sábado, 13 de agosto de 2011

Génesis Día 43

Son las doce y media de este sábado trece de agosto, soleado de nuevo, cuando comienzo a escribir el Blog. No hace ni una hora que me he levantado. La boda de anoche pesó lo suyo en mi cuerpo, a pesar de que ni mucho menos me excedí con nada. Y es que volver rozando las tres de la mañana es algo que ya había olvidado.

La boda, pues como todas la bodas, o sea, genial. Los novios guapísimos ambos, los padres más nerviosos que ellos si cabe, los amigos y familiares más jóvenes con ganas de liarla. Para mí fue como una experiencia nueva en muchos aspectos, no en vano volví a probar los embutidos, algo que había dejado nada más detectarme la enfermedad -¡qué maravilla volver a comer jamón!-, o pude echarle unos sorbos al vino y al cava. Por supuesto ni se me pasó por la cabeza tomar un chupito ni una copa. Si estoy así ahora de destrozado no quiero ni imaginarme si hubiera bebido un whisky.

Pero sobre todo fue una experiencia muy agradable el ver de nuevo a gran parte de la familia. Todos coincidieron en que me vieron muy bien, pero bueno, tampoco van a decir otra cosa. Yo sin embargo sí que noté que estoy a años luz de estar recuperado. Apenas pude comer la mitad de cada plato, y eso que estaba todo espectacular, y a la hora del baile estaba ya medio K.O., con lo que no me moví de la silla. Así que al final se mezclaba una doble sensación entre la alegría de sentirme partícipe de un nuevo evento familiar y la tristeza por no poder estar a la altura. Queda mucho todavía para eso. Pero habrá que seguir haciendo bueno el lema que me he grabado en la cabeza y que me repito cada noche cuando a veces no me encuentro muy bien: resistir y seguir siempre avanzando.

Hoy con este día seguro que montamos algo por Quintes y ya puestos en pequeños caprichos, me tomaré un culín -mínimo, os lo prometo- de sidra. Lo del partido por la noche en El Molinón ahora mismo lo veo un poco lejano. Otro tute seguido y más teniendo en cuenta que mañana son los fuegos igual es excesivo para mi cuerpo debilitado. Dependerá también mucho de cómo esté la noche, porque el encuentro empieza a las nueve y media.

Y nada más que contaros. Hoy sí que hace un día de esos de playa que tanto os gustan a la mayoría, así que aprovecharlo. Yo sin embargo escaparé del sol como un vampiro. Aun así no sé cómo leches tengo algo de colorcillo. Supongo que será el aire, que siempre te broncea un poco. Echaré crema por si acaso.

Buen fin de semana a todos... ¡viva los novios!... "y mañana más".

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