martes, 14 de junio de 2011

Día 530_30

Son las tres y veinte de este martes de Campo en Oviedo, catorce de junio, cuando comienzo a escribir e Blog.

No voy a enrrollarme mucho porque igual que a mí lo que me cuentan me puede sonar a chiste, lo mismo puede ocurrir con vosotros.

Ayer pasé otra noche cargada de pesadillas, con la garganta seca a más no poder, ingeriendo agua por jeringa como podía y viendo como las horas pasaba lentas como un minuto. Dantesco.

Y hoy de nuevo los médicos vuelven a decirme que todo sigue yendo a mejor, que es cuestion de tiempo. Que ya supero los 2000 neutrófilos. ¿Pero qué pasa entonces con estas defensas que son incapaces de hacer que mejore mi mucositis y pueda ingerir siquiera una triste infusión? ¿Por qué mi cistitis cada vez va a peor y mis coágulos sanguíneos por la sonda urinaria son cada vez más frecuentes y dolorosos? Y ahora encima tengo toda la zona exterior plagada de pequeños hongos que me producen un ardor que no se lo desearía ni al peor de mis enemigos.

¿Por qué si en el escaner parece que no hay nada fuera de relevancia, sigo con estas fiebres que hoy a media mañana me tenían en la cama metido muerto de frío, para luego pasar a un calor sofocante?

Lo siento, pero después de 30 días ingresado estoy que me subo por las paredes. Suerte que las ventanas no tengan manivela para evitar malos pensamientos, porque si esto iba a ser duro, se olvidaron concretarme lo que puede llegar a ser duro. Duro fue el autólogo. Esto no tiene nombre.

Ahora por la tarde me van a empezar a pasar plaquetas para ver si son capaces de subirlas un poco en número y de este modo, que por ejemplo disminuya la concentración de hematíes en mi vejiga. Ya veremos, porque a estas alturas después de no sé cuántas vueltas no paso siquiera de 20 mil plaquetas.

Lo siento, pero hoy no tengo ni fuerzas ni ganas para escribir más. Mis manos -secas y deshilachadas- se solidarizan así con mi voz ausente, que ni yo mismo recuerdo cómo suena.

De momento sólo puedo prometeros como siempre en una cosa en la que nunca os he fallado: "y mañana más."

5 comentarios:

  1. No podemos ni imaginar el sufrimiento físico y psíquico que estás pasando. Sólo alguien que haya estado en tu lugar podría comprenderlo. No me atrevo ni a darte ánimos, me siento incapaz yo no sé lo que podría decir o hacer si estuviera en tu situación. Pero vuelvo a las palabras de Mónica: pasará y volverá la rutina y la calma. Ojalá sea pronto. Sólo espero tus letras de mañana. Y mañana más Fili, y mañana más...

    ResponderEliminar
  2. Ay cariño! tu no puedes ni hablar y a mí no me salen las palabras.Sólo decirte que te quiero y que no debes olvidar que la mente juega un papel muy muy importante en esta pesadilla.Es lógico que la desesperación quiera apoderarse de ti, pero paso a paso sé que puedes. Lo sé.
    Estos días horribles tendrán una recompensa; así tiene que ser y será.
    Confía en quienes te cuidan, porque estoy segura que han visto pasar esta pesadilla a más personas y les han visto triunfar después de tanto sufrimiento.
    Ánimo cariño!
    Miles de besinos

    ResponderEliminar
  3. Creo que la rabia y la impotencia es un sentimiento generalizado entre todos los que os queremos y os seguimos por el blog.
    Como decía tu prima, a mi tampoco me salen las palabras. Se que con lo que estás pasando, es muy difícil darte ánimos y reconfortarte pues los minutos, las horas pasan muy despacio y el dolor es insoportable.
    Sin embargo, Fili, ya llevas 30 días,30 días de superación,30 días menos para alcanzar la meta. Fili, los médicos confían en ti,al igual que todos los que te queremos. Necesitamos que sigas luchando y que sigas escribiendo. No importa lo que escribas, desahógate. Todos nosotros estaremos aquí esperándote, apoyándote.

    Sólo te pedimos una cosa: NO TE RINDAS!! NO OS RINDÁIS!!!!.

    HONOR Yy FUERZAAAAAAA!!!!!!!

    ResponderEliminar
  4. Cuanto más grandes son los repechos, más gente hay animándote.
    Si los médicos dicen que los datos son mejores es que lo son, por tanto, no desfallezcas y sigue peleando. Es una carrera de gran fondo, y cuantos menos kilómetros faltan, más largos se hacen, pero la meta está ahí.
    Ánimo y espero con ganas a leerte mañana porque seguro estarás mejor.

    ResponderEliminar