domingo, 4 de septiembre de 2011

Génesis Día 65

Son las diez en punto de la mañana de este domingo cuatro de septiembre cuando comienzo a escribir el Blog. El día ha amanecido muy similar al de ayer, con nubes y claros, pero con una temperatura a estas horas ya agradable, y que invita a salir de casa y tomar un poco el aire.

La noche no fue mala del todo. La úlcera sigue dando guerra, pero parece que ha querido ser más benévola conmigo dejándome dormir mejor, aunque fuera a intervalos. En realidad creo que llevo sin dormir más de tres horas seguidas desde hace más de un año. Lo normal sigue siendo despertar cada hora u hora y media a lo sumo. Pero bueno, como siempre os he dicho, eso por otro lado me ayuda a la hora de ir bebiendo y poder así adelantar en los famosos tres litros que tengo que beber al día. A estas horas por ejemplo llevo ya un litro bebido desde que anoche me fuera a la cama.

Por lo que se refiere al día de ayer, fue bastante tranquilo. Preferí quedarme en casa y no subir a Quintes porque me sentía bastante cansado, y de paso, aproveché así para comer por una vez con mis padres. Luego, a pesar de que me había levantado bien tarde para lo que es costumbre en mí, dormí igualmente una buena siesta antes de centrarme en la etapa de La Vuelta, donde pude comprobar que no me equivocaba cuando veía a Nibali algo más bajo de forma que el año pasado. Hoy en l’Angliru se decidirá seguramente media vuelta y en mi opinión, el siciliano no estará tampoco en esta ocasión entre los mejores.

De tarde subí con mi padre a la huerta, algo que también me relaja bastante. Me lo paso genial viendo todo aquel “zoo” que tiene con mi tío ahí montado, con sus gatos, gallinas y conejos. Y ver también cómo van evolucionando las distintas plantaciones que tienen en producción, como digo yo. Os aseguro que luego la diferencia entre un tomate, una cebolla, una lechuga o lo que sea, sacado de esa huerta –como de cualquier otra que uno cuide- está a años luz de lo que se encuentra en los supermercados. Y es que tanto la verdura, como la fruta, o se compra en tiendas de confianza, o su calidad es ciertamente paupérrima. Yo en eso me considero muy afortunado, porque entre la huerta de mi padre y mi tío y la de mis suegros, en casa vamos muy bien servidos. Ahora además que la hematóloga me ha dado el visto bueno para que pueda comer ensaladas, habrá que aprovecharse, aunque antes a ver si curo la úlcera, porque no creo que el contacto con el vinagre me resulte ahora mismo muy agradable.

Para hoy continuaré con mi fin de semana de asueto total. No faltarán las motos y La Vuelta, con algo de tenis de por medio, y quizás incluso vea flashes del Europeo de basket –lo que menos estoy siguiendo-. Hay que reponer fuerzas, aunque sea a base de purés y yogures, que mañana volvemos a la rutina del hospital. Esta semana si no hay novedades me tocará pasarme por el HUCA mañana lunes para una analítica y el miércoles para analítica y consulta en hematología, consulta en SaludBucondental y revisión en Maxilofacial. Un buen miércoles, ¿no? Pero bueno, antes todavía quedan unos cuantos días. Así que paso a paso.

Disfrutad de este domingo, un fuerte abrazo… “y mañana más”.

1 comentario:

  1. Hola Fili: Espero que hayas descansado y disfrutado con los éxitos deportivos en Motos, ciclismo, basket y tenis. Los españoles triunfan. Espero que pronto esa úlcera de la boca desaparezca para que puedas disfrutar plenamente de las comidas. Un abrazo. HONOR Y FUERZA.

    ResponderEliminar