(Adriano Celentano)
Chi non lavora, non fa l'amore
(Letra y traducción al castellano Letra y traducción )
Son las diez y media de la mañana de este catorce de
noviembre, miércoles, cuando comienzo a escribir el Blog. No hace ni media hora
que me he levantado y acabo de desayunar. Últimamente no es que duerma mucho
mejor, pero lo que sí consigo es alargar las horas en la cama por la mañana.
Antes, en cuanto veía un rayo de luz entrar por la persiana me levantaba como
un resorte. Sin embargo ahora, son precisamente esas dos horas adicionales las
que mejor me sientan. Serán cosas de la edad.
Lo que sigo cuidando al máximo es mi desayuno. Esta mañana Mónica
me tenía preparado un señor zumo de naranja recién exprimido, al que añadí un
el habitual café con leche, un par de rebanadas de pan tostado con su
jamoncito, un trozo de tarta de calabaza cortesía de mi tía y unos cereales.
Tampoco quería pasarme demasiado teniendo en cuenta las horas que son. Que
luego se junta casi con la comida.
Aprovechando que hace un día muy agradable voy a salir a dar
un paseo por Gijón. No os voy a negar que me pica la curiosidad por ver cómo
está la ciudad de paralizada o no por la huelga. Estoy seguro que a medida que
transcurra el día todo irá recuperando la normalidad, si es que a estas horas
no la ha ya recuperado.
Esta tarde tengo la sesión diaria de radioterapia, que ahí sí
que no entienden de huelgas. Si fuera por la mañana podría preocuparme por la
posibilidad de encontrarme con algún problema en las carreteras, pero siendo de
tarde, a esas horas, imagino que estará todo libre.
La radioterapia de momento la llevo muy bien. No he notado
ningún efecto secundario aunque ya sé de la otra vez que en realidad los efectos
empiezan a evidenciarse cuando llevas diez sesiones más o menos, y que luego
por supuesto, el efecto de la radio perdura una vez que has acabado con el
tratamiento, durante unas cuantas semanas. Será al cabo de un mes cuando haga
el escáner para ver si ha sido o no efectivo.
En cuanto a mis sensaciones tras el ciclo de Rituximab de
ayer y la infusión de linfocitos os diría que no he notado nada raro. Al
Rituximab estoy más que acostumbrado y en cuanto a la infusión, si bien el
rechazo podría llegar en los próximos días, al haber sido una cantidad muy
pequeña, no creo que vaya a pasar nada. En caso contrario tendré que quejarme a
mi hermano.
Para mañana me toca otra consulta por Oviedo, en este caso
con Radioterapia precisamente para evaluar qué tal llevo el tratamiento. Luego,
hasta la semana que viene no tengo que volver hasta la Unidad de Trasplante
para una nueva analítica de control. Como veis aunque justo ayer cumplí un año
y medio desde mi trasplante, sigo con más visitas al hospital de las que me
gustaría, pero es lo que hay y no me sorprende que sea así, porque cuando
realicé el trasplante sabía perfectamente que hay personas que tardan años en
recuperarse. Yo sólo puedo dar gracias de estar dentro de lo que cabe bien.
Cuando veo las fotos de hace un año, o las de hace dos, me doy cuenta de lo que
he mejorado. Quizás en el día a día sea más complicado, pero viéndolo con
perspectiva no hay duda de mi mejoría general. Ahora como suelo decir, sólo
hacen falta unos pequeños ajustes.
Como sé que a algunos os gusta saber a qué dedico mis horas
de lectura y ocio en general, deciros que sigo con leyendo el libro de El Mago
de la Guerra, de David Fisher, basado en la historia real de Jasper Maskelyne,
uno de los magos británicos más aclamados del siglo XX y cuya misión consistió en tratar de engañar a
los alemanes mediante el ilusionismo para crear ejércitos falsos y realizar
engaños de todo tipo. De lo más entretenido. En cuanto a nuestras series de
televisión para las noches, ahora nos dedicamos a intercalar unas cuantas para
ir variando. Estamos así viendo la segunda temporada de Sons Of Anarchy, la
primera –y única- de The Finder, la cuarta de Castle y ayer mismo empezamos
también con la primera de Doctora en Alabama.
Y nada más por hoy, no vaya a ser que me entre por la puerta
un piquete. Bueno, en realidad el piquete lo tengo en casa que ya me está
diciendo que basta de escribir, que hay que salir a dar un paseo. Pues eso. Os dejo con una canción muy apropiada para el día de hoy. Un
fuerte abrazo… “y mañana más”.
Hola Fili: Cuidado con la del piquete que tienes en casa, que aunque no te queme nada seguro que es mucho más persuasiva que cualquier sindicalista convencido. Cuidadín por la calle, y a disfrutar de la mañana. Un abrazo. HONOR Y FUERZA
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