domingo, 18 de diciembre de 2011

Génesis Día 170

Son las seis y media de este domingo dieciocho de diciembre, cuando con la compañía de una de las más grandes de la música, Nina Simone, doy inicio al Blog.

Anoche llegamos de la cena con la pandilla cerca de las tres, así que ese es el motivo por el que hoy se me han pegado algo más las sábanas. Me siento un tanto cansado, así que no me enrrollaré demasiado, porque tampoco es que haya excesiva materia para ello.

La mañana ayer comenzó entre chaparrones de agua y fuertes vientos. Con ese escenario lógicamente opté por no moverme hasta que no llegó la hora de subir para Quintes, donde nada más acabar de comer, consagré más de una hora al sagrado sacramento de la siesta.

A eso de las cinco bajamos para ver tranquilamente el partido del Sporting en casa. Con el frío que hacía y teniendo luego cena con los amigos, tampoco era plan de excederse. Y menos mal que así lo hicimos, porque ya no fue la derrota del Sporting sino la imagen de clara inferioridad que demostró la que me hizo agradecer el no estar asistiendo a semejante despropósito en el estadio.

La cena fue una vez más genial. Ahí nos juntamos doce personas, seis parejas, en una velada que se prolongó hasta pasadas la una y media. Pero todavía hubo tiempo para irnos a tomar la primera y a la postre última copa de la noche. En realidad lo que se dice copa apenas la tomaron tres, mientras yo por ejemplo me incliné por un analcohólico combinado de Lima-Limón.

Llegué a casa que no veía la hora de meterme en la cama y no creo que tardara más de cinco minutos en dormirme. Para el día de hoy tenemos nueva cita en la agenda: el concierto de Año Nuevo que hoy se ofrece en el Teatro de La Laboral. ¿Que cómo es eso de un concierto de Año Nuevo cuando ni siquiera hemos pasado la Navidad? Bueno, no sé a quien se le habrá ocurrido ofrecer este anticipo del tradicional concierto con el que todos los años se recibía al nuevo año, pero me parece perfecto. Alguna vez habíamos ido al Jovellanos para asistir a tal evento, pero lo cierto es que estás todavía bajo los efectos del día anterior que tampoco lo disfrutas al máximo. Veremos qué tal esta tarde. Ya os cuento.

A descansar ahora todavía un rato, antes de levantarme a desayunar y tomar las correspondientes pastillas. Hoy me toca además la inyección para las defensas. Voy a ver si mando unas cuantas de estas al vestuario del Sporting...

Un fuerte abrazo para todos, disfrutad del domingo... "y mañana más..."

1 comentario:

  1. Hola Fili: Lo de tomar una copa últimamente se está cumpliendo de forma literal: apenas aguantamos una copa (sin alcohol si hay que conducir)y los bostezos hacen acto de presencia... En fin, hay que adaptarse.Un abrazo. HONOR Y FUERZA.

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