miércoles, 7 de septiembre de 2011

Génesis Día 68

Son la una y media de este caluroso miércoles siete de septiembre cuando doy inicio al Blog. Esta mañana, como todos los miércoles he tenido consulta en Oviedo, así que no hace ni cinco minutos que he entrado por la puerta.

Sé que muchos estáis esperando por los resultados de la biopsia, que en definitiva es lo más importante -o casi-, así que siento desilusionaros pero todavía no tenemos nada. Como mañana es fiesta y el viernes cantidad de gente hace puente, lo más probable es que hasta la semana que viene no sepamos nada. En fin, como siempre, paciencia.

De lo que sí tenemos noticias es del TAC, o sea, del escáner, que no muestra nada anómalo, vamos, que es normal. Como única particularidad tengo el tamaño del bazo lindando el límite superior, pero como digo dentro de la normalidad.

Por lo que respecta a la úlcera, he acudido en primer lugar a la consulta de maxilofacial donde tampoco hemos tenido suerte, ya que tampoco tenemos resultados de la muestra extraída el miércoles pasado. El médico sin embargo me ha comentado que él piensa que no se trata de un afta, pero que hasta que no tengamos esos resultados –que también llegarán la semana que viene- mejor es no aventurarse en nada.

Posteriormente, me volvieron a ver el afta, úlcera, o como queráis llamarlo, en Salud Bucondental, donde también coincidía que hoy tenía consulta. Ahí sin embargo sí que se inclinaron porque se trate de una úlcera causada porque sencillamente me muerdo yo mismo, por lo que se me inflama y causa dolor, provocando además que no cure. Yo estoy más con esta opción porque es verdad que me muerdo con relativa frecuencia en esa zona, pero no ahora, sino de toda la vida, y estando inmunosuprimido como estoy, parece más lógico pensar en esto. Esperaremos no obstante, también en este caso, como prueba definitiva, a los resultados de la próxima semana.

Volviendo a la consulta del trasplante propiamente dicho, comentaros que después de ver las cifras hematológicas –que han descendido de forma apreciable aunque no alarmante- y de referirle los síntomas que mantengo desde hace algunas semanas: malestar estomacal, picores en la piel, la conocida úlcera en la boca y que ahora me duelen los ganglios de la garganta –tengo uno ligeramente inflamado-, todo hace indicar que puedo estar sufriendo un inicio del conocido en el argot como rechazo injerto contra huésped. Por los síntomas sería de tipo agudo más que crónico, pero aquí la barrera entre uno y otro es a veces un poco difusa. Aun así lo vamos a tratar como si fuera agudo, que por un lado sería lo ideal, puesto que la duración del tratamiento es menor y por tanto también la de las molestias que trae aparejadas, en el caso de que seamos capaces de controlarlo, claro está.

Lo del rechazo aunque suene un poco feo, tampoco es para asustarse más de lo debido. Es algo que ocurre con muchísima frecuencia e incluso resulta positivo si se controla, puesto que sirve para reforzar el propio sistema inmunitario. Como os decía, lo vamos a tratar con bastantes variaciones en el tratamiento de pastillas que estaba tomando, añadiéndose por ejemplo una buena dosis de corticoides. Con lo metódico que soy yo para las pastillas, espero adaptarme rápidamente a todos los cambios, fundamentalmente en cantidades y tiempos de toma.

Poco más que deciros, salvo que la semana que viene volveré a repetir visitas al hospital el lunes y el miércoles. Tendremos ahí una primera fotografía del efecto que pudieran producir todos estos cambios.

¡Ah!, del riñón parece la cosa seguir yendo aceptablemente y casi con toda seguridad, que con los corticoides todavía podría mejorar otro poquito, lo mismo que las pequeñas desviaciones en los parámetros hepáticos que ahora mismo presento, y que también son síntoma de ese presunto rechazo.

En cuanto a lo que os refería de las cifras un tanto bajas, no es tampoco nada anormal, y podría estar con estos picos o ciclos bastantes meses; incluso más allá del año y medio o los dos años. Hoy hemos puesto una dosis de Neupogen para subir algo las defensas y seguiré con la EPO, si bien el hematocrito sí que se mantiene estable. Para las plaquetas no queda más que esperar.

Bueno, pues ahora a descansar, intentar comer bien –que sigo sin ganar peso, sino más bien lo contrario- y ya veremos si por la tarde estamos con ganas para dar un paseo, aunque con este calor que hace no es que me apetezca demasiado.

Un fuerte abrazo a todos… “y mañana más”.

2 comentarios:

  1. Hola Fili: Lo del rechazo estaba en el guión, pero hay que controlarlo. El Sr. T quiere sobrevivir como sea, pero está muy acabado. Seguro. A vencerl el rechazo y reforzar tus defensas, como hizo la Roja ayer contra esa potencia futbolística que era Liechenstein o como quiera que se escriba ese pequeño país europeo. A seguir peleando. HONOR Y FUERZA

    ResponderEliminar
  2. Ainsss cuando acabes con el Sr.T. puedes matricularte en medicina, supongo que aprobarás la mitad de la carrera sin mirar un libro. Por cierto, ¿quién rechaza a quién, tu a tu hermano o tu hermano a tí? rechazo injerto contra huesped, parece un título de una peli gore. Vamos Fili, a seguir. Tienes que estar hasta los mismísimos... fuerza.

    ResponderEliminar