viernes, 24 de febrero de 2012

Génesis MMXII (Vigésimus Primus)

Mens agitat molem
La mente mueve la materia (Virgilio)


Son las dos menos diez de este veinticuatro de febrero, viernes, cuando doy inicio al Blog. Tenía previsto que fuera más tarde porque eso sería sinónimo de que lo estaría escribiendo desde casa, pero lamentablemente no va a poder ser. Me toca pasar una noche más ingresado, eso si todo va bien.

De mano tanto la tarde de ayer como la noche la pasé aceptablemente: sin fiebre y sin apenas molestias, salvo la de tener que ir al baño cada poco por culpa de la cantidad de sueros y líquidos en general que me continúan suministrando. El problema surgió esta mañana cuando en una de estas idas al baño, me dio un pequeño mareo que hizo que doblara la rodilla, pero que no fue a más. Sin embargo, ya más tarde, a la hora del desayuno, al ir a lavarme un poco me dio un buen latigazo y me caí, o eso dijeron los enfermeros. En realidad me dejé caer, que para eso jugado tantos años como extremos y uno aprende a tirarse en el área... Bromas aparte la fortuna es que me desmayé pero de forma controlada sin que golpeara con mi cuerpo en ningun sitio. Simplemente fue más el susto que produje con el estruendo de todos los goteros yéndose por el suelo y el palo por otro. No recuerdo gran cosa, salvo que durante los breves segundos que estuve inconsciente, estaba plácidamente dormido, soñando incluso. Luego al despertar, me tuvieron tirado un rato hasta que fui recuperando, y al encontrarme ya bien, me llevaron de nuevo a la cama. Estos cambios continuos de tensiones altas a bajas es lo que ha llevado a los médicos a aconsejar que me quede un día más para ver si conseguimos controlarlo.

Por lo demás, las cifras están ahí, salvo las defensas, que ahora sí han caído mucho por culpa de la acción de la quimio, de modo que en ese sentido podríamos decir que estoy casi aplasiado. Es por ello que me han aconsejado, que con independencia de que al final me den el alta mañana, algo que ahora mismo si os soy sincero veo improbable, intente estar lo más tranquilo posible en casa, y sin moverme tampoco sin nadie a mi lado que me acompañe para evitar alguna caída indesable.

Así que nada, eso es lo que tenemos. Yo que ayer me había acabado ya el libro de El Médido -fantástico por cierto-, pensando en empezar hoy en casa ya uno nuevo, probablemente su continuación, Chamán, me tendré que conformar con otra cosa que pille por aquí.

Bueno, lo importante es que dentro de lo que cabe, esto no es sino otro paso más hacia el objetivo que tenemos entre ceja y ceja. A ver si mañana el Sporting me alegra el día con una victoria en Santander. ¡Venga Clemente!,¡espabílame a esos guajes! Un fuerte abrazo... "y mañana más".

2 comentarios:

  1. !hola Fili, seguimos tu blog desde H.de Cabueñes y te queremos preguntar si no tienen botellas para mear en el HUCA, no te andes levantando tanto al wc que nos vas a matar a sustos.Hasta mañana que seguiremos fisgando otro poco lo que escribes nos gusta mucho.

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  2. Hola Fili: Déjate de paseos por los pasillos, o acabarás con un chichón. Ahorra esfuerzos, que vienen momentos difíciles. Lo de la aplasia es realmente un peñazo, pero será unos días. Si te ha gustado El Médico, Chamán también te gustará. Te recomiendo la biografía de Steve Jobs,de fácil lectura y muy interesante. Como decían en la película, que la FUERZA TE ACOMPAÑE. Un abrazo. HONOR Y FUERZA

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