viernes, 18 de marzo de 2011

CL

Son las seis y media de la tarde de este viernes dieciocho de marzo, víspera del Día del Padre, cuando comienzo a escribir el Blog. Se ha hecho un poco más tarde de lo habitual así que iré directo al grano, como si fuera una de esas pomadas contra el acné, que por cierto, ahora parece como si no anunciaran tanto como hacían en mis tiempos de adolescente.

Acabamos de volver de Quintes después de una mañana por Cabueñes que fue un poco más cansada de lo habitual. El motivo fue principalmente que hoy al levantarme tenía 37,5 con lo que digamos, no iba con la mejor de las disposiciones posibles para pasar una mañana entera metido en una cama de hospital. Aun así no puedo quejarme de cómo ha transcurrido la mañana, si bien al finalizar, me encontraba muy cansado.

La analítica ha vuelto a poner de manifiesto que mientras por un lado mis defensas responden a la llamada del Neupogen, por otro, tanto la hemoglobina como sobre todo las plaquetas, han continuado con su tendencia a la baja. La hematóloga ha querido tranquilizarme insistiendo en que a la vista de la propia analítica y de mis sensaciones, y a pesar de la fiebre, no piensa que estemos ante un rebrote, por llamarlo así, de la enfermedad. Lamentablemente yo no estoy tan convencido. De todos modos el lunes con la biopsia veremos quién está en lo cierto y ojalá pueda darle la razón.

Si por desgracia mis sensaciones fueran las ciertas, tampoco significaría ni mucho menos que no haya un plan B o C, o el que haga falta. Pero para eso ya habrá tiempo. De momento vamos a centrarnos en la realidad diaria y lo que espero es primero poder pasar un fin de semana lo más tranquilo posible, y aunque sea a base de paracetamol, minimizar las molestias que siempre ocasiona la fiebre.

Ayer dedicaba unas líneas al 150 aniversario de la Unidad de Italia y justo hoy, con un único día de desfase, con esta entrada de blog, se cumplen también las 150 desde que lo reinicié una vez conocida mi recaída. Durante estos meses ha habido un poco de todo, con un inicio bastante duro, pero con unas últimas semanas que estaban siendo francamente increíbles. Quizás por ello me había acostumbrando demasiado a lo bueno y ahora me cueste un poco más de la cuenta volver a colocarme la armadura y el casco para una nueva batalla. Esperando que no sea necesario me despido de vosotros hasta mañana deseándoos como de costumbre un muy buen fin de semana. Un fuerte abrazo… “y mañana más”.

1 comentario:

  1. Descansa Fili, recibe nuestro abrazo más fuerte, caluroso y sincero. Y no puedo decir más que seguimos aquí, apoyándote. Espero que mañana estés un poco mejor gracias a los antitérmicos, y puedas como dices por lo menos pasar un fin de semana sin molestias físicas. Ojalá nos lo escribas pronto. "Y mañana más".

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