a la hoguera. Primero en mi propio barrio, arriba del todo en El Coto, donde al tiempo que la hoguera ardía, repartían entre los asistentes un delicioso -al menos para mí lo era- chocolate. Años después, la hoguera pasamos a verla durante mucho tiempo en los jardines de lo que ahora es el Parque de los Hermanos Castro, antiguo Parque Inglés.

De aquellas noches recuerdo que lo que más me gustaba era comprar con mi primo infinidad de petardos y lanzarlos a diestro y siniestro. ¡Qué bestias que éramos! Bueno, y que seguimos siendo… Porque no hace mucho que estuve en Valencia con Mónica, pasando la semana de Fallas con unos amigos que viven allí, y puedo deciros que lancé más petardos que si hubiera vuelto a mi infancia. Siempre he sido un poco incendiario en ese sentido…

Después del Parque Inglés vinieron ya las noches en Fomento, y ahí la verdad es que para mí perdió parte de su encanto, quizás por la lejanía, quizás por la falta de algo más de intimismo; aunque seguimos acudiendo más o menos de continuo, salvo alguna vez que por la fecha nos coincidía con algún examen en la Universidad. Hoy no sé, lo mismo quemo en la habitación algo… ¡Que no, que es broma! Para empezar no tengo mechero… Bueno, ¡esperad!, que ahora que lo pienso, sí que lo tengo. Que la linterna que me he traído por un lado es linterna pero por el otro es mechero. ¡Qué peligro! Veréis que mañana salimos en las noticias…

Bromas aparte acabamos de recibir la visita diaria de los médicos. Todo sigue según lo previsto, que no es poco. Lo que parece estar mejorando poquito a poquito es la cistitis, y no descartan el poder quitarme la sonda uno de estos días. Esto es lo de siempre: por un lado estás deseando quitarla de enmedio y por otro te da cierto respigo el que una vez quitada puedas tener algún coágulo con los consiguientes dolores para expulsarlo. Seguiremos en cualquier caso con la bolsa de plaquetas diarias, que son las que deberían ayudar a cicatrizar de una vez por todas la vejiga. Hoy ya he “tomado” mi ración diaria de ellas. De Neupogen y de hematíes de momento no está previsto ningún suplemento extraordinario, aunque no se descarta en el caso de las defensas para los próximos días. Hoy andaba en unas mil doscientas más o menos, con nueve de hematíes y cuarenta mil plaquetas.

De la mucositis no puedo quejarme. Sigue mejorando aunque me quedan los últimos restos en la boca que todavía me impiden comer normalmente y que me siguen dando muchísima sequedad por la noche. Aun así la mejoría con respecto a hace diez días es más que evidente. Ya se sabe además que estas cosas lo que más cuesta es conseguir su curación total, porque siempre te queda esa llaguita que parece que no quiere irse.

Así que en resumen podemos decir que seguimos dando los pasos adecuados, como por ejemplo el que cada día es más la medicación que me pasan a oral, para ir preparándome así para cuando me vaya para casa. ¡Dios!, no sé si reconoceré mi habitación… Mañana hago cuarenta días en el hospital.

Para acabar comentaros que ayer se interrumpió mi racha de victorias al Parchís. Tampoco era plan de ir por la vida humillando. Hoy de todos modos trataré de volver a la senda de la victoria. Lo que se confirmó ayer con la derrota es que sigo teniendo el mismo mal perder que siempre, así que en eso al menos, las células de mi hermano no han influido lo más mínimo.

Y nada más por este jueves. Disfrutad al máximo de esta noche de sueños e ilusión… “y mañana más”.

miércoles, 22 de junio de 2011

Día 530_38

Son las una y veinte de este miércoles veintidós de junio cuando comienzo a escribir el Blog. ¡Miércoles! Casi como quien no quiere la cosa nos acercamos a toda velocidad al primer fin de semana del verano. Por cierto, que hablando de verano, no podemos decir que hayamos iniciado éste precisamente con un sol radiante, al menos por estos lares.

Esta noche volvió a trascurrir unido a la botella de agua, debido a la sequedad que me afecta la garganta. No es difícil imaginar así que entre la noche y la mañana me haya bebido más de litro y medio de líquido. Me hace gracia cuando me dicen que para irme a casa tendré que estar en disposición de beber tres litros de líquido como mínimo, porque para mí eso nunca ha representado un esfuerzo. Al contrario, no soy capaz de estar por ejemplo sentado al ordenador sin una infusión o cualquier cosa para ir bebiendo según estoy haciendo lo que sea. O soy ese típico personaje que no puede estar en un bar sin estar tomando algo. En eso los hosteleros no se pueden quejar, aunque este verano habrá que cambiar la cerveza por los zumos.

Pasando a lo de veras importante, hemos recibido ya la visita de los médicos y sin duda la principal noticia que hemos tenido es que parece que con una altísima probabilidad el trasplante ha prendido con éxito. Se ve que los últimos coleteos de la primavera han hecho lo suyo. En serio, que de la analítica hecha el lunes se desprendería que el 100% de las células sanguíneas que ahora mismo recorren mi cuerpo son copyright Priore, pero en este caso, de mi hermano. De momento no he notado nada en mi carácter, sigo siendo igual de bueno o de malo que antes, pero estaré atento por si las moscas. Bromas aparte, estamos muy contentos y con el primero con el que he hablado precisamente ha sido con mi hermano para darle la novedad en primera persona. A partir de ahora lo que queda es que sus células poco a poco se vayan multiplicando para ir así repoblando todo mi cuerpo. Esto puede llevar más o menos tiempo, pero que irá sucediendo. La principal complicación que podríamos tener en ese período es que surgiera el famoso rechazo injerto húesped, pero que es algo que puede aparecer, o no, y en distintos grados, y que en cualquier caso existen por supuesto formas de luchar contra él.

Hoy, concretamente, mis valores sanguíneos siguen más o menos como ayer, pero como os comento siempre, esto es algo normal, aunque yo soy el primero que quisiera que la cosa fuera un poco más rápido. Así que nadie espere que de las cuarenta mil plaquetas que tengo hoy –el doble de las de la semana pasada- de repente me vaya a poner en cien mil en cuatro días. Esto no funciona así. Defensas, plaquetas y hematíes seguirán su ritmo normal de crecimiento, con alguna fluctuación que seguro que harán necesaria todavía alguna transfusión –con las plaquetas de hecho sigo a razón de bolsa diaria- o inyección de Neupogen en el caso de las defensas.

En cuanto a la cistitis algo sí mejora, pero muy poco. De todos modos las perspectivas son buenas también en ese sentido, y hoy, sin agobios, hemos hablado por primera vez de la posibilidad real de que la próxima semana pudiera recibir el alta si en estos próximos días retiramos la dichosa sonda. Precisamente esta mañana recibía también en mi habitación la visita de dos miembros del equipo de psicólogos del hospital que me preguntaban por mis intenciones cuando reciba el alta, a lo que yo les respondí con total sinceridad: cuando reciba el alta tengo previsto la enorme tarea de no hacer nada. Tal cual. Simplemente quiero estar en mi casa, en mi sofá y dejar correr el tiempo haciendo lo que me pida el cuerpo en cada momento, sin descuidarme por supuesto, pero sin marcarme una agenda de ningún tipo. Honorar aquel dolce far niente del que os hablé en una ocasión. El mejor remedio contra todos los males sin duda.

Y cambiando de tema, como no hay dos sin tres, ayer de nuevo volví a llevarme el gato al agua en la partida al Parchís: tres cero en lo que llevamos de semana. De verdad que soy el primer sorprendido, pero para los que dudéis de la legitimidad de estas victorias os puedo asegurar que están siendo de lo más trabajadas. Ayer por ejemplo fue cuestión de una ficha contra otra a la puerta ambas de casa, cayendo de nuevo el dado a mi favor.

Bueno, ahora os tengo que dejar que me llega la hora de la comida. Desde que he vuelto a ingerir alimentos, para no hacérmelo muy pesado, me han cambiado el horario normal del hospital, de modo que como a las dos y ceno a las nueve, algo más racional -para nuestras costumbres, claro está- que el de las doce y media al mediodía y las siete y media por la tarde.

Espero como siempre que tengáis una jornada de lo más tranquila, que disfrutéis en la medida de lo posible de estos días de verano –lo mismo alguno ya está de vacaciones-. Un fuerte abrazo para todos, gracias por vuestros continuos mensajes de apoyo… “y mañana más”.

martes, 21 de junio de 2011

Día 530_37

Son las once menos cuarto de este martes veintiuno de junio, primer del día del verano, y como era de esperar, primer día nublado. Hace apenas cinco minutos que han pasado los médicos para la visita diaria y la verdad es que pocas novedades puedo mencionaros, lo que tampoco está mal, porque significa que todo sigue bien.

Tanto defensas como plaquetas y hemoglobina siguen en unos valores estables, con tendencia al alza, pero moderada. Es lo esperado, pero lógicamente uno siempre espera que las cosas vayan más rápido, sobre todo cuando llevamos aquí casi cuarenta días. ¡Cuarenta días! Se dice rápido…

Lo que se me está haciendo desesperante es lo de la cistitis. Esta noche parecía que los coágulos habían desaparecido pero de nuevo esta mañana he vuelto a las andadas. Lo peor del tema es que no hay nada que hacer más que continuar con la sonda conectada y esperar que el cuerpo haga su trabajo. ¿Pero cuándo?

Hablando de esta noche, he dormido aceptablemente aunque sigo con esa sequedad en la boca que me hace despertar cada poco. Al menos ahora, con la mucositis un poco más controlada, puedo beber con más soltura, de modo que esta noche habré bebido más de un litro de agua.

Quizás otra de las cosas que peor estoy llevando es la cantidad de medicación que me están administrando. Sé que es totalmente necesaria, pero a veces uno llega a desesperarse viendo cómo no paran de colgarle bolsas de esto y aquello, aunque ahora ya me han pasado alguna cosilla a oral, de modo que vaya preparándome así para cuando vaya para casa, donde me llevaré un buen cargamento de pastillas.

Pero bueno, si ponemos todo en una balanza, indudablemente quien me hubiera visto hace dos semanas, o incluso hace una semana, no me conocería en relación a como estoy ahora; lo que ocurre es que ya sabéis cómo soy: que lo quiero todo y ahora, como cantaban los Queen. Exactamente eso. Quizás no soy consciente de la suerte que he tenido hasta ahora, habiendo toreado con complicaciones que los propios médicos me confesaban ayer, no imaginaban que pudiera haber superado sin haber salido de la habitación. Muchos otros en mi lugar hubieran pasado unos cuantos días en la UCI. Así que en ese sentido tengo que darle el valor que se merece a cómo estoy llevando todo en general. Luego es lo que siempre decimos: una semana arriba, una semana abajo, cuando lo veamos con la perspectiva de los años, no significará absolutamente nada.

En cuanto a las comidas sigo sin alimentación vía parenteral y de momento lo llevo bastante bien. Los alimentos me los traen todos en plan purés para que no tenga problema al ingerirlos con la mucositis, y lo cierto es que lo como todo, por lo que creo que en ese sentido tampoco vamos a tener problemas. Luego durante el día me tomo además mis infusiones aparte de unos batidos complementarios que me han traído en plan proteínicos.

¡Ah!, ayer me arriesgué a jugar la segunda partida al Parchís y el resultado de nuevo fue de una rotunda victoria en mi casillero. Yo creo que es el parchís de mis padres que me trae suerte. Hoy veremos si hay tiempo hoy para una partidilla. Bueno, tiempo seguro que hay. Lo que tiene que haber además son ganas.

En fin, que vamos a ir poco a poco en esta semana, que yo creo que puede ser crucial en muchos aspectos. Como se dice sin prisa pero sin pausa. Aunque esto depende de mi cuerpo, porque si fuera de mi cabeza…

Disfrutad de este primer día estivo, un fuerte abrazo a todos… “y mañana más”.

lunes, 20 de junio de 2011

Día 530_36

Son las once y media de este lunes soleado veinte de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Lo hago justo cuando acaban de salir de la habitación los médicos después de su visita diaria. Vamos por partes: las defensas se mantienen en unas muy buenas cifras, aunque lógicamente no tan espectaculares como ayer, puesto que no ayer no pusimos Neupogen. Aun así superan con creces las cinco mil.

En cuanto a las plaquetas seguimos por encima de las cuarenta mil, pero necesitamos un poquito más. Sería ideal superar las cincuenta mil para ver si de este modo logramos curar la cistitis que ahora mismo en realidad es el mayor impedimento que tengo de cara a pensar una fecha de alta. Hoy me tocará un pull de plaquetas para ver si les damos un pequeño tironcete para arriba.

Lo de la fecha de alta es algo que hay veces que te da muchas vueltas por la cabeza, aunque otras le das menos importancia y, siendo más fríos de cabeza, lo importante es salir, pero bien. Porque lo absurdo sería tener el alta y a los cuatro días estar de nuevo ingresado por un problema no solucionado correctamente.

Por lo que se refiere a la hemoglobina estoy en los diez puntos que no está mal. Hoy pasaré así sin necesidad de transfusiones.

Una novedad es que esta tarde me quitarán la comida vía parenteral, es decir, que comeré ya todo normalmente. Será complicado al inicio porque sigo con muchos problemas para masticar por la mucositis, pero es un nuevo avance. Además es necesario que el estómago se vaya poniendo a tono, que por las mañanas todavía sigo con algo de diarrea de lo “vaguete” que está después de haber estado más de cuatro tres semanas sin haber dado un palo al agua, más o menos como yo. Así que intentaremos combinar una dieta astringente con algo que sea fácil de digerir mientras voy curando la mucositis.

Lo que hoy han iniciado es el estudio de las cifras hematológicas para discernir el número de células correspondientes a la médula de mi hermano y las residuales que puedan quedar mías. Será algo que tengamos para finales de semana más o menos.

De la fiebre por otra parte seguimos sin noticia, lo que no deja de ser otra buena noticia. Lo que sigo teniendo son muchos cambios de temperatura corporales internos en plan escalofríos, calores,,, por toda la medicación que me administran de forma continua. Además, ya me han advertido que es muy habitual que tras un trasplante una persona durante mucho tiempo sea muy sensible a la temperatura, y que en pleno verano sienta la necesidad de llevar un par de chaquetas encima. Así que si yo ya era friolero, no quiero ni pensarlo a partir de ahora…

Bueno, toca comenzar de este modo una nueva semana. Vamos a ver si poquito a poquito se van solucionando los pequeños problemas que todavía me aquejan y de esta forma antes de que nos demos cuenta estemos por casa jugando al parchís.

Por cierto, que hablando de Parchís ayer Mónica y yo jugamos nuestra primera partida oficial al parchís, con victoria contra todo pronóstico para el que esto firma. Creo que no jugaré más hasta la vuelta a casa para no estropear mi estadística.

No me queda más que mandaros como siempre un fuerte abrazo a todos, que paséis una semana lo más llevadera posible… “y mañana más”.

domingo, 19 de junio de 2011

Día 530_35

Son las once y cuarto de este domingo diecinueve de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Esta noche ha sido bastante mala porque la pasado toda con muchísima sequedad y dolor en la boca, con lo que cada poco me despertaba para beber un trago de agua y tratar así de hidratarme. Gran parte del problema viene de que la mucositis no está ni de lejos curada, al contrario, todavía le queda, y al retirar la morfina, ahora es cuando de verdad se notan los dolores.

Por otra parte otro de los problemas son los dolores que tengo en los pies porque se me cargan de estar tanto tiempo tumbado. Intento así estar con ellos ligeramente incorporados, aunque claro, si a eso uno el que tengo que tener la cabeza también algo levantada para que no se me atasquen las vías respiratorias, el resultado es que acabo durmiendo como si fuera una V. Un poco incómodo.

Pero bueno, quitando esas molestias por lo demás seguimos la ruta marcada. Esta mañana acaba de pasar la médico para comentarme las últimas analíticas que ciertamente son positivas. Para empezar tengo más de 8000 defensas. Sí, lo habéis leído bien: más de 8000. Con una única inyección de Neupogen que me pusieron ayer el cuerpo ha reaccionado a las mil maravillas. De todos modos estos subidones habrá que verlos con algo más de perspectiva. Veremos por ejemplo mañana cuando hoy no pondremos ninguna inyección. Las defensas son superimportantes para ver si de una vez por todas somos capaces de curar la mucositis.

Por lo que se refiere a la cistitis ahí sigue. Ayer parecía que la orina volvía a recuperar su color más o menos normal, pero sin embargo esta mañana vuelve a estar rojiza por los dichosos coágulos que de vez en cuando aparecen por la sonda. Pienso que al final esto es lo que más guerra nos va a dar. Hoy, con todo, y dado que he superado las 40 plaquetas, vamos a colocar una única dosis de plaquetas y a ver si con ella, algo también mejora la mucositis.

De la fiebre seguimos sin noticias en los dos últimos días, pero ahí sí que prefiero ser precavido porque cualquier bobada hace que de repente te suba después lo mismo de una semana sin tener una décima. Seremos positivos en cualquier caso y confiaremos en que mantendremos este estado durante el máximo tiempo posible.

Lo que me ha vuelto esta mañana ha sido la diarrea, pero bueno, tampoco nada exagerado. Supongo que será algo normal después de haber comenzado con la ingesta de alimentos. Además, también me han confirmado que vamos a intentar ir pasando medicación a vía oral. Ese es el primer paso para ir soñando con una fecha de regreso a casa, que como ya os comenté, no se plantea antes de diez o quince días.

Mañana como ya os había dicho, tocará hacer el cuenteo de las cifras hematológicas para tratar de discernir cuántas de corresponden a células de mi hermano y cuántas son todavía mías. Los resultados los tendremos a mediados, finales de la semana que viene.

Y nada, que ya veis: de nuevo un domingo. Comienzo con él la sexta semana de encierro. Podría decir que el tiempo pasa volando, pero eso sería engañaros. Pero pasa, que al final es lo que importa, sobre todo cuando pasa a nuestro favor.

Disfrutad de este domingo espléndido de sol, que ya veremos los que nos vienen así luego en verano, que siempre nos andamos quejando. Yo no dejo de contar las horas para probar mi primer helado paseando por El Muro.

Un fuerte abrazo a todos, feliz domingo… “y mañana más”.

sábado, 18 de junio de 2011

Día 530_34

Son las dos y cuarto de este sábado dieciocho de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Lo hago mientras reposo en el sofá viendo Los Simpsons. Como cada vez que lo hago a través del IPad resulta bastante más laborioso, y ni os cuento ahora que tengo si cabe las manos más torpes de lo habitual. Empezaron pelando por los pulgares y al final como un lagarto de V han acabado por cambiarme la piel completamente. Crema hidratante tirada para nada.

El día ayer transcurrió de lo más tranquilo. Sorprendí a las propias enfermeras cuando me encontraban al entrar en la habitación, escuchando y bailando como si estuviera en mis mejores tiempos del Oasis. Necesitaba moverme, sentirme vivo, así que estuve moviendo el esqueleto un buen rato.

La noche ya no fue tan buena, y eso que empezó bien. Mo y yo comenzamos a ver una serie que nunca habíamos antes visto: Ladrón de Guante Blanco. Muy entretenida. Luego encima vinieron mis padres a traerme una bolsa con diversas cosas que les había pedido y me llevé la increíble sorpresa de que con ellos venían mi primo que curra en Bélgica, y que estos dias estaba de visita por Gijón, junto con su encantadora novia, todo un sol. Son visitillas como ya os conté alguna vez como si estuviéramos en una prisión, o más complicadas si cabe, porque hablamos desde nuestros móviles y nos vemos como a unos veinte metros, que es la distancia que separa aproximadamente la ventana de la sala de espera de la Unidad de Trasplantes de la de mi habitación.

Como digo la noche no fue muy buena porque estuve toda ella con la boca seca a más no poder y la nariz atascada, o sea, un poema. Por más que trataba de beber apenas era como echar unas gotas de agua en una playa. Así que bueno, pasamos las horas como pudimos.

Por la mañana la médico nos comunicó que seguimos en la línea de los últimos días: defensas entorno a las mil, plaquetas cercanas a las cuarenta mil, y hematíes más o menos en nueve, aunque esto tiene truco con las dos bolsas que ayer me transfundieron y que me dejaron el cuerpo más destemplado que si fuera un animal de sangre fría.

Pero como siempre lo importante es que la función renal sigue controlada, si bien seguimos con el dichoso problema de la cistitis. Por otra parte la mucositis, aunque despacito continua mejorando. Otra de las buenas noticias de ayer es que no tuve fiebre, pero bueno, esto es algo todavía circunstancial, pero hay que aferrarse a cualquier cosilla buena para sobrellevar mejor las menos buenas.

Y otro de los pequeños avances es que, no sin muchos problemas, he conseguido seguir ingiriendo algo de comida: básicamente arroz blanco -para mantener controlada la diarrea, que por ahora lo está- y yogurth con sacarina.

En fin, que por hoy ya os he contado unas cuantas cosas. No quiero que se me olvide dar públicamente las gracias a todos aquellos que sé que estáis acudiendo a donar plaquetas para mi curación. Son cosas que no tienen precio y por las que sólo puedo deciros eso: ¡Muchas gracias!

Os deseo de corazón un muy feliz fin de semana. Yo intentaré con Mónica pasarlo lo mejor posible. Sé que no será el último que me toque pasar aquí, pero este que pasará, atrás será uno menos que nos quedará. Un fuerte abrazo... "y mañana más".

viernes, 17 de junio de 2011

Día 530_33

Son las doce en punto de este viernes 17 de junio cuando comienzo a escribir el Blog, justo cuando acaban de dejar mi habitación los médicos tras su visita diaria.

¿Cambios? Quizás el más reseñable es que fue escribiros ayer aquello de que iba a intentar comer algo sólido y comenzar a atacarme una diarrea que me ha tenido las últimas veinticuatro horas más en el baño que en la propia habitación. Ahora estamos intentando controlarla con algo de codeína, que además ayudará a mitigar en parte el dolor general que siento, al encontrarme en estos momentos sin ningún tipo de analgésico al optar ayer por cortar con la morfina que no hacía ya sino mantenerme en estados bastante nerviosos y con muchas pesadillas en cuanto cerraba los ojos.

Esta noche con la dichosa diarrea como podréis imaginaros dormí mal, con continuas idas y venidas al baño. Para una noche como digo yo que no tenía fiebre, me tenía que llegar esto otro. Pero siempre recuerdo un cartel que un buen amigo tenía en un negocio y que decía eso tan cierto como nunca te quejes de cómo va un día porque siempre podrá venir alguien y emperorarlo aún más todo. Así que vamos a cruzar los dedos para que a poder ser mejore el estómago y no nos salte la sorpresa por ningún otro sitio.

Por lo que se refiere a mis cifras, los neutrófilos está cercanos a los 1000. Si recordáis había llegado casi a los 3000. ¿Por qué este descenso? Bueno, en primer lugar porque llevo tres días sin Neupogen -las famosas inyecciones para aumentar las defensas- y en segundo lugar porque desde hace algunos días he vuelto a necesitar del Ganciclovir, aquel medicamento para mantener bajo control al Citomegalovirus, el virus que se me había activado hacía algunos meses, y que me tuvo casi uno en casa bajo los cuidados de Hospitalización a Domicilio. No es grave el que ahora se haya reactivad. Es simplemente lo más lógico. Lo único es que durante dos o tres semanas habrá que darle caña a dosis dobles y luego seguir quizás alguna otra semana en dosis simple.

En lo que respecta a las plaquetas éstas siguen subiendo, lo que no está mal, porque sin duda ayudan a que mi cistitis mejore y que quién sabe si en una semana o dos a lo sumo podamos quitar la sonda que tanta guerra y dolores me está causando. ¡Anda!, ahora mismito me vienen a poner una bolsa de plaquetas. Me confirman además que sigo sin fiebre.

En cuanto a la hemoglobina, sin superar los nueve puntos, se mantiene por encima de los ocho por lo que de momento no serán necesarias transfusiones. Mejor así.

Los médicos siguen viendo muy positiva mi reacción a este segundo transplante y confiesan que para nada, con todas las pequeñas -aunque grandes para mí- complicaciones que estamos teniendo, se esperaban que esto fuera así ahora que estamos ya en el día 25 del trasplante. Por cierto, que para el día 28, o sea, para el lunes haremos el cuenteo del que ya os he hablado para ver la proporción entre células de mi hermano y mías propias. Los resultados tardarán no obstante algunos días y tampoco es que sean determinantes al cien por cien ni mucho menos en las posibilidades de éxito o no del trasplante.

Entre las situaciones que con mayor optimismo contemplan los médicos está el hecho de que los riñones siguen recuperados y funcionando de forma correcta. Para ellos es uno de los temas fundamentales y que más vigilan con preocupación. Ahora que parece solucionado, se les ve más tranquilos en ese sentido.

Yo sin embargo sigo impaciente esperando a ver verdaderos progresos. No aprendo. Recuerdo cuando en el anterior trasplante, apenas una semana después de recibida el alta, fui a la consulta como una furia porque aquello era horriblemente lento y no veía progreso por ninguna parte. Yo creo que el carácter de uno no lo cambian todos los trasplantes del mundo. Y si encima como es mi caso, se añaden a mis células las de mi hermano, la cosa en ese sentido no puede sino empeorar.

Hoy a pesar de la diarrea intentaré comer algo al mediodía para que el estómago despierte de su letargo, aunque por algunas partes del intestino por lo que se ve están más que despiertas. Pasaremos este viernes lo mejor posible y espero dejar descansar a Mónica lo mejor posible, porque a este paso la voy a reventar antes de que me den el alta y voy a necesitar un nuevo relevo. ¡Ni de broma! Yo creo que ella se encadena a la cama y la tienen que sacar con grúa de aquí.

Bueno, pues eso, que vamos a por la quinta semana, probablemente en la que los médicos comiencen a mojarse un poquito en cuanto a posibilidades de alta. Yo visto lo visto diría que me quedan por aquí otras dos semanas como poco. Ni firmo ni dejo de firmar nada en ese sentido: sólo puedo firmar a estas alturas la vitoria. La nuestra.

Un fuerte abrazo y disfrutad del viernes... "y mañana más".

jueves, 16 de junio de 2011

Día 530_32

Cuando son las doce y media de este jueves dieciséis de junio, comienzo a escribir el Blog. Ayer dentro de lo que cabe tuvimos una noche aceptable, aunque sigo durmiendo muy mal, con la garganta seca como la travesía por un desierto. No veo el mommento que pasen las horas para que empiece la rutina de un nuevo día y de este modo un día menos nos quede para salir de este encierro.

Esta mañana ha sido movidita: para empezarla con alegría me han cambiado la sonda ya que al parecer no suelen dejarlas más de 21 días. Me han colocado una un poquito más ancha y de otro material para ver si así me duelen menos los coágulos cuando éstos aparecen por la boca de la uretra. Tengo que deciros que de momento no he notado mucha diferencia, la verdad. Sin duda, es de largo lo que peor sigo llevando.

Por la mañana recibí la visita del Psicólogo del Hospital dedicado a este tipo de casos. Ya os he hablado de él en alguna otra ocasión. Es un chico joven de lo más majo que me hace sentir muy cómodo hablando con él y al que no tengo inconveniente en contarle mis miedos y mis problemas. Mónica asiste y participa de nuestras conversaciones y diría que es pieza fundamental de estas terapias que me ayudan a seguir sin cejar en el empeño.

Después llegó el momento en que vinieron los médicos con sus actualizaciones. A saber: por una parte los nuetrófilos siguen cercanos a los 3000 y eso que llevamos un par de días sin poner Neupogen. Es buena noticia porque el seguir las defensas en unos números interesantes, hace que por ejemplo la mucositis, aunque sea poquito a poco, vaya mejorando.

Por otra parte, justo ahora estoy con el primer pull de plaquetas. Hoy pondré dos. A ver si tenemos suerte y como ayer no caen saco roto, sino que van sirviendo a incrementar su número. Esta mañana tenía cerca de 30.000. Está claro en que cuanto más altas las tenga más fácil será el que la cistitis vaya también mejorando.

Quizás más importante que lo anterior sea el que la funión renal parece ya corregida al cien por cien, un tema que era el que más preocupaba a los médicos en los días anteriores.

Para la semana que viene en definitiva haremos el control para ver de todas mis cifras cuáles se corresponden con células mías y cuántas con células de mi hermano. Nos interesa como es lógico que sean las de mi hermano las predominantes.

En otro orden de cosas al mediodía hablé por teléfono con mis padres. No lo hacía desde que mi padre se había ido porque mi estado vocal había ido siempre a peor. Oír de nuevo a mi padre y a mi madre ha sido lo mejor del día sin duda. Ojalá pueda a partir de ahora hablar de nuevo cada día con ellos.

Y hoy intentaremos meter algo de comida sólida: un simple puré de verduras con patatas y tal vez un yogurth de postre. Tengo que ir haciendo al estomágo de nuevo acostumbrarse a ingernir y probablemente los primeros días serán muy duros, pero es otro paso que hay que dar, y como otros que hemos dados, cuanto más tardemos, peor.

En cuanto a la fiebre, ayer de noche volví a tener ese pico mío por encima de los 38, aunque por ejemplo hoy de momento no he pasado de los 37,3. Me conformo con aguantar el máximo tiempo posible así y no tener que irme a la cama a macerar mi piel, que está la pobre más que reseca de tanto sudar en la cama con las fiebres.

En fin, que espero que la semana que viene, quinta de encierro, empecemos de verdad a ver la luz. Mientras, sigo como siempre recibiendo vuestros rayos de sol por la ventana de esta 530. Un fuerte abrazo a todos,,, "y mañana más".

miércoles, 15 de junio de 2011

Día 530_31

Son casi las once y media de este miércoles 15 de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Los médicos acaban de pasar por la habitación y han seguido con su sucesión de buenas noticias, leves, pero buenas noticias a fin y al cabo. Los neutrófilos alcanzan casi los 3000, mientras que plaquetas y hematíes siguen más tímidos.

La verdad que después de un día y una noche como la de ayer no esperaba un "parte de guerra" tan positivo. Ayer en serio que creo que llegué al umbral del dolor que puedo soportar, cuando tuvieron que limpiarme la sonda urinaria. El problema es que como éramos pocos, se ha generado una especie de infección en ella, con lo que habrá que realizar dos o tres limpiezas diarias. Para echar a correr si no fuera porque ahora mismo no estoy ni para escapar de un caracol.

Por otra parte continuo con las fiebres. Es algo curioso porque por ejemplo me pongo un poco de pie a caminar por la habitación, me siento, charlo un rato con Mónica, y de repente empiezan a entrarme escalofríos que me hacen meterme en la cama y a la hora estoy ya con fiebre. Luego llegan los calores propios del paracetamol, la sequedad de la fiebre en la boca que me hace beber y beber agua; y gracias que puedo hacerlo a través de la jeringa...

Las noches además noto que las paso muy nervioso, con multitud de pesadilas. Despierto totalmente agarrotado en tensión a pesar de las pastillas que me dan para que duerma bien, pero creo que no se ha inventado medicina que pueda con este caballo desbocado.

Y ahora mismo tenemos la primera dosis de plaquetas del día. Hoy tocan dos para ver si logramos así disminuir tanto la mucositis como la cistitis. No sé, va todo tan lento... Pero ni siendo el mayor de los impacientes puedo negar que vamos avanzando, aunque para ello haya que sudar la gota gorda. Bueno, con 37,5 voy a ver si me tiro un poco en la cama a reposar un poco mientras me pasan todas las plaquetas. Luego me levantaré otro ratito.

Esta mañana hemos decidido bajar un punto la morfina para ver si descanso mejor y quién sabe, tal vez para el finde podamos degustar incluso algún yogurth para ver cómo respondo a la ingesta normal de alimentos.

Ayer como visteis estaba bastante abatido; era como un boxeador casi KO al que le estaban dando por todas partes sin piedad y él pedía que arrojaran la toalla por él mientras a su alrededor le imploraban porque siguiera luchando; hoy no se puede decir que sea el mejor de mis días pero de momento cruzo los dedos para que se mantenga estable, lo que con vuestros mensajes de apoyo, con el tesón y la valentía de Mónica, siempre presente, será sin duda más fácil.

No sé cuánto queda, no sé si diviso la meta o si me quedará otra vuelta, pero lo que sé es que ahora no puedo detenerme. Un fuerte abrazo... "y mañana más".

martes, 14 de junio de 2011

Día 530_30

Son las tres y veinte de este martes de Campo en Oviedo, catorce de junio, cuando comienzo a escribir e Blog.

No voy a enrrollarme mucho porque igual que a mí lo que me cuentan me puede sonar a chiste, lo mismo puede ocurrir con vosotros.

Ayer pasé otra noche cargada de pesadillas, con la garganta seca a más no poder, ingeriendo agua por jeringa como podía y viendo como las horas pasaba lentas como un minuto. Dantesco.

Y hoy de nuevo los médicos vuelven a decirme que todo sigue yendo a mejor, que es cuestion de tiempo. Que ya supero los 2000 neutrófilos. ¿Pero qué pasa entonces con estas defensas que son incapaces de hacer que mejore mi mucositis y pueda ingerir siquiera una triste infusión? ¿Por qué mi cistitis cada vez va a peor y mis coágulos sanguíneos por la sonda urinaria son cada vez más frecuentes y dolorosos? Y ahora encima tengo toda la zona exterior plagada de pequeños hongos que me producen un ardor que no se lo desearía ni al peor de mis enemigos.

¿Por qué si en el escaner parece que no hay nada fuera de relevancia, sigo con estas fiebres que hoy a media mañana me tenían en la cama metido muerto de frío, para luego pasar a un calor sofocante?

Lo siento, pero después de 30 días ingresado estoy que me subo por las paredes. Suerte que las ventanas no tengan manivela para evitar malos pensamientos, porque si esto iba a ser duro, se olvidaron concretarme lo que puede llegar a ser duro. Duro fue el autólogo. Esto no tiene nombre.

Ahora por la tarde me van a empezar a pasar plaquetas para ver si son capaces de subirlas un poco en número y de este modo, que por ejemplo disminuya la concentración de hematíes en mi vejiga. Ya veremos, porque a estas alturas después de no sé cuántas vueltas no paso siquiera de 20 mil plaquetas.

Lo siento, pero hoy no tengo ni fuerzas ni ganas para escribir más. Mis manos -secas y deshilachadas- se solidarizan así con mi voz ausente, que ni yo mismo recuerdo cómo suena.

De momento sólo puedo prometeros como siempre en una cosa en la que nunca os he fallado: "y mañana más."

lunes, 13 de junio de 2011

Día 530_29

Son la una menos veinte de este soleado lunes 13 de junio cuando comienzo el Blog. Hoy no me explayaré demasiado, porque tampoco quiero comeros demasiado la cabeza con mis pensamientos. De verdad que intento que sean lo más positivos posibles, pero son como los de un atleta que va absolutamente fundido, esperando que en un momento su cuerpo diga basta por algún sitio, mientras que a su alrededor todos le van dando todo su apoyo diciéndole que lo peor ya ha pasado y que ahora no queda sino mejorar.

Sea como sea, ayer fue otro día fuerte de fiebres, donde apenas pude ver las carreras de motos y F1 -tampoco es que hubiera mucho que ver-.

Luego la noche como siempre fue horrible. Me siento enormemente culpable por Mónica, que en poco más de una semana la tengo KO, aunque ella sigue siendo mi máximo soporte.

Esta mañana han pasado los médicos para la revisión diaria y como digo, lo de siempre, -bendita rutina seguro que pensarán muchos-: por un lado los neutrófilos siguen creciendo y ya están por encima de los mil quinientos. Sin duda es una muy buena señal. Ahora tenemos que esperar todavía una semana para determinar que porcetanje de esos neutrófilos son míos y cuáles son de mi hermano.

Los glóblulos rojos se mantienen estables, entorno a nueve puntos, así que hoy no necesitaremos de bolsa de hematíes. Lo que sí seguiremos serán con las plaquetas, que como de costumbre, son las más remolonas. Ahora creo que estoy en las 17 mil más o menos. El problema siguen siendo las fiebres que las devoran.

De las fiebres, las opciones siguen sin estar claras, y hoy intentaremos con un escáner a primera hora de la tarde, de ver si algún órgano interno, pueda estar siendo el causante de estas fiebres que me van y vienen.

Como os digo, por lo que se refiere a la mucositis sigo igual, o sea, sin poder comer ni ingerir siquiera líquidos si no es con una pequeña ayuda con una jeringa. Esto hace una odisea la ingesta de algunos medicamentos que no tienen otra confección que no sea píldora. Sigo con mis pequeños pecados, eso sí, que consisten en que a veces Mónica para merendar, pide un zumo de naranja, y yo me reservo un culín en un vaso, del que inspiro como si se tratara del manjar más valioso. Por su puesto ni me atrevo a poner nada en mi garganta porque me imagino que podría ser como intentar beber alcohol según la tengo de raspada. Lo que más me alucina también es sentir los olores de las frutas. ¡Y mira que aquí la fruta es mala! Pero aun así, cuando se pasa hambre, cualquier plato parace un caviar, ¿no?

Por otra parte, la diarrea parece estable, aunque quizás lo peor esté por venir, precisamente cuando las células de mi hermano se impongan a las mías y se lleven a cabo una serie de reacciones en mi cuerpo que incluirán incluso el cambio de grupo sanguíneo. Como sabéis yo ahora soy O+, pero es más que probable que una vez consolidado el trasplante, pueda ser cualquier mezcla con el de mi hermano, que si os digo la verdad, no sé cuál es.

Lo que ya empiezo también a sufrir como la anterior vez son las fuertes náuseas, lo que hace que sienta el pecho como si quisiera estallarme, porque echar, no echo prácticamente nada. Fue lo que me provocó la hernia de hiato en aquel primer ingreso de la que a veces todavía me resentía. Para ir poco a poco, lo que he hecho es bajar un nuevo punto en la morfina, de modo que de diez puntos ya estoy en siete. Espero ir quitando un puntito más o menos cada día en la próxima semana.

¿Qué más deciros? No sé, que al final conociéndome como me conocéis, casi que lo que más me está fastitidiando es esta afonía que me impide prácticamente hablar, y como ya os dije ayer, el estar prácticamente toda el día con fiebre metido en la cama, lo que me impide recibir todo vuestro cariño. De verdad que todo mi esfuerzo por curar por supuesto va encaminado primero por mí mismo -lo contrario sería imposible de creer- pero después va por todos los que estáis ahí cada día pendientes de mi evolución.

Empezamos así la semana que nos llevará a cumplir los primeros treinta días ingresados. Y lo mejor de todo, es que mi mujer tiene razón: después habrá otros no sé si quince, veinte o treinta,,, pero que también es seguro que después habrá muchos más en casa, donde poco a poco recobraremos la normalidad. Poquito, poquito,,, un fuerte abrazo... "y mañana más".

domingo, 12 de junio de 2011

Día 530_28

Son las once y media de este domingo 12 de junio cuando comienzo a escribir el Blog. La noche de nuevo se ha visto marcada por la fiebre, fiebre, que apenas me ha permitido tomar las pastillas prescritas. En realidad, casi no he podido beber sino algún trocito de jeringa de unos 3 o 4ml de líquido, no más.

La mucosititis me tiene rabiado, aunque también la médico que ha venido hoy a verme ha seguido viendo una evolucion positiva en ese sentido, sobre todo, teniendo en cuenta que los neutrófilos se han colocado por encima de los ochocientos.

Con todo hoy seguiremos con dos raciones de plaquetas y dos de sangre.

Lo que tampoco sigue sin mejorarme nada es la cistitis y en relación a la fiebre, dado el pico que tuve ayer, prefieren entre hoy y mañana sacarme de la habitación gracias a mis cifras aceptables y practicarme un escáner en profundidad de profundidad.

Reconozco que si todo este amalgama de noticias me las dan en una consulta y no en una habitación en la que llevo rumiando el dolor cuatro semanas,es probable que empezaría a echar números. Pero ahora mismo me siento demasiado cansado de todo y sóo quiero que todo pase para de una vez por todas comenzar en serio el sprint final. ¿Es cierto que estoy en él? No sé, yo creo que otras tres semanas no me las quitan nadie... Porque por si éramos pocos, parió la burra: y a las anteriores molestias se han unido unas ligeras molestias gástricas, que no sé de dónde vendrán, porque sigo comiendo por vía. Supongo que de las bolsas de antibióticos, que ni sé cuántas tomo.

Bueno, y nada, que por aquí viendo las motos y ya de tarde tocará la F1. ¡Cómo hecho de menos esas rutinas con todos vosotros! Por cierto, de nuevo me disculpo por haber dejaros sin respuestas desde primeros de semana. A ver si es cierto que este lunes, martes y miércoles la cosa se pone mejor y puedo respoderos a algunos. Debo tener como cerca de doscientos.

Un muy fuerte abrazo, pasad un domingo de lujo,,, "y mañana más".

sábado, 11 de junio de 2011

Día 530_27

Son las doce menos diez cuando ababao de recibir la visita por parte de los médicos al tiempo que voncurren los, primeros libres de MotoGP que habrán de celebrarse en Iglaterra, aqunque el plato fuerte sin duda venga de la F1 por si de verdad en Ferrari se han puesto el traje de faena a partir de este sábado de junio.

De ayer, además de ese pique tímido y dulce a la puerta a las cuatro, pero que a mí me sonó robusto y eterno. Al abrir la puerta, como ya sabía quién era, lo hice también como un niño tímido y me encontré fue con una chiqilla que se iba con su traje de Hello kitty con una sonrisa de oreja a oreja y muy nerviosa, pero a la verdad como si nada hubiera pasado.

No he podido tampoco dejarme llevar por la emoción de las enfermeras y personal del Grupo de Cabuñes que se sigue acordando de mí. Es todo un detalle. De verdad que no os olvido a ninguna. ¡Y anda que no se tuvo Paula a cerrar el chigre!

Por lo que se refiere a la noche, no fue de lo mejor que he tenido. Pero es que si tuviera que escoger un ranking, lo tendría ciertamente de lo más complicado para encontrar ahora mismo 20 -de las treinta casi que llevamos-, en las que hayamos dormidos aceptablemente.

Para empezar me cuesta muchísimo tragar las dichosa pastillas. Al principio pensaba que era un legado de mi hermano, pero bromas aparte, cuando tienes mucositis, y la tienes como yo en este caso, que con la comida por vía humana noo puedes ingerir una triste patata o un vaso de agua, imaginaros.

La fiebre va y viene, y si por ejemplo no tuve durante todo el día, por la noche a las 23:33, andaba ya por encima de los 37,7. Por la noche me subió un poco más, así que hubo que recurrir a Parecetamol. Así que bueno, en ese sentido seguimos ponemos la cosa "interesante".

Finalmente lo de la cistitis, pues prácticamente sigue todo igual. Esperar, esperar, esperar...

Pues sera lo que haya que hacer. Hoy en la visita de los médicos precisamente lo mejor ha sido, ha sido la subidad la Neutrófilos. Seguiremos con la de Neupogen. Las plaquetas con apenas variación, mantendremos las dos bolsas diarias, mientras que de sangre decansaremos por hoy. A ver...

Bueno, y nada más. Un fuerte abrazo a todos, disfrutad del sábado... "y mañana más!!!"

viernes, 10 de junio de 2011

Día 530_26

Son las doce y veinte de este viernes diez de junio. ¿Increíble? Llevo casi cuatro semanas de ingreso -se cumplarán este domingo. Lo jodido del tema es no saber cuántas os quedan todavía por delante, o eso es al menos lo que pienso mientras Mónica se lee su revisa de Nagionalt Geografic. Justo en este momomento aparece la primera bolsa de sangre para ponerme a tono...

Los valores hematológicos siguen estando cercanos a nueve en hematología, 20 mil en plaquetas y apenas 550 leucocitos. Esta cifra de leucocitos (con Neupogen) nos hacer albergar esas esperanza que no existe bolsillo pequeño por pequeño capaz dar cabida dentro del positivisimo que nunca debe cejar cada vez que nos demos los buenos días o las buenas noches.

Por lo lo que se refiere a mi estado es que eso se hace se más repititivo que un culebrón de las tres y media, o el dichosos Saber Y Ganar... ¡Y hay que ver cómo éste último se ha transformado en casi religión para mi suegra! Porque para mi suegra solo hay una religión, cristiana, católica y parchichesca.

Los mèdicos han venido a verme esta mañana, aunque en esta ocasión tampoco tenían grandes noticias, o al menos espectaculares: la setencia de todos los dias: todo está casi igual, para bien o para mal. La mucositis nos ha impedido dormir con libertad, despertando mucho, sobre todo en mi caso, por la fiebre. Se nos ha unido un viejo amigo, la retención de líquidos, que si bien no tiene muesta la agresividad que nos mostró en la última ocasión. Lo peor ciertamente es que por que se refiere al riñón, que obligó al cambió de medicación parece que hoy volvemos a contarnos con el mismo, así que están valorando volver a cambiar la medicación.

¡Ah!, y a las cuatro de la tarde tengo que ver si puedo asomarme al pasillo para mandarle un besín a mi compañerina Paula, que hoy se despide de nosotros después lo que parece un trasplante medio con la máximas garantías en cuanto a resultado final se refiere. Disfrutad del finde, un fuerte abrazo...."y mañana más!

jueves, 9 de junio de 2011

Día 530_25

Son la una y veinticinco de desde jueves nueve de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Casi nada: el domingo cumpliré las cuatro semanas de ingreso. Hoy de nuevo el apoyo de Mónica ha sido fundamental para que no me venga abajo con mis sucesivas recaídas. Que si la mucositis, que si la fiebre, que si la cistitis, que si los problemas con el riñón...

La noche ha sido durilla como las últimas aunque tal vez no tanto gracias a tres factores: el primero el que ya os he comentado, de tener a Mónica conmigo. El segundo, que la pequeñita Paula de tres años me ha envíado un video a través de su email cantando en un karaoke, que si la véis, se os cae la baba. Y el tercero, las risa que nos hemos echado Mónica y yo con dos series, la de La Oveja Shaun, de dibujos anibados y que dura apenas siete minutos, y que tenemos guardada en nuestro disco duro y por Los Quién, la de Javier Cámara que emite la 3. Por muy mal que estés no hay nada como una sonrisa para curarte. Entre una cosa y otra nos echaríamos sobre las once y algo.

El problema a partir de entonces vino como siempre con la maldita mucositis que hace que se me ponga la boca con más babas que la película de Beethoven, la de los San Bernardos. Me resulta imposible así tragar nada por el dolor que producen la boca en ese estado, de modo que tengo que despertar cada tres cuartos de hora u una hora. Mónica me ayuda entonces a beber a través de jeringuillas para suavizarme la boca mientras me toman de nuevo la fiebre. Ayer lo curioso es que no pasé de treinta y ocho y medio, y sin embargo hoy, ya por la mañana rozaba esa cifra nuevamente. Justo ahora entra por la puerta el responsable de plaquetas; tengo 38,1, por lo que tocará poner otro paracetamol o un nolotil para poder poner plaquetas.

Plaquetas que por otra parte según los médicos en su visita de esta tarde no acaban de remontar del todo precisamente por las fiebres, y mira, según me acaba de volver a decir el chaval que venía con toda la artillería me las va a poner algo. Yo pienso que así son menos productivas, pero bueno, como digo siempre, ellos sabrán mejor que nadie.

Por orta parte ayer me llevé la sorpresa de la inyección de Neupogen, y que según me ha confirmado la responsable de la planta, será la tónica ya hasta que abandone el ingreso. Los leucocitos han subido un poquito, y quizás sea un primer aviso de que la médula de mi hermano comienza a trabajar. ¡Ojala Pauli!

En cuanto a glóbulos rojos estoy en una cifra aceptable por lo que creo que hoy libraré de sangre. A cambio serán tres las bolsa de plaquetas que necesitaré.

De la placa que hicimos por la tarde ayer sobre las cuatro no tengo noticias. La esán estudiando los radiólogos para descargar cualquier proceso agudo o grave. Para evitarlo nada mejor con retomar mis ejercicios. Dado que lo de soplar las "bolas mágicas" es misión imposible según tengo la boca, intentaré caminar al menos como ayer quince minutitos en la bici.

Así que nada, seguimos sin datos fehacientes que nos hagan gritar, ¡que sí, joder, que el Fili va a volver!, pero es que eso es algo que en al día 25 de ingreso es prácticamente imposible. Igual para el lunes o martes podríamos tener algo. Os juro que lo pondré bien en grande para que nadie se despiste. Hasta entonces, lo dicho, ya estamos a jueves. Un fuerte abrazo,,, "y mañana más"...

miércoles, 8 de junio de 2011

Día 530_24

Son las tres y cuarto de la tarde de este miércoles ocho de junio cuando comienzo a escribir el Blog. Lo hago por primera vez con Mónica en el hospital, adonde llegó ayer a eso de las nueve de la noche en lo que sin duda ha sido la mejor noticia he recibido desde que ingresé. He sentido, y he llorado la marcha de mi padre, lo mismo que el ver desde mi ventana a mis suegros y mi madre irse con él. Y no he llorado más porque esta maldita mucositis ni eso me deja. Tengo los labios tan hinchados que me parezco aquel jugador del Barcelona, Reiziger, que a finales de los 90 formó parte de aquel otro Barcelona que a tantos enamorara.

Lo cierto es que la llegada de Mónica ha paliado en buena parte todos los dolores y molestias que sigo arrastrando. Estoy en una dinámica que para quien no la haya pasado le parecerá ciencia ficcion.

Ayer dormimos algo mejor -lo siento Papi, porque contigo sé que las últimas nochesfueron horribles; espero que ahora puedas descansar. Aun así la fiebre no ha querido ser benévola conmigo en esta primera noche con Mónica, de modo que me fui hasta los treinta y nueve, lo que hizo que me administraran un Nolotil a las diez que hizo que me me encontrara mucho mejor durante algunas horas.

El resto: mucosistis, cistitis... sigue sin cejar en su dureza. Anoche vino la médico de guardia a saludarnos, porque nos recordaba de nuestra anterior estancia. Y estuvimos hablando precisamente de la barbaridad de mucositis que he desarrollado en ambas ocasiones. Si la mucositis se divide en tres grados, digamos, que para mí, tendrían que plantearse la creación de un cuarto grado para que os hagáis una idea.

Esta mañana me he sentido un poco marajá cuando me han lavado a mi antojo en la cama antes de cambiar ésta, más que nada por comodidad mía y por evitar que pudiera coger frío. Algún capricho tenía que poder darme, ¿no?

Para beber hemos descubierto un nuevo truquillo: las jeringuillas de 5ml. Son muy pequeñitas, y aun así no las cargamos con más de tres ml. Luego Mónica introduce la jeringa en mi boca y dispara como si de una pistola de agua fuera, de modo que apenas tengo que hacer esfuerzo -ni siento dolor a tragar- Está claro, que para beber un vaso, que vienen a ser 100ml, la cosa lleva su tiempo. Pero cuando está caminando en un desierto el orden de los valores cambian.

Los médicos apenas nos han dado nuevas noticias nuevas salvo que ha considerado interesante que hicieran otra placa pulmonar no sea que se me haya ido algo de la infección al pecho. El problema es que con la boca como la tenga lo de soplar las bolas para mover toda la porquería, es ciencia ficción, al igual que hacer bici. Ello siguen siendo optimista, pero siendo sinceros, creo que lo son por el mismo motivo por el que lo somos nosotros: ¡porque tiene que ir bien! Y porque además no puedo defraudar a mi fan núnero uno, Paula, que le ha dicho a las enfermeras que me dará su mail para cuando le den el alta pueda enviarle canciones de la Gallina CoCoUaUa, aunque a ella en realidad lo que le va es todo lo de Hello Kitty. Por eso anda siempre con su pijamita rosa implacable según me han dicho, porque yo nunca la he visto. Es increíble cómo se puede coger cariño a alguien sólo por haberla oído hablar y porque te hayan hablado de ella. No sé ni siquiera de dónde es, pero si sus padres están de acuerdo me encantaría que vienera a Quintes a jugar con el hijado de Mónica, que tiene su mismsa edad, y con la mía, un añito más pequeña. Sin olvidarme de otro de la quinta, también permaneciente a la familia, Raúl, y que va para los tres... Seguro que lo iban a pasar genial.

Bueno, no sé, qué más contaros. Pediros de nuevo disculpas porque hará como 5 días que no contesto al correo. Es muy complicado porque son muy pocos los momentos donde me siento capaz de ello. Y deciros que no veo la hora de que transcurran estos próximos días para que de verdad sepamos, una vez comiencen a aparecer los neutrófilos, que el trasplante ha sido un éxito.

Cuando esto sea así, comenzaré a sentirme un poco menos ese Vecchio Frack en el que ahora me veo transformado, y que ha sido la canción con la que he comenzado a escribir este blog, un clásico de Modugno. Me despido sin embargo con Piange il Teléfono, una canción que de pequeño no sé por qué, me fascinaba... Lo mismo que Dio Come Ti Amo, por supuesto Nel Blue Dipinto di Blue, Volare, o aquel Come È Bella La Aventura, una especie de tema incial con el que comenzaba una serie en Italia en unos tiempos que casi no recuerdo y que al volver a verlo ahora en Youtube produce en mí la misma carga de nostalgia.

Nada más por hoy. Espero que a partir de ahora todo sino perfecto, si sea menos intensivo por Mónica. Un fuerte abrazo... "y mañana más"...

martes, 7 de junio de 2011

Día 530_23

Son las tres y cuarto cuando comienzo a escribir el Blog en este miércoles siete de junio. Llevo con fiebre desde ayer por la noche, habiendo rozado los treinta y nueve. A pesar de todo no me encontraba tan mal y la prueba estuvo en que todavía mi padre y yo tuvimos ganas para jugar una escoba. El propósito era intentar no caer dormido y así llegar por la noche cansados.

Parecía que iba a funcionar pero pronto comenzó a darme titritona acompañada de fiebre. A partir de ahí fue un infierno, con sudada tras sudada hasta que a las seis y media caímos víctimas del cansancio.

Me desperté a las diez como si me hubieran dado una paliza. Con todo, poco después comenzó el rosario de entradas y salidas... Que si peso, que si temperatura, que si tensión....

Por lo que parece en uno de los hemocultivos se ha detectado una bacteria relacionada con la mucositis, y por ello, van a comenzar desde hoy mismo un antibiótico relacionado con ella, espernando que entre 36 y 48 horas podamos decir adiós a la fiebre. No sé, habrá que confirmar como siempre en los médicos, por eso son los mejores.

Por lo demás esta mañana he recibido la visita de uno de los aisistentes del equipo de psicología, que ha estado conmigo algo más de media hora para trabajar la respiración de relajacion. Espero que me sirva de ayuda.

Lo que sin duda me va a servir de ayuda va a ser la entrada esta noche de Mónica en la habitación, yéndose mi padre para casa. Los médicos insisten en que si sigo en esta evolución, por mucha mucositis, cistitis, fiebre y demás, puede que en dos o tres semanas esté yo también con el alta en la mano.

Estoy contando las horas para tenerla conmigo. Mientras, no puedo sino darle milioni di baci a papà por su apoyo para aguantar mi tozudeces, estas más de tres semanas. Un fuerte abrazo... "y mañana más"...

lunes, 6 de junio de 2011

Día 530_22

Son las cuatro en punto de este lunes seis de junio cuando comienzo a escribrir el Blog al punto que veo un poco la Dauphiné Liberé. Justo ahora ha pasado la enfermera asistente que me ha medido 38'5 de temperatura, por lo que vamos a pasar un paracetamol. Esta mañana han estado otra vez por aquí la gente del departamento de psicología, y hemos pactado que intententaré no metereme en todos los procesos de trabajo, aunque me resulte muy complicado entender cómo cada semana por ejemplo veo entrar gente novata en un lugar en el que se debería trabajar como un engranaje único. Así, no se renueva gente que estaba el año pasado y que lo hacía francamente bien. Pero supongo que así son las listas de espera en enfermería y de lo que mi prima Roci o su amiga Ruth nos podría contarnos algo.

Por lo demás la noche fue otra vez dura, dura, con buenas sudadas y pesadilllas de por medio. Más o menos cada hora y cuarto me despertaba, con mi padre ya dispuesto a mi lado. Hoy decidió no montar ni tan siquiera la cama. Y nada, que todo va tan temprano, que sin darnos cuenta antes de las nueve estábamos desayunando.

Los médicos se han vuelto a manifestar optimistas, a pesar de la fiebre, de la mucositiis y de la maldita cistititis. Las plaquetas han superado las 30 mil, la hemoglobina los 8,1 y eso sí, las defensas siguen a cero. A ver si esta semana sí que os puedo dar mejores noticias.

Un fuerte abrazo,,,, Grazie papà per resisterere sempre al mio fianco e il mio brutto carattere. Un fuerte abrazo.... "y mañana más".

domingo, 5 de junio de 2011

Día 530_21

Golpe de efecto en la carrrera MotoGP que a estas horas han tenido que abririr sus paragüas parar protegerse del agua que ha comenzado a caer cuando apenas faltaban doce vueltas.
Cada uno ahora puede corrrer con los nemáticos que quieras o estime adecuados. Al final el gato al agua se lo ha llevado Stonner, seguido de Lorenzo, mientras que tercero fue Spies.

Por otra parte en nada comienza la final masculina de Ronald Garros, que verá una vez más, a Nadal y Federer luchando por la bandeja los tres mosqueteros. Ayer el suizo con un partido excepcional dejó fuera de combate a Djokovic, quien en ningún caso arrojó asomó la toalla.

De la noche poco que contaros salvo que volvió a ser complicada. Fiebre por encima de los 38 hasta que se hicieron las ocho de la tarde, hora en la cual, ya me pudieron pasasar algo.

Del mismo modo, hoy, llevo toda la jornada por encima de los 38. Lo peor como siempre es la dichosa mucositis es el dolor para tragar liquídos, y eso que ya algún vasín de agua, aunque me quema las cuerdas vocales, consigo tragar fresquina. Además de seguir con mis infusiones.

Bueno, la conversación con los médicos no ha ido mal. Es más, se muestran más que satisfechos por mis valores, 1-1 y seguimos. Un fuerte abrazo y "mañana más"...

sábado, 4 de junio de 2011

Día 530_20

Son las cuatro de la tarde al tiempo que comienzo a ver la final de tenis femenino de este Roland Garros, en este sábado cuatro de junio. Ha sido un día en el que ha habido un poco de todo, aunque con predominio de noticias potencialmente positivas,

Para iniciar la mañana, la noche que hemos transcurridos no es que haya si demasiado mala. De las normales podemos decir. Estuvimos viendo un capítulo de la serie BBC, Luther, de trama policiaca. Muy recomendable. Mi padre como siempre se queja del poco tiempo que le dejo dormir, y yo, me aluciono de cómo a su edad, y pasando por lo que le tocando pasar, siga al pie del cañón.

Hubo también sesión para los animales y la naturaleza, en concreto con Planet Earth. Así, entre una bronca y con alguna enfermera que buscaba que fueráramos buenos chicos y apagáramos pronto la luz, apagaríamos hacia la una y media.

La sorpresa tal vez se la llevaron cuando al entrar a eso de las seis y media para las analíticas, nos encontraran a mi padre y a mí mano a mano, enfranscados en mis ejercicios de lavado bucal, primero con aclarados con agua estéril normal, posteriormente unas ligeras gárgaras con agua salina, para seguir con enjuagues más en profundidad con productos compuestos en el propio hospital contra la Mucositis. Acabamos todo el ritual con la vaselina aplicada a los labios de mi boca destrozada. Voy a ver si me hago con unas fotos porque serían de cartel de película de saga pugilística de corte independiente.

Por la mañana tuve dos muy gratas noticias, a las que añadir a las recibidas en los últimos días. El primero en venir a verme fue el Dr Hevia, Jefe de Servicio de Urología del HUCA. Y la segunda persona fue la responsable de la unidad de nefrología . Ambos coincidieron en que los tiempos de recuperación están ya más próximos, aunque sin fijarse en datos exactos.

Y mañana a por las motos.... Disfrutad de este finde fantástico. De momento hoy os confirmo que esta noche lo celebraré de nuevo con mi padre. Forza Paolo! Sei il migliore papà !! Un fuerte abrazo y "mañana más"....

viernes, 3 de junio de 2011

Día 530_19

Bueno amigos y amigas, pues aquí estamos, cuando son poco más de las once y media de la mañana, de este viernes de tres de junio, al que nos llevan en volandas a la tercera semanana de ingreso en el hospitall Maná, y su rock de caña dulce.

Del día seguimos con las mismas sensaciones, tanto en lo que se refeire a la traicionera mucositis (que por increíble que pudiera parecer, ahi sigue), a la cistititis y a las inflamaciones. No son ni mucho menos inaguantables, En el caso de la fiebre, ayer no bajé de 37,5 en todo el día, con lo que si os soy sincero, no sabría deciros ni número de Paracetamol: entre tres y cuatro, supongo.

Por lo demás, justo después de volver a tratar, sin resultados positivos, de obtener una nueva ecografía, vino Marco el psicólogo a hablar con mi padre y conmigo para ver qué tal íbamos. La idea cómo os habia antipado es que sea mi padre quien aguante estos dos próximos días. Aunque no las teniá todas conmigo, puesto que como os había dicho ayer, Mónica estaba por la labor de ser ella la que durmiera ya esta noche. Sin embargo después de hablar con ella, ha entendido que aquí más que nunca, han de primar los intereses del Grupo. El entrenador debe casi con varita máfiga cuál será el mejor momento para cambiar a sus dos grandes estrellas. En ello va buena parte del éxito final del partido.

Hablando de partidos, esta mañana pudimos disfrutar, la italianana Francesca Schiavone, vincicitrice del año pasado y la china Lí Na. pero para partidazo el que con 6-4 2-2 y 40-15 domina Nadal.

Un fuerte abrazo para todos "y mañana más ".












































Q






























































































taculaar

jueves, 2 de junio de 2011

Día 530_18

Son las siete y cuarto de este jueves, dos de junio, cuando comienzo a escribir el Blog. Estos primeros días están sirviendo como muestra de un mes en el que confluirán días malos, con otros menos manos, y con otros que volverán a verme paseando por la Playa España. Como siempre, todo con mucha paciencia.

Esta noche creo que pasaría a la historia de la comedia de películas De Louis de Founes. Y es que cuando llevaba dos horas roncando, al igual que cualquiera de sus tiernos personajes, de repente me vi en mitad de un grupo de personas que no cejaban en su discusión, no se a cuento de qué, pero que no hube de emplear demasiado tiempo para darme cuenta de que era yo en quién se centraban la mayoría de las miradas.

Al parecer la conjunción una vez más de la bolsa de recogida del sistema de orina, Lo primero será descubrir a estos pequeños conspiradores, pensó el personaje de mi ficción, que además se retorcía en los dolores que le producía el hecho de ausencia de agua en ell propio sistema. Tal era mis dolores, que ahí estaba yo, un desconocido para mí mismo, que trataba de averigüar cómo una dósis de morfina de 25 podría provocar en mí semejante conflicto de intenciones e intereses. Y es que ahí estaba yo, Filippo Priore, plantado delante de todos y con serias intenciones de quedarme en pelota total para elegir el mejor de los vestidos con los que concurrir a un supuesto funeral de la Reina de España. ¡Toma ya! Así que ese era el panorama con el que me encontraba absolutamente disperso en este dos de junio.

Como siempre aquí, uno trata de preguntarse qué fue primero: ¿el huevo o la gallina? ¿Es la morfina, causante de mis profundos dolores en la mucositisis y en la bursitis además de provocadora de mi absoluta confusión de la realidad. Menos mal que mi padre, siempre presente al pie del cañón, puso los lienzos y los goteros de pluma adecuados para que por lo menos la sucesión de acontecimientos acaecidos durante la situación luisfouniana se fuera al limbo sin ser contados por alguien. Como el que al arrojar mi camisón verde totalmente de plebeyo, mi marcado desagradado por la situación. Porque de ningún otro modo se podría haber explicado el que ni me hubiera enterado de que uno de mis dos puntos de la sonda central, por la que prácticamemnte va todo, fuera arrancada de mí con el mismo dolor que me hubiera producido un cinta de mísero celo.

Por otra partel, ahora mismo estoy esperando a ver si soy prerarando algo para cuando Mónica aterrice mañana, por sí, Mónica vendrá mañana.

Lo cierto es que tanto mi padre como yo tuvimos una conversación con Marco, el psicólogo del hospital para los trasplantes alogénicos, y entre los tres decidimos que lo mejor sería que fuera mi padre quien siguiera conmigo hasta que mi estado no mejorara, y luego, de forma inmediata, saltara al campo, ya como delantero de refresco, Mónica, aunque ella de sus tiempos como jugadora en Les Xanines la veía a perderme.

Mañana al parecer vendrán a verme de ECOs para llevarme a hacer una Ecografía sobre el asunto, puesto que los resultados de las analíticada de hoy apuntaban a que hoy mi valores eran un poco peores. Todo esto están siendo pequeños retrasos cuando se va a cumplir la tercerea semana.

Bueno, una vez más, llegados aquí, no quiero dejar de pediros disculpas por la dficultad en mi respuesta y en su retraso. Y una anécdota, quizás puerta para la esperanza: cuando a mediodía me encontraba casi al 100%, y mi padre apuraba su comida, un olor inapreciable alcalzó mi nariz de lleno, y no se me ocurrió que pedirle a mi padre que me dejara un mísero gajo de naranja, para disfrutrar de su olor. ¡Y a fe qué ha sido una sensación que nadie otro hubiera logrado! Muchos ánimos a todos, que mañana ya es viernes, con un primer fin de semana por delante -copa y motociclismo-.

Un fortísimo abrazo, ma attenzione a non danneggiare la sonda,,, "y mañana más".

miércoles, 1 de junio de 2011

Día 530_17

Son las seis de la tarde de este soleado miércoles, primero de Junio. Mientras en Teledeporte un sobresaliente está a puntito de finiquitar su presencia en la final de Roland Garros, fijada para este próximo domingo. El sueco Soderling está justo ahora a un juego de despedirse de las semifinales en apenas tres sets. El mallorquín es uno de esos ganadores natos españoles, raros por naturaleza, que tienen un gen en común: nunca se dan por vencidos por muy mal que estén las cosas y muy importante, nunca se cansa de vencer.

Sigo en mi estado de paciente lastimoso, y al que en ocasiones se une la desperación por la lentitud en la recuperación y la no vinculación entre dos estados A iniciales, dos o tres o los queráis B mediales, y un C final. Aquí se hace más cierto que nunca, aquello de caminante no hay camino, sino que se hace camino al andar. Lo que ocurre es que en este caso particular quizás podían haberse acordado de nosotros para alguna cosa más relacionada con el diseño y no sólo pa llenarnos los bolsillos con guijarros.

Y es llevo todo el día muy similar al de ayer, aunque lo empezara con mejores vibraciones. Llevaba dormidas seguidas unas cuantas horas del tirón, algo más que sorprendente, cuando estas horas se vieron cortadas de raíz por un misil en plena línea de flotación: por una parte la bolsa de orina correspondiente al sistema de lavado de la sonda, parecía como un globo de feria a punto de estallar, mientras que justo en el otro lado del cuadrilátero, la bolsa de suero, era una simple pasa seca. Resultado: el lógico y humano en estos casos. Con tranquilidad londinense, busqué la pera de la luz, y con voz pausada me dije "qué pequeña contrariedad más innecesaria" mientras que me dirigía al baño pensando sólo en no despertar a mi padre, quien llevaba unos quince minutos, ajeno a cuanto ocurría en en la habitación. Dejo para el lector avezada la escena real, no apta para menores de dieciocho y que guarda alguna similitud con grandes clásicos del cine del terror.

De todas formas aparte de la cistitis, la mucositis y las fiebres continuas, con las que ya llevo ganadas algunas cervezas, me siento bien. Y es que parece increíble que todavía tengan ellos a sus lamentables termómetros de oído, que a mis sensaciones, que día tras día se van mostrando de lo más atinadas. Así que esta mañana ya tuve que desayunar con un Paracetamol, antes de que me pusieran la primera ración de primera plaquetas mientras que para antes de la segunda transfusión, a eso de las cinco, ya he agotado mi segundo comodín. A ver si no cae el tercero con la segunda sesión de plaquetas que suele coincidir con el declinar del día.

Los médicos en cualquier caso se muestran muy optimistas para alguien en mi situación y sobre todo, ponderan de forma muy positiva la recuperación experimentada en los últimos dos días. Ya os he dicho, que no me extrañaría lo más mínimo, que mucha de ella tuviera que ver con Mónica, que hoy de nuevo se ha dejado ver por el hospital, "aprovechando" que venía a traer algunas cosillas.

Por cierto, que ya estoy en modo "look pelao". Lo han hecho este mediodía cuando me disponía a mis quehaceres diarios. La peluquera, puso cuchilla nueva en su dimimuta máquina y en apenas cinco minutos ahí estaba yo, presto pa el rodaje de una nueva peli sobre marines. También es cierrto que mucho trabajo se la había ido yo adelantando estos últimos días, y muy especialmente hoy, cuando de la lucha salí como un Sansón cualquiera en búsqueda de su Dálila.

Para esta noche el planning es reírse de cojones, para lo que el mix cistitis plus Javier Cámara es una muy buena opción. Parto connventaja en ambos aspectos. Reconozco que tengo debilidad por Cámara desde que le viera interpretando al novicio que llegaba a echarle un cable al padre Angel en aquel Ay Señor, Ay Señor,,, y en un estilo que reportaba mejor Agente Povedilla -Carlos Santos- en los Hombres Paco. Los Quién, que es la serie a la que hago mención y que A3 ha trasladado a los miércoles, depués de tenerla un par de semanas en lunes, probablemente no aguante una única temporada, pero yo no le pido nada más que haga conmigo lo que más vale para el tratamiento que el más caro de los componentes químicos: una risa desternillante.

Nada más que contaros. Que Nadal está en semifinales, y que nosotros en nada, con un finde pasado por motos habremos pasado la tercera semana de ingreso. Un fuerte abrazo... "y mañana más".