martes, 20 de julio de 2010

Día 102

Son las nueve de la mañana de este martes, tercero del sexto ciclo, cuando comienzo a escribir el Blog. Esta noche he dormido bastante mejor que en los últimos días, y sobre todo, me he despertado menos. De hecho he aguantado hasta las ocho y cuarto en la cama, con lo que habré dormido casi las ocho horas de libro.

Ayer lunes tenía a las nueve de la mañana la sesión de aféresis en el HUCA de Oviedo. Salí con mi padre de casa pasadas las ocho, de modo que algo antes de la hora ya estaba con el pijama azul puesto preparado para el proceso. Entre tomarme las vías –una en cada brazo-, preparar la máquina, ponerme un poco de suero previo y realizar una analítica previa, empezaríamos casi a las diez. La primera buena noticia es que la máquina reconoció rápidamente mis células madre, de modo que el proceso duraría unas dos horas y media y no las tres que dura de media. El único inconveniente es que no podría dormirme porque con la mano derecha tendría que apretar cada cinco o diez segundos una pequeña bola de plástico –de esas antiestrés- para favorecer el bombeo de sangre.

El proceso en sí mismo no es en absoluto molesto. No notas nada y lo único que se hace muy pesado es estar tanto tiempo sin poder mover los brazos, que a medida que pasa el tiempo, comienzan a dolerte un poco por la posición. Para pasar el rato me llevé la radio, aunque tampoco me faltó la compañía de la gente que trabajaba allí y que de vez en cuando charlaban conmigo un rato. Mi padre también pasaba cada poco a ver qué tal iba. Así que entre una cosa y la otra, llegamos al final de la extracción hacia la una menos cuarto.

No tardaron ni cinco minutos en confirmarme que se habían logrado obtener las células requeridas con lo que no sería necesario volver otro día. Por lo que me comentaron y en contra de lo que yo pensaba, no es nada raro tener que ir dos veces, e incluso más. Todo depende del estado de la persona y de cómo el Neupogen haya sido capaz de movilizar a la médula. En este caso supongo que mi cuerpo, hasta el gorro de las inyecciones, se espabiló con tal de que no tuviera que sufrir más pinchazos.

Llegamos de vuelta a casa justo para la hora de la comida. Puse el termómetro más por rutina que por otra cosa, y me encontré con que tenía 37,5. Parece evidente que los efectos de las inyecciones tardan un poco en desaparecer, así que después de consultarlo por teléfono con mi médico, me tomé un paracetamol para pasar más tranquilo la tarde, como así fue.

Eché una buena siesta hasta que llegó mi padre a las cuatro para ver conmigo el final de etapa del Tour. ¡Vaya polémica que se montó ayer con el ataque de Contador aprovechando la avería en la bicicleta del líder Schleck! Mi opinión es que el español –quien consiguió el malliot amarillo gracias a esa acción- es libre de tomar la decisión que estime oportuna en cada momento, pero lo que no puede es al final de la etapa como hizo, decir que no se percató de esa avería. Hay que ser coherente y apechugar con tus acciones si crees que han sido correctas. Cuando se recurre a la mentira es porque la conciencia no está tranquila. Por lo que he escuchado esta misma mañana, ahora sí que lo ha reconocido y ha pedido excusas.

Mi padre me había traído un par de paquetes que llegaron a casa de mis padres con cosillas que he comprado para las "vacaciones" en el hospital. De mano una PSP con la que hoy mismo me pondré para aprender a manejar, y unos cuantos libros, entre ellos la trilogía de Aficanus, novela histórica de Santiago Postillo y que se basa en la vida de Publio Cornelio Escipión y Aníbal. Son tres tochos que como me caiga uno de ellos en un pie me lo deja del tamaño de un 50. Me llevaré uno de mano y luego si lo acabo ya pediré que me traigan el siguiente.

Cuando llegó mi mujer y antes de ponernos a cenar, echamos nuestra partida diaria al Parchís, que bueno, ni comentaré. ¡Qué cruz! Menos mal que con la cena para cambiarme el ceño fruncido llegó mi padre con una sorpresa: ¡mi abono del Sporting ya renovado para la próxima temporada! No sé cuándo será el primer partido en el que podré volver a sentarme en mi asiento, pero seguro que será antes que después.

Estuvimos luego viendo el capítulo del día de Ley y Orden –cada vez estamos más enganchados a la serie- y después comenzaba Asturianos por el Mundo. Ayer el programa se desplazó a Miami, una ciudad preciosa para vivir –si se tiene dinero, como ocurre en todos los sitios- salvo por la amenaza de huracanes que cada año sufren. No sé, yo casi prefiero Las Canarias, que con el mismo clima y aunque con menos glamour, te ofrece más tranquilidad en todos los sentidos.

Hoy ha amanecido bastante nublado, y lejos de mejorar se prevé que mañana tengamos otra vez lluvias. This is Asturias. Y mientras escribo estas líneas, os prometo –me prometo- una cosa: “y mañana más…”

5 comentarios:

  1. está bien está tecnología de internet en el móvil aunque te desespera un poco escribir tan lento. contador hizo lo que haría todo el mundo, fue un lance del juego en este caso de la carrera. y con respecto a tú carrera parece que tú cuerpo quiere ganar este partido el sólo, sin ayuda de fuera, dice que el sólo se vale. pues nada a darle caña

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  2. Mola el regalazo de tu padre, esas cosas son las que merecen la pena. Seguro que el antes será muy pronto. Besos, y un poco de sol de Málaga.

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  3. Hola Fili: Ya veo que lo del parchís se ha convertido en un adicción. Tú mismo, pero creo que el tablero va a acabar volando por la ventana, y si no al tiempo... Apuesto un vaso de zumo de naranja a que Moo te vuelve a ganar hoy al parchís. Ya nos cuentas. Me alegro por la renovación del pase del Sporting. Este año el Sporting comienza en casa de los colchoneros... A ver si les damos un disgusto a los campeones de la Huefa (o como quiera que ahora se llame)En Asturias lloviendo y esta mañana en Javea (Alicante) 35º...uffff Menos mal que el aire acondicionado nos ayuda a sobrellevar estos calores... Sólo nos faltan 10 días para nuestra trashumancia hacia Asturias. HONOR Y FUERZA.

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  4. Deja el parchís cariño! ya te dije que tiene años de experiencia, y que lo lleva en los genes; que no veas cómo daben al cubilete...que yo les vi!! que no me daba tiempo a contar y ya me mandaben tirar otra vez!

    Bueno, a darle un poco más al paracetamol para controlar esas decimucas.

    Milones de besinos y rayitos de sol

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  5. Está claro que a cabezón no te gana nadie....

    Como siempre has demostrado que eres un enfermo "muy aplicado" y me alegra que vayas superando las pruebas por encima de la media....

    Por cierto, no sabía yo que te interesaba la novela histórica.... Si te gustan esas novelas hablamos....

    HONOR Yy FUERZA!!!!!

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