viernes, 23 de abril de 2010

Día 14

Esta mañana he vuelto a despertarme como un reloj a las siete y media. Mi cuerpo sigue acomodado a los horarios que eran habituales en mí antes de retirarme a esta especie de monacato que ahora practico. Pensándolo bien, en realidad nunca en mi vida he necesitado del despertador para levantarme por las mañanas a la hora que fuera preciso. Bueno, salvo cuando por circunstancias de la vida –vida social para ser exactos- uno se iba un poco más tarde de lo aconsejable para la cama.

Ayer por la mañana me tocaba estar a las nueve en Oviedo para el PET/TAC. Ignorante que es uno pensaba que se trataba únicamente de una prueba que se denominaba así, pero no: en primer lugar tocaba hacer un TAC –lo que vulgarmente conocemos por un escáner- y luego ya hacer el PET.

El TAC apenas me llevó media hora entre prepararme y realizarlo. A diferencia de Cabueñes, donde antes de pasar por el aro –nunca mejor dicho porque como sabéis pasas el cuerpo por dentro de una especie de donut metálico- me dieron a beber contraste como para una boda, en esta ocasión no fue necesario, sino que directamente me lo inyectaron en vena. Aunque pueda parecer más desagradable os puedo garantizar que resulta una solución mucho mejor por lo que se refiere a los efectos secundarios, puesto que con el brebaje de Cabueñes, no veáis cómo se me soltaron las tripas apenas una hora después de acabar. En este caso no hubo que salir corriendo para visitar a Roca, lo que siempre se agradece.

Lo que resultó mucho más largo fue el PET. En primer lugar ya me llamó la atención que me preguntaran que qué tal dormía y si tomaba algo por las noches. Tampoco es que les fuera a importar mucho mi respuesta porque ya tenían preparada una pastilla de Valium para que me la tomara. Me dijeron que era para que los músculos estuvieran más relajados. Luego procedieron a inyectarme el contenido que había en una jeringa con apariencia un poco chunga, como metálica –luego me enteré que era glucosa marcada, FDG-. La gracia fue que entonces la enfermera muy amablemente me invitó a que me echara en una camilla que había en la sala, me cubrió con una manta, y me dijo que ahora tocaba descansar, para lo que además apagó las luces y cerró la puerta de la sala. Así que allí estaba yo: en una camilla, con la luz apagada, calentito por la manta y con un valium en el cuerpo. No creo que haga falta decir lo que pasó durante la hora que tenía que estar en reposo a la espera de que lo que me habían inyectado hiciera su efecto. Una vez pasó ese tiempo, me llevaron ya entonces para realizar el PET, que duró también un buen rato: media hora larga como poco. El aparato visualmente es bastante similar al escáner pero digamos que utiliza una tecnología totalmente distinta.

Los resultados de la prueba me han comentado que podrían tenerlos para principios de la semana que viene, pero en absoluto cambiarán nada de lo establecido en el tratamiento, que como ya os he dicho comienzo este lunes en Cabueñes. Simplemente servirán como punto de comparación para ver cómo evoluciona la enfermedad –y si le estamos dando en todos los morros- cuando repitamos de nuevo la prueba transcurridos los tres primeros ciclos.

Por la tarde supongo que el valium todavía estaría haciendo de las suyas porque nada más acabar de comer y de escribir el Blog me eché una "señora" siesta. Luego me dediqué a ver un poco de tenis, concretamente el Conde de Godó. Ya sabéis que yo sería capaz de sobrevivir con Teledeporte y Eurosport las 24 horas. Y por la noche por supuesto no me perdí el Atlético de Madrid Liverpool, que sinceramente me defraudó por el poco fútbol que se vio.

Hoy es viernes y se plantea un día tranquilo, lo mismo que el fin de semana. El lunes será cuando toque apretarse el cinturón porque comenzarán las curvas. Pero eso sí: os garantizo que yo no soy de los que pisa el freno a la mínima. Tal ves sea el motivo por el que me han llegado las multas que me han llegado… Y mientras escribo estas líneas, os prometo –me prometo- una cosa: “y mañana más…”

5 comentarios:

  1. me alegro mucho de que el lunes, por fin, saltes al terreno de juego, sabes que cuentas con el apoyo de toda la aficion, y que estaremos ahi para animarte siempre que lo necesites

    mucha suerte y un abrazo muy fuerte para monica

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  2. Hola Fili:

    Ayer, no pude leer tus comentarios pues los jueves me quedo en Cornellana y allí arriba no dispongo de internet, pues de momento no hay cobertura 3G. recuerda que el partido lo tenemos en empate y a partir del lunes comenzamos el asedio al area rival. Descansa mucho el finde y el lunes al toro que al la primera vamos a destrozar al Sr. T. Respecto al tener algo de miedo, es normal y yo diría que aconsejable, pues solo los piraos o inconscientes carecen de él y adivina quienes son los primeros en caer. El miedo, con control es una defensa con que la naturaleza nos ha dotado para poder salir airosos de momentos puntuales (aumento de adrenalina, más sensibilidad de de la vista, oido, etc.), es decir nos prepara para tener más posibilidades de salir airosos. No se debe confundir con el pánico. En fín tú eres valiente y calculador pero respetando ( lo justo ) al rival como debe ser. Ánimo y como te he dicho recarga pilas para el lunes y sigue aprovechando las minivacaciones que estoy super seguro de que ya te quedan pocas. Un abrazo muy fuerte y fuego a discreción al Sr. t ( fíjate que a partir de ahora lo pondré con minúsculas pues ya está acorralado y acojo....).

    Santi.

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  3. Fili, no me ha quedado claro lo de "...además apagó las luces y cerró la puerta de la sala. Así que allí estaba yo: en una camilla, con la luz apagada, calentito por la manta y con..." Dime la verdad: ¿la enfermera se quedó o no en la sala? Cuándo dices "No creo que haga falta decir lo que pasó durante la hora que tenía que estar en reposo..." Caray Fili, no voy a decir lo que pienso porque Moo también lee el correo... je, je. Como dicen Lucía y Santiago, el lunes empieza el partido y la afición estamos a tu lado. Un abrazo.

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  4. Un abrazo para todos,y para tí ,!ya sabes!toda mi energia(bueno,déjame una poquita)y un beso grande.

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  5. ¡cómo me suenan las pruebas que me cuentas! Ya no recordaba muchos detalles. Me gustó mucho la frase del otro día en el que decías que el lunes empieza tu proceso de curación y que no lo interpretas de otro modo. En Cabueñes seguro que te atenderán unas personas muy agradables que trabajan en oncología, y aunque sentirás de nuevo la sensación de qué hago yo aquí, o ¿Es verdad que me está pasando esto? pero seguro que te sentirás en las mejores manos. Hay una enfermera o auxiliar que se llama Gloria,ya me contarás si la has conocido.

    Un abrazo muy fuerte. La semana que viene comenzarán los momentos más duros quizá el efecto secundario de los ciclos. Ojalá sea lo más leve posible. Seguimos aquí, y estamos contigo y con los tuyos.

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