lunes, 13 de diciembre de 2010

Día LV

Son las cinco menos cuarto cuando comienzo a escribir el Blog en este lunes lluvioso y desapacible. No sé si será este cambio del tiempo con respecto a los últimos días, pero lo cierto es que me siento bastante cansado, como si se me hubieran descargado las pilas. Tal vez haya sido la visita al hospital esta mañana, que aunque corta, siempre te estresa y fatiga un poco. Además la barriga, que me había dado tregua el fin de semana, parece que hoy quiere incordiarme de nuevo.

Es curioso lo del cansancio porque esta noche sin embargo no dormí demasiado mal y de hecho a las siete estaba en pie como si hubiera dormido doce horas. A las ocho y cuarto nos encontrábamos así ya en el hospital para los análisis de control. Luego tuvimos que esperar una hora larga a que llegaran los resultados para entrar en la consulta. En principio todo sigue bastante estable, pero con una ligera mejoría, sobre todo en las defensas. En opinión de la médico que hoy me atendía –la mía habitual se había cogido el día- la médula parece estar mostrando respuesta, aunque por supuesto no podemos afirmar hasta qué punto está siendo efectivo el tratamiento. Eso sólo lo podrá dictaminar el escáner que haremos como ya sabéis este miércoles y la biopsia, para la cual aún no tenemos fecha.

Así que dado que mis cifras eran más que aceptables, no fue necesario pasar por el Hospital de Día para ninguna transfusión y quedamos en volver a vernos el jueves, donde probablemente sí que al menos necesite de una bolsa de plaquetas, que en previsión, hoy ha quedado ya pedida para que no tenga que esperar luego demasiado.

Pude de este modo desayunar tranquilamente en mi casa pasadas las diez, todo un récord para un día en el que tocaba visita a Cabueñes. Y fue ya justo después de desayunar y de echarle un ojo al correo cuando comencé a notarme muy cansado y con esas sensaciones difíciles de explicar, pero que no te hacen desear otra cosa que no sea echarte y tratar de dormir. Y así lo hice. La verdad es que dormiría una hora pero con todo, al levantarme seguía con el mismo cuerpo pesado como si nada. Si no fuera porque esta misma mañana había hecho los análisis de sangre hubiera jurado que todo tendría que ver con que mi nivel de hemoglobina estuviera por los suelos, pero al contrario, está en unos valores razonables.

Sea como fuere, llegó la hora de comer y devoré el plato para intentar reponer todas las fuerzas posibles. Tampoco resultó porque seguí con el mismo mal cuerpo. Estuve escuchando un poco la radio hasta que llegó mi madre que es con quien estoy ahora hasta que en breve llegue mi mujer. Luego intenté dormir la siesta pero en esta ocasión fue inútil y lo peor de todo es la cantidad de cosas que te pasan por la cabeza cuando uno no es capaz de dormir y siente que lo necesita. Es increíble cómo trabaja la cabeza. Pensamientos que van y vienen sin interrupción y que hacen que cuando te levantas, todavía te sientas más cansado.

No nos queda otra que intentar pasar lo que queda de tarde como buenamente podamos y confiaremos en que mañana sea un día mejor.

Y bueno, que nada más por hoy. Parece increíble cómo pasa el tiempo: hoy se cumplen ya otros cincuenta y cinco capítulos de este Blog. Casi dos meses desde que empezara esta segunda batalla y justo también hoy doscientas entradas en el Blog. Creo que viéndolo así es normal que algún día tenga que estar cansado como hoy, pero aun así os prometo que… “y mañana más”.

6 comentarios:

  1. Ciao Fili!

    A veces estamos cansados sin tener nada, simplemente porque sí, como pa no poder estarlo tú, así un día porque sí!!
    Por otro lado me ha gustado oír eso de que la médula remonte. Ole! Ya vamos pa'rriba!! Espero que tanto el scaner como la biopsia nos den sorpresas muy agradables!!
    Besín

    ResponderEliminar
  2. Hola Fili: Bueno, aunque cansado, no has tenido que pasar mucho tiempo por el hospital. Entiendo que salir del hospital constituya una buena terapia. Pues nada, prepara la muñeca, truca los dados, y a ver si cuando regrese Mónica le ganas al parchis. He apostado por tí. Y si te apetece ver el partido de esta noche, mañana me envías unas líneas con uno de tus magistrales comentarios. HONOR Y FUERZA

    ResponderEliminar
  3. Qué bien que la visita a cabueñes haya sido rápida y positiva.
    Ahora a descansar y a intentar que esa cabecita no dé demasiadas vueltas.
    Miles de besinos

    ResponderEliminar
  4. Fi después de tantas diarreas y dietas light, parece imposible pensar en que no te notes camsado (yo supongo que la tensión no la tendrás muy alta y simplemente eso ya te da el decaimiento).
    Bueno la cosa es que el tiempo pasa, que es lo importante, y seguro que enseguida empezamos a notar los progresos, desde luego nosotros vamos a estar ahí siempre para celebrarlos contigo :)

    Un besito

    ResponderEliminar
  5. Si estás cansado sólo puedo decirte que descanses, que no pienses y te dejes descansar. Yo después de cualquier virus de porquería me quedo como un trapín durante una semana, no puedo ni imaginar cómo tienes fuerzas para escribir todo lo que escribes. Descansa Fili y que el cuerpo se vaya recuperando. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Fili, me alegra que la visita al hospital nos haya traído buenas noticias.Opino como los demás que es normal que estés cansado. El tiempo también puede influir en nuestro estado de ánimo y nuestras fuerzas.

    Besos

    ResponderEliminar