martes, 17 de mayo de 2011

Día 530_2

Son las once y cuarto de este martes diecisiete de mayo cuando comienzo a escribir el Blog. Acabo de despertar después de haberme quedado dormido tras volver de la sesión de radioterapia de esta mañana.

Lo cierto es que esta noche dormí regular porque desde ayer por la tarde he estado con fiebre. Es probable que sea la radioterapia la causante, aunque por si acaso me han tomando hemocultivos para descartar cualquier tipo de virus.

El hecho es que ayer antes de la comida ya comencé a notar que me subía la temperatura, pero fue al volver de la segunda sesión cuando la cosa fue a más, hasta que pasadas las seis superé los treinta y ocho, por lo que me suministraron un paracetamol, que eso sí, me hizo efecto relativamente rápido. Aun así como digo, durante la noche estuve siempre por encima de los treinta y siete, así que a las cuatro y media, para que pudiera descansar mejor, me dieron otro paracetamol.

El mayor problema que estoy notando es la sequedad que tengo tanto en la garganta como en la nariz, que yo creo que es producto de la propia ventilación filtrada que tiene la habitación para prevenir la entrada de bacterias. Será cuestión de beber mucho y a ver si poco a poco me voy también acostumbrando a ello.

Por lo demás hoy por la tarde me queda una nueva sesión de radio que espero no me revuelva demasiado. Aunque es verdad que quitando la fiebre –que ya es bastante molestia- de momento no he notado ningún otro efecto secundario.

Los médicos, que acaban de pasar a visitarme, me han comentado que mis defensas siguen aceptables, si bien para mantenerlas todavía un poco más tiempo así, me van a poner una inyección de Neupogen esta misma tarde. De momento ellos tampoco le dan mayor importancia a la fiebre y salvo que se volviera a repetir de forma continuada en los próximos días, no está previsto que me den antibióticos.

Así que habrá que pasar estos días más complicados lo mejor posible. Ya en el anterior trasplante me tocó lidiar con unos cuantos. Recuerdo el segundo día donde la fiebre se me disparó por encima de los treinta y nueve.

Ahora por ejemplo, que me encuentro mejor, voy a tratar de aprovechar para hacer un poco de bicicleta estática. Ayer por la mañana ya la había estrenado con veinticinco minutillos a ritmo tranquilo.

Mi padre de momento lo está llevando bien. Le explicado la mecánica para hacer sudokus –ese pasatiempo adictivo que todos conocéis- y ahí lo tengo rompiéndose la cabeza con ellos gracias a un librito de sudokus que le había traído para la ocasión. Entre eso, leer, el ordenador, la tele y dar paseos por la habitación, va pasando las horas. Yo por mi parte espero esta noche poder empezar con algo de lectura, que de momento no he leído una página.

Y nada más por este martes. Comentaros simplemente que quizás estos días igual me retraso un poco en la contestación de los mails, porque sobre todo si tengo algo de fiebre, el ordenador me levanta dolor de cabeza e intento por ello no abusar de él. De todos modos, que sepáis que leer sí que los leo todos a través del móvil y como siempre son mi mejor medicina.

Un fuerte abrazo… “y mañana más”.

3 comentarios:

  1. Hola Fili: Bueno, ya has llegado a este primer puerto de tercera categoría, y que ya estás superando. Ánimo, que estamos al principio. A ver si el paracetamol cumple y te baja la fiebre. Un abrazo. HONOR Y FUERZA

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  2. Después de la cuesta arriba empieza la cuesta abajo!!!!! Habrá unas cuantas cuestas, pero al final estará la meta!! Fuerza Fi!!!
    Un besín!

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  3. hola Tito Pippo y compañia

    Pues si que tienes suerte con la fiebre, pero bueno si ellos no le dan ninguna importancia será que no la tiene.
    La sequedad creo recordar que la vez anterior también nos comentabas ese echo, Nada a beber y beber, y luego un poco de agua.
    Recuerda que por internet tambien puedes jugar al parchis con tu mujer.
    Animo que todavía estamos empezando, es la recta final pero la estamos empezando.
    un abrazo

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