miércoles, 20 de octubre de 2010

Día I

Son las seis de la tarde de este veinte de septiembre cuando comienzo a escribir el Blog. Lo hago sentado en mi cama del hospital donde estaré “alojado” al menos hasta el lunes, de cara a la ventana, desde donde puedo ver la hermosa ladera de Cabueñes donde a estas horas el sol todavía ilumina las privilegiadas casas que ocupan esta zona privilegiada de Gijón.

Hoy cuando me disponía a escribiros pensaba en qué podía hacer para que a la vez que este Blog os sirva de información sobre cómo van las cosas, me resulte también útil a mí –más aún de lo que siempre lo ha sido- para afrontar con el mejor de los ánimos posibles este reto que tengo delante de mí. Vuestros mensajes de apoyo han sido la mejor de las medicinas posibles y estoy seguro que sin ellos no habría llegado tan lejos. Lo que pasa es que cuando pensábamos que estábamos llegando a la meta nos han dicho por sorpresa que tenemos que dar una vuelta más. Así que os voy a contar un secreto: cuando salía a correr y por mi cabeza aparecía la tentación de pararme y abandonar, lo que hacía era liberar mi mente y fugarme a lugares o recuerdos donde me sentía feliz. De este modo me olvidaba de la sensación de esfuerzo y seguía avanzando. Para cuando quería darme cuenta había alcanzado la meta. Y eso es lo que voy a hacer en estos próximos capítulos del blog: os iré narrando pequeños flashes de mi vida, sin pretender en absoluto transformar esto en unas memorias –que para eso hay que ser alguien muy importante o estar próximo al final y yo no cumplo ninguno de los dos requisitos-, pero que seguro que más de una os resultará curiosa y os ayudará tal vez a conocer un poco más sobre mi carácter un poco peculiar.

¿Por dónde empezamos? Bueno, en esta ocasión y sin que sirva de precedente seré ordenado y comenzaré por el principio. Muchos de vosotros sabéis que para mi desgracia –que nadie se ofenda, sabéis que lo digo en broma- nací en Oviedo. Mis padres habían llegado de Suiza donde ya habían tenido a mi hermano, pero una vez que decidieron trasladarse a España a vivir, ya con mi madre embarazada de mí, prefirieron hacerlo antes de que yo naciera para facilitar las cosas. ¡Lo que yo les hubiera agradecido que se hubieran esperado a que como mi hermano hubiera nacido en Suiza! ¡Eso sí que luce! Por aquellos años la zona de la Cuenca era un buen lugar para asentarse, y además ahí vivían mis abuelos maternos, así que los tres primeros años de mi vida transcurrieron en Sama de Langreo, justo delante del parque. Como por aquel entonces no existía el Hospital de Villa, fue por ese motivo por el que fui a nacer en Oviedo, un secreto que he tratado de mantener con poco éxito en secreto. Afortunadamente mi carnet de identidad italiano no hace referencia a ese hecho.

De esos tres primeros años como supondréis apenas tengo recuerdos. Sé que mis primeros meses fueron complicados y que pasé algunos de ellos en el hospital por culpa de problemas estomacales. Sin embargo ya por aquel entonces mi cuerpo demostró que hacía falta mucho para poder conmigo y conseguí salir adelante. Lo poco que guardo en mi mente son como fotografías aisladas en las que corro por el parque de Sama, persiguiendo las palomas y las hojas. Mi vicio además por lo que me han contado era el ir todos los días al kiosco ambulante del parque con una peseta en la mano para que el kiosquero nada más verme llegar me diera una galleta de chocolate que sí recuerdo envuelta en su papel de plata de color rojizo por fuera. El problema de comunicación surgió el día que yo no quería ya la galleta de chocolate y aquel buen hombre se empeñaba una y otra vez en dármela ante mi desesperación y las risas de mis padres.

Volviendo al presente comentaros que hoy hemos iniciado la quimio. De momento a parte de los líquidos normales para hidratar mi cuerpo me están administrando dos tipos de quimioterapia que mantendré durante los próximos cuatro días. Es un poco complejo porque mientras que una de ellas es una bolsa que tarda dos horas en ser administrada, la otra es para tenerla veinticuatro horas al día. Es decir, que tengo una máquina infusora permanentemente funcionando y que gotita a gotita va introduciendo el medicamento en mi cuerpo. Así que tengo que andar con el palo del gotero todo el día a cuestas, pero evitando moverme demasiado para que la máquina no se obture y tengan que venir a solucionar el problema. Cuando acabemos el domingo con estos dos medicamentos, cerraremos el ciclo con la administración de un tercer componente de la quimio, con lo que si todo fuera bien, tal vez el lunes o el martes pudiera recibir el alta. A partir de ahí tocarían los análisis oportunos para ir vigilando mi evolución y de este modo determinar cuándo realizaríamos el segundo ciclo, que sería idéntico a éste, es decir, con ingreso de unos cinco o siete días aproximadamente.

Al mismo tiempo que me van poniendo la quimio me siguen realizando transfusiones puntuales de sangre y plaquetas, además de continuar con las inyecciones de Neupogen para mantener las defensas en cifras seguras.

Y nada más por hoy. De momento está siendo un día muy tranquilo y sólo pido que siga así porque sin duda me ayudará a ir recuperando cada vez más confianza. Un fuerte abrazo a todos… “y mañana más”.

11 comentarios:

  1. Comenzamos todos contigo... en pelotón.

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  2. Presente, me coloco en mi fila del pelotón, y en marcha.
    Me ha encantado este giro de tu blog a contar tus recuerdos. Emocionante. Yo ya sabía tu origen carbayón, y tu deseo de ser Suizo. Pero no tenía ni idea que ya desde bebé le habías dado tanta lata a tu madre... Quiero leer más recuerdos, mañana más.
    Besos tamaño XL.

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  3. ¡¡¡Bien Fili!! Leer este blog nos llena a todos de satisfacción y ánimo. Sigue escribiendo como hoy, ya tengo ganas de leer los recuerdos de tu juventud, ja, ja, seguro que habrá mil historias divertidas... Lo que no sabía yo era lo de que naciste en Oviedo, pero bueno, nadie es perfecto.
    HONOR Y FUERZA.

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  4. Hola cariño!! lo de nacer en Oviedo es una p. que nos hicieron a todos los de la cuenca nacidos antes y en el 75...pero bueno, luego se nos perdona por ser de la cuenca minera!
    Suizo?....como los bollinos y los relojes? quita quita!! con Pau ya tenemos bastante!
    Animo que vamos todos caminando contigo; ya sabes a pasito lento, pero seguro.
    Te quiero

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  5. Un besito Fi, me encantó tu historia de hoy :)
    yo también en el pelotón..de cabeza..por supuesto...je,je,je

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  6. De la cuenca y nacido en Oviedo :) Qué combinación tan buena!!! Yo diría que la mejor :) :) :) Y si después se acaba viviendo en Gijón, entonces ya insuperable!!!!!!!! :D
    Y ahí estás tú pa demostralo!!!!
    Vamos Fili!! Tú si puedes!!!!!
    Besinossssssssssssssssssssssssssssssssssss

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  7. Hola cariño, aqui estamos todos como siempre "empujando".
    Al narrar hoy tus primeros pasos en la vida me trae recuerdos...., me acuerdo de tu casa en Sama, del parque, no suelo pensar en esos primeros años pero contigo los voy a rememorar.
    Sigue así , que nosotros tus incondicionales seguidores, seguiremos enviandote la fuerza y los rayinos de sol (aqui hace buen tiempo todavía) que necesites para conseguir la victoria final.
    Besinos

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  8. ¡Que desilusión¡ Yo que pensaba que lo que siempre habías querido es ser de Bilbao y ahora me sales con estas.
    Si cambias de opinión, ya sabes que los de Bilbao nacemos donde nos sale de los caprichos, por lo que estás a tiempo.
    Un abrazo, amigo.

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  9. Me gustan las ganas e ilusión que pones para rebasar este muro. Los grandes retos siempre han tenido muros en momentos puntuales que se han tenido que pasar.
    Vamos...ya queda menos.
    PD:Una vez superado lo de nacer.......... en ese lugar, que otro reto te puede preocupar.

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  10. Hola Fili! Mucha fuerza y ánimo!! Todos estamos contigo!!
    Eres tan grande, que estoy seguro de que en esta "vuelta de más" vas a marcar el mejor tiempo y batir el récord del circuito.
    Un abrazo muy fuerte!!

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  11. hola fili

    yo no soy aficionada al ciclismo ni al futbol, pero como sabes me encanta la formula 1 y por eso cuando hablas de "dar una vuelta mas" me viene a la cabeza Hamilton que se convirtio en campeon del mundo en la ultima curva de la ultima vuelta de la ultima carrera, asi que valor y al toro y ahora que has empezado el recorrido (siempre supe que en cuanto te repusieras un poco volverias a la lucha sin dar tregua al enemigo) ya te quedan menos curvas y menos vueltas para llegar vencedor a la meta

    muchos besinos

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