viernes, 30 de abril de 2010

Día 21

Hoy me he levantado mucho más descansado que ayer, ya que para empezar he dormido mejor y apenas me he despertado dos o tres veces. Así que comenzamos la mañana con energía después de haber dado cuenta de un desayuno que podríamos calificar casi como de opulento, de esos que normalmente uno sólo se da cuando está en un hotel y parece que en su vida ha visto tanta comida junta al levantarse.

Ayer volvió a ser un día bastante tranquilo. De momento la quimio me sigue respetando, o mejor dicho, sus efectos secundarios. Sí es cierto que ayer me dolió un poquito la garganta –nada exagerado- por lo que habrá que tener cuidado no obstante, y en especial vigilar la fiebre -de momento sigo si noticias de ella- porque a veces esos dolores de garganta son el inicio de una infección. Como medida de precaución he limitado al máximo las llamadas, porque sí que era algo que notaba, que al acabar el día la garganta me quedaba un poco rota.

El otro día os comentaba el efecto que causan en mi estómago los antibióticos cada vez que recurro a ellos. Curiosamente en esta ocasión, y cuando llevo ya cuatro días tomándolos, no he notado nada. Al contrario, tengo la sensación que la quimio me ha apretado las cañerías, algo realmente milagroso en mí. Así que ahora he pasado de la dieta astringente que me había impuesto como medida de precaución por los antibióticos, a una un poco más rica en fibra. ¡Si es que nunca estamos a gusto con lo que tenemos!

De nuevo por la mañana volví a contar con la compañía de mi padre, que está encantado con el profesor de informática que ha encontrado a cambio de hacerme unos cuantos recados al día. Ahora mismo ya me extraña que no haya entrado ya por la puerta, "arma" en mano, quiero decir, portátil en mano.

Antes de comer llamé a Cabueñes para ver si por fin habían llegado los resultados del PET que había realizado el viernes pasado y para preguntarles por la prueba que tengo que realizar el lunes con mi hermano para comprobar si somos compatibles de cara a un hipotético trasplante de médula ósea. Sobre el PET me confirmaron que ya tenían el informe, y que no había nada reseñable por lo que podía estar tranquilo. De todos modos ya me habían avisado que en principio esta prueba diagnóstica la utilizan más para tener con qué comparar y ver cómo va el tratamiento una vez me la repitan transcurridas las tres primeras sesiones.

Respecto a la prueba con mi hermano, la realizaremos como estaba previsto este lunes próximo a primera hora. No es nada especial. Simplemente te sacan un poco de sangre y la envían en este caso a Oviedo para que allí hagan las comprobaciones pertinentes que determinarán si finalmente podríamos tener el donante en casa. La cuestión es que tal vez se añada a esa prueba uno de los dos primos por parte doble que tengo. ¿Que qué quiero decir con eso de por parte doble? Pues que mis padres y sus padres son hermanos: dos hermanos casados con dos hermanas. Curioso, ¿verdad? Lógicamente al haber doble coincidencia de sangre, las probabilidades de que pudieran ser compatibles son mucho mayores. Ahora mismo uno de estos primos vive fuera de España, pero si fuera necesario -en el caso de que las dos primeras opciones fallaran- también podría unirse a la “fiesta”. Su hermano como digo es probable que venga ya el lunes con el mío.

Después de la comida y de la pertinente siesta, comenzó un día más la sesión deportiva. De nuevo tomó protagonismo en primer lugar La Vuelta a Asturias, que además ayer llegaba a Gijón. La victoria y el liderato fueron para Ángel Vicioso. Después seguimos con el tenis y el Open de Roma –hoy se juegan ya los cuartos- donde vi el partido que enfrentaba a Gulbis –quien que se había cargado en la primera jornada a Federer- frente a mi tocayo, Filippo Volandri. Aunque Volandri estuvo a punto de darle un disgusto al joven letón, al final se quedó nada más que en eso. Pero es justo reconocerle que lo dio todo y más, y cuando uno hace eso, no se le puede recriminar nada. Y para acabar la jornada, y ya después de la cena, tocaba ver al Atlético de Madrid jugársela en Anfield, contra todo un Liverpool. Partido emocionante a más no poder y que tuvo que llegar a la prórroga para que fueran los colchoneros quienes con un gol del uruguayo Forlán, se metieran en la gran Final de Hamburgo del próximo 12 de Mayo. Un gran resultado que de rebote afecta -y mucho- a mi Sporting, puesto que el fin de semana anterior a esa final el Atlético visita El Molinón, con lo que espero que vengan relajaditos y con la cabeza puesta en el partido que jugarán ese mismo miércoles.

Sobre mi progresión en la cinta de andar, decir que ayer subí a quince minutos tal y como estaba previsto, pero manteniendo el ritmo caracol. Hoy probablemente opte por dos sesiones cortas de diez minutos –una por la mañana y otra por la tarde- pero sin subir de momento la cadencia. Para estar en todo momento controlado, mientras estoy en la cinta tengo un pulsímetro para ver cómo responde la “patata”. En ningún caso he superado las noventa pulsaciones, lo que quiere decir que voy bastante sobrado ya que cuando salía a correr podía llegar hasta ciento ochenta sin que me diera un espasmo en el intento.

El día ha amanecido nublado, pero con buena temperatura. Por lo que he escuchado en la radio este finde tocará lluvia y un pequeño bajón en los termómetros. ¡Yo que tenía pensado ir a tomar el sol a la playa! Es broma, por supuesto. Aunque ya veremos dentro de algunas semanas... Y mientras escribo estas líneas, os prometo –me prometo- una cosa: “y mañana más…”

6 comentarios:

  1. Me alegro de que la quimio "se comporte". Mi padre ya lleva 5 sesiones y anda como una rosa de todo, vida completamente normal. Por lo que cuentas, lo tuyo no tiene porqué ser diferente.
    Me tienes a tu disposición para aportar sangre. Yo tengo un montón del grupo sanguíneo "sportinguista A+". Nos puede fallar la letra, pero en el resto hay absoluta compatibilidad.
    ¡VAMOS...!

    ResponderEliminar
  2. parece que la quimio esta ocupada con el sr.T y concentra todos sus efectos en el combate, ojala que continue asi.

    besinos para ti y para monica

    ResponderEliminar
  3. Hola Fili:

    No te preocupes con las compatibilidades. Como ya te comenté al principio me tienes a total disposición y conociendo a nuestros primos y primas pasariamos uno tras otro hasta conseguirlo.( somos muchos o sea que la cosa es segura, tranquilo ). No obstante, con tu fortaleza y moral, lo cual es importantísimo, espero y podría decir que estoy convencido que no haya que llegar a tal estremo. Pero lo dicho, por mi parte estoy listo y preparado, osea que no lo dudes ni por un momento. änimo CAMPEON.

    PD: Dile al tío ( tu padre ), que a ver si va a perder visión de tanto fijar la vista, je,je,je. No seas muy duro con el como profe.

    Santi.

    ResponderEliminar
  4. Hola:

    Somos Jorge y Ana.
    Seguimos tu evolución cada día en el blog. Estamos seguros que pronto nos veremos otra vez en la Vincer, y a pagar la talegada :-)

    Muchos besos

    ResponderEliminar
  5. Hola Fili,
    Con tantos primos que somos no habrá problema en el hipotético caso que hiciese falta un donante, yo, por supuesto me ofrezco gustosamente,así que, como dice el famoso bolero : "si tu me dices ven, lo dejo todo".
    Muchos besinos

    ResponderEliminar
  6. Hola mi amol!
    Ya estamos aquíííiíííí!
    acabo de ponerme al día con el blog, que es algo que eché mucho de menos estos días.
    Sabía que tenías a la mejor enfermera del mundo en casa! y ahora con enfermero cubriendo el resto de los turnos.
    Tranqui, que sigo soltera y sin compromiso. Cuando llegamos a Ranón, estaban esperando mis padres y me encontré con un visitador médico que conozco porque nos servía la EPO en hemodiálisis;nosotras estábamos esperando las maletas y ellos fuera. Pues imagináte la cara de tu tío cuando me vió hablando con "un hombre no identificado" y llegando de un viaje de Cuba. Yo creo que los tenía de corbata pensando que me traía un "mi amol" además de las maletas!
    Un millón de besinos

    ResponderEliminar