sábado, 26 de enero de 2013

viernes, 25 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.14)


Nunca exijas nada a la vida, espera, y algún día la vida te dará una sorpresa maravillosa
(Anónimo)

L'uomo più semplice - Vasco Rossi

Son las ocho y media de la mañana -minuto arriba minuto abajo- de este viernes veinticuatro de enero cuando comienzo a escribir el Blog. Viernes veinticuatro de enero. ¿Os habéis dado cuenta de que casi casi hemos finiquitado el primer mes de este 2013? En mi caso, tal vez influenciado porque ha sido un mes muy intenso con motivo del nacimiento de Nadaya, me ha pasado volando.

El día en Gijón ha amanecido gris y todo apunta a que seguiremos con la misma tónica de las últimas jornadas: frío y lluvias puntuales. Lo tópico en estos casos es resignarse diciendo aquello de "es lo que toca", pero eso no evita el que deseemos -yo por lo menos- ver el sol de nuevo cuanto antes y poder así salir a dar un paseo sin miedo a pillar un catarro o resfríado.

Catarro que como sabéis ya he cogido y que sigo con él. Hoy me he levantado un poco mejor, al menos aparentemente, aunque ahora mismo tengo treinta y siete de temperatura. Como os decía en el último post, lo que más me fastidia es que no habiendo sufrido ningún catarro ni gripe en los tres años que llevo con la enfermedad, habiendo estado en momentos puntuales tan bajo de defensas, lo vaya a pillar ahora con Nadaya en casa y encima, como todo apunta, se lo haya contagiado. Hoy la llevaremos al pediatra para que le haga un pequeño chequeo, aunque quiero creer que más allá de la tos molesta que de vez en cuando le entra, no tiene nada más. Como digo yo, es tan pequeñita que ahí dentro no puede coger ningún bicho. En fin, que lo peor es que parece que ahora la que empieza a tener algún síntoma también es Mónica. Vamos, que estamos cayendo uno tras otro como fichas de dominó.

Así que desde aquí entono el mea culpa por haberme descuidado y haber traído a casa a este invitado no deseado. Seguramente me confié llevado por mi buen estado y estuve en ambientes con demasiada gente a mi alrededor, algo que siempre insisten los médicos que debo evitar en la medida de lo posible, sin olvidar tampoco el que pudiera haber pillado frío con mis continuas idas y venidas haciendo recados por las mañanas, cuando todavía la temperatura es muy baja. Lo que estoy seguro, por si alguien lo duda, es que mi catarro no tiene nada que ver con que fuera el domingo al estadio a ver el Sporting. Ahí es imposible coger frío. Al contrario, con el espectáculo lamentable que estamos acostumbrados a presenciar, lo que puedes es recalentarte.

De momento lo que hice fue ponerme en contacto con la Unidad para comentarles mi estado y acordamos adelantar mi próxima cita, inicialmente programada para el próximo ocho de febrero. Hoy me llamarán desde la Unidad para decirme qué día habré de ir. ¡Olvidad lo que acabáis de leer en este párrafo! Justo ahora me han llamado para que me pase esta misma tarde y hacer un pequeño chequeo. Lo habitual en estos casos: analítica, lavado nasal, placa de pecho y auscultación general. Casi que lo agradezco. Quedaremos todos mucho más tranquilos.

Por otra parte, esta noche la he pasado un poco mejor que las últimas, aguantando en la cama hasta las siete de la mañana. Y es que sigo durmiendo muy poco por los corticoides, y eso que he bajado la dosis. Tampoco descarto el que esta bajada en los corticoides pueda ser la causante de mi ligera febrícula. Habrá que vigilarlo y si continuará así, debería retomar la dosis que inicialmente me prescribieron. El sueño es algo que siempre digo que es fundamental. Cuerpo descansado vale dinero, y en mi caso, este dicho es más cierto si cabe. Procuraré por ello retomar también mis siestas de hora y media o dos horas.

Comentaros también que ayer por la mañana estuve en el Centro Médico realizando una ecografía para la consulta de Urología a la que había acudido el lunes. Ahora, con el resultado de esa ecografía, junto con una nueva analítica, veremos a ver si somos capaces de descubrir la causa de mis molestias, y sobre todo, de ponerles remedio. Es curioso como se cumple aquello de que algo que te preocupa, deja de hacerlo cuando por desgracia de repente, te invade una preocupación aún mayor. En este caso digamos que el tema del catarro ha hecho que me olvide un poco de todo lo demás. Os aseguro que estoy haciendo todo lo posible por solucionarlo cuanto antes, sometiéndome para ello a los tradicionales remedios caseros: miel y limón en ayunas, zumo de naranja, vahos de eucalipto, etc. Además bebo unas infusiones -Alpenkraft se llaman- especialmente indicadas para afecciones de las vias respiratorias. Ya sabéis mi afición por las infusiones, así que no podían faltar en este caso tampoco.

Si habéis llegado hasta aquí leyendo, entonces os merecéis conocer una primicia que seguro a más de uno le sorprenderá, de igual modo que me sorprendió a mí cuando me hicieron la propuesta que os voy a comentar. El tema es que muy pronto este blog desaparecerá tal y como ahora lo conocéis. Bueno, para ser exactos lo que ocurrirá es que cambiaremos su dirección de acceso a una sin duda mucho más atractiva. voy a dejarme de tanto misterio y os lo diré sin más rodeos: parece ser que en La Nueva España hay personas que siguen mi blog y que han considerado que podría tener cabida como espacio propio, dentro de los distintos blogs que el reconocido diario asturiano ofrece en su versión digital. Así que esa es la propuesta que me han hecho llegar: que Y Mañana Más dé el salto a la edición online de LNE como un blog más de los que ahora mismo existen ya en ella.

No hace falta que os diga la ilusión que me ha hecho recibir esta noticia, aunque también os digo que he meditado la respuesta antes de aceptar su proposición. Este blog nació como sabéis para manteneros informados sobre mi estado, desde que hace tres años me diagnosticaran el linfoma. Pero lo que comenzó siendo una especie de parte médico -egoístamente creado para evitarme repetir la misma información un montón de veces- fue evolucionado, manteniendo eso sí la primera premisa que me planteé al crearlo: que iba a intentar por todos los medios que fuera un blog positivo y optimista, y que a través de él pudierais comprobar como a pesar de mi enfermedad, podía llevar una vida más o menos normal. Así comencé a hablaros de un montón de cosas -y sigo haciéndolo-: de música, de deportes, de literatura,,, y de mi vida personal. Quizás esto sea algo que ahora tenga que medir un poco más, pero aun así, quiero seguir manteniendo en el nuevo espacio donde publicaré mi blog, el estilo que hasta ahora he llevado, un estilo que por lo que se ve, gusta a bastante gente. No quiero parecer pedante, pero lo más bonito que me han dicho sobre el blog, lo hizo un gran amigo quien me confesó que tenía a una conocida suya enganchada a mi blog, y que le decía que sin conocerme personalmente, al leerlo todos los días, era como si yo hubiera pasado a ser alguien muy cercano, familiar.

Os aseguro que no tengo miedo a las críticas que pueda recibir -uno tiene que saber aceptarlas y aprender de ellas-, sino que lo que más me preocupa en estos momentos, es el que en contra de mi propósito, que es el de poder servir de ayuda -que no de ejemplo-, para otros enfermos o familiares de éstos, pudiera haber quien se sintiera mal al leer alguno de mis comentarios porque en ocasiones es cierto que minimizo o trato de hacerlo, lo duro de esta enfermedad. Y es que este tipo de enfermedad es muy personal, y cada uno la lleva como buenamente puede. No hay recetas mágicas por lo que cada enfermo buscamos nuestra forma de sobrellevarla. En mi caso por ejemplo, escribiendo este blog.

De todo modos, os mantendré informados para que en cuanto sea publicado el primer blog de esta nueva andadura de Y Mañana Más, tengáis a vuestra disposición el enlace correspondiente para poder acceder a él. No hace falta que os diga que aunque pueda ser que se incorporen nuevos miembros, y que por supuesto serán bien recibidos, vosotros, mis más fieles seguidores, seguiréis contando con mi eterno agradecimiento.

Por hoy me despido. Os dejo con el nuevo single de mi cantante italiano favorito, uno de esos viejos rockeros que nunca mueren, Vasco Rossi. Después de pasar por una situación delicada a nivel de salud, no se ha resignado a "jubilarse" y nos ha regalado a todos su miles de fans su nuevo trabajo, L'Uomo Più Semplice. Disfrutad del fin de semana que se avecina... "y mañana más".


miércoles, 23 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.12)


Un verdadero amigo es quien te toma de la mano y te toca el corazón
(Gabriel García Márquez)

Eros Ramazzotti - Un Ángel Como El Sol Tú Eres

Cuando son las ocho menos cuarto de este miércoles veintitrés de enero, doy comienzo al Blog. Esta noche he vuelto a pelearme con la almohada. Me había echado muerto de sueño hacia la una y pensaba que como en las dos últimas noches, dormiría por lo menos hasta las seis, pero lejos de ello, a las tres estaba completamente desvelado. Como no soy de los que aguantan en la cama más de cinco minutos si no es dormido, me levanté y me puse con el ordenador a pasar desde mi móvil algunas fotografías que ayer había tomado de un viejo libro de mi colegio de infancia, para luego colgarlas en Facebook en un grupo que hemos formado antiguos alumnos del Codema de la promoción del 90. Concretamente las fotos que colgué se corresponden al año escolar 1980/1981. Por aquel entonces andaba yo por tercero de EGB. Os dejo la foto y como en el juego de buscad a Wally, os invito a que tratéis de encontrarme. Tenéis que pinchar en la foto si queréis que se abra completamente.

Aparte de mis pequeños desajustes con el sueño, estos días lo que ando es con la garganta un tanto tomada. Supongo que el frío ha acabado por hacer mella en mí y como digo, sin llegar a la categoría de catarro o resfriado -que espero que no llegue- sí que me noto tocado. Para evitar precisamente que pueda ir a más, una vez hablado con la Unidad de Trasplante, me han sugerido tomar un antibiótico a modo de profilaxis. Es el típico antibiótico que se toma durante tres días consecutivos, en este caso, Azitromicina. Por supuesto, no dejo tampoco a un lado los remedios tradicionales como vahos de eucalipto, miel con limón en ayunas o unas infusiones que utilizo en estos casos -se llaman Alpenkraft-, pues está indicado para favorecer la apertura de las vías respiratorias mejorando la respiración en procesos gripales y catarros. Básicamente lleva hierba de llantén, raíz de regaliz, hierba de tomillo, hinojo y hojas de malvavisco. Ya sabéis que yo soy muy de infusiones, así que en ese sentido la tomo con gusto.

Lo que más me preocupa es que Nadaya parece que anda también con los mismos síntomas. Quiero pensar que ha sido ella quien me lo ha pegado, porque pensar lo contrario como que me fastidia bastante al hacerme sentir culpable... De todos modos tampoco parece que la cosa vaya a ir a mayores aunque tenemos que vigilarla por si su estado empeorara. De momento sigue comiendo con normalidad y eso sí, dormir no duerme demasiado bien, pero eso es algo que ya arrastra desde que nació. Me parece que nos ha salido una niña trasnochadora.

Este lunes acudí al urólogo para consultar las molestias que sigo teniendo desde hace meses y que con toda seguridad están relacionadas con las complicaciones que tuve durante el trasplante alogénico, donde a causa de una cistitis hemorrágica estuve con sonda durante más cuarenta días. Lo primero que vamos a hacer es ver cómo está la vejiga y los riñones, así que este mismo jueves me harán una ecografía para luego valorar en función de lo que vean en ella. La verdad es que no tengo muchas esperanzas de que me vayan a solucionar nada y mucho me temo que este será uno de los "recuerdos" que me queden de mi trasplante, pero de ser así, tampoco me preocupa lo más mínimo, porque no es que sea excesivamente molesto. Al final, como a todo, acabas por acostumbrarte.

Por lo demás poco más que comentaros. Básicamente que el tiempo horrible que estamos teniendo estos días nos está impidiendo salir mucho de casa, y menos ir a dar un paseo con Nadaya. Me paso así la mayor parte del día enganchado al ordenador, escribiendo mis cosas, respondiendo mails, pero tampoco descuido la lectura de la prensa, que está la cosa últimamente muy caliente en lo que se refiera al ámbito político económico. Con tanta corrupción de por medio parece que hasta nos olvidamos de la crisis galopante que sigue azotando el país.

Lo malo de estar tanto tiempo interneteando, es que al ser yo una persona de "dedo fácil", gasto más en casa sentado que si estoy por la calle dando un paseo. Todavía ayer recibía en casa un paquete con una serie de productos ¡de cosmética! Mónica como ya me conoce se lo tomó con humor. Yo es que reconozco que siempre he sido un poco ¿metrosexual? -¡puf, qué poco me gusta esa palabra! Mejor decir presumido a secas. Menos mal que no salí un Brad Pitt porque si no, no habría quien me aguantara. Pero eso, que siempre me ha gustado cuidarme y no me duelen prendas en confesar que con cierta regularidad uso mis cremitas, que si la reparadora, que si la antifatiga... Y que nadie ahora venga de "macho ibérico", que no sé quién será entonces el que compre también este tipo de productos, pero lo cierto es que su venta se ha disparado en los últimos años casi de forma exponencial.

En fin, que después de esta pequeña confesión, deciros que con medio catarro o sin él, sigo encontrándome muy bien, sobre todo en lo que se refiere a mi estado de ánimo. ¡Que siga así! Por hoy nada más. Con Eros Ramazzotti y su nuevo trabajo de fondo me despido de vosotros. Un fuerte abrazo... "y mañana más".





domingo, 20 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.09)

La vita rimane la cosa più bella che ho - La vida sigue siendo la cosa más hermosa que tengo
(E da qui - Nek)

E da qui - Nek) (VideoClip)

Traducción al castellano E Da Qui

Son las cinco de la mañana cuando comienzo a escribir el Blog, en este domingo 20 de enero, y en el que parece que se ha calmado en parte el temporal que azotó ayer esta región y tantas otras en la Península. La ciclogénesis explosiva al final por lo que dicen los entendidos en la materia, se tornó en tormenta tropical. ¡Quién me iba a decir a mí que en Asturias íbamos a "disfrutar" de una tormenta tropical como si esto fuera el Caribe! En fin, que como digo parece que lo peor ya ha pasado, y aunque se anuncia un domingo pasado por agua, la situación no será tan complicada como resultó ayer, con inundaciones en algunas zonas de Gijón.

Alguno igual se pregunta qué hago a las cinco de la mañana escribiendo este post. En realidad llevo levantado desde las cuatro de la mañana, y eso que me eché a dormir a la una y media. Pero son los dichosos corticoides que me hacen estar en un permanente estado de vigilia. Es un efecto secundario que ya os he comentado en numerosas ocasiones, pero que bueno, es el precio que hay que pagar por mitigar algunas molestias que de lo contrario, tendría a raíz de mi enfermedad. Ya se sabe que los medicamentos que te curan una cosa, te fastidian otra, pero hay que valorar siempre beneficios sobre perjuicios, y en consecuencia decidir. Ya sé aquello que dicen de que "a quien madruga Dios le ayuda", pero por favor Dios mío, que no hace falta que me "ayudes" tanto. Ahora en serio, espero que con la bajada en la dosis -paso de 30mg en días alternos a 20mg- se solucione en parte este pequeño insomnio, que por otro lado, tampoco me viene mal para estar más atento a cualquier cosa que Nadaya pueda necesitar por la noche.

Justo ahora que os decía lo del tiempo, está cayendo un buen chaparrón. Tenía pensado esta mañana ir al Molinón a ver el partido que el Sporting juega contra el Numancia a las doce, pero echándolo por el Plus y con este tiempo, no sé, ya veremos, pero ahora mismo apostaría a que lo veo por la tele. Pero también me conocéis y lo mismo luego me da el arrebato y me largo para el estadio, aunque sea como la semana pasada cuando me fui para allá al descanso a ver in situ la segunda parte.

Quería aprovechar este post en el que apenas tengo novedades que contaros, para disculparme por algunos comentarios que algunos tratáis de publicar, y que se quedan pendientes de moderación. A veces se me puede quedar por ahí alguno sin darme cuenta de él, pero intento que más tarde o más temprano, aparezcan en el Blog. La razón es que según tengo configurado el Blog, comentarios que se quieran añadir dos o tres días -ahora no lo recuerdo- después de la publicación del post, requieren de moderación. Pero que vamos, os aseguro que los leo y los publico. Y por supuesto, los agradezco enormemente. Hoy me he fijado además que tengo nada menos que 99 seguidores apuntados al Blog. ¿Quién será el número 100? Emoción, emoción.

Para esta próxima semana como os anticipé en el post del viernes, no tengo citas en la Unidad de Trasplante. Pero sí que habré de ir igualmente a Oviedo, concretamente mañana. Tengo una cita con urología para ver si podemos solucionar las molestias que sigo teniendo ya desde hace más de un año; concretamente desde que pasara por el trasplante autólogo y en él, sufriera una cistitis hemorrágica que me tuvo con una sonda colgando -os podéis imaginar de dónde- durante más de treinta días. Ya os aviso que no contestaré a preguntas sobre los efectos "secundarios" de llevar colgado peso de una zona tan delicada durante tanto tiempo. Tampoco soy de los que anda todo el día metro en mano...

Ayer, una vez más, subimos a Quintes para la comida. Nos dimos un buen homenaje -para variar- y de confesar públicamente -lo que no significa que me arrepienta- que igual se me fue un poco la mano con los culines de sidra. Pero bueno, si uno no puede darse de vez en cuando ese placer, pues entonces apaga y vamos. Además, siendo sidra natural de casa, es imposible que me siente mal. Y aunque la comida estuvo protagonizada por el marisco, tengo que decir públicamente -y que nadie piense que hago la pelota- que lo mejor fue el postre, que consistió en arroz con leche casero hecho por mi suegra. La prueba está en que colgué la foto en Facebook y hubo muchos comentarios sobre la buena pinta que tenía aquello. He recibido incluso por teléfono la petición de algún tupper para su cata en una próxima ocasión.

También alguno se quedó el otro día intrigado por el tema de mis asuntos con el Consulado italiano. Tranquilos, que no tengo ningún problema con la justicia... La verdad es que este año me caduca el pasaporte, y que como además tengo la Carta D'Identità -lo que sería aquí el DNI- también caducada, pues tengo que ponerlo todo en orden. Y de paso, actualizar mi situación personal. Porque aunque debería haberlo hecho, a efectos del Consulado, sigo estando soltero, y por supuesto sin hijos. En fin, rollos míos que yo mismo me busco; como dice Mónica "sarna con gusto no pica", y es totalmente cierto en mi caso.

Para este post os he dejado propuesta una preciosa canción de Nek, uno de mis artistas favoritos. Es curioso que mucha gente ahora le haya sorprendido el hecho de que su verdadero nombre sea también Filippo, como si eso fuera algo extraño. Pero bueno, supongo que será porque les hace gracia que se llama como yo -que no yo como él-. Pero a lo que iba, que es una canción que si leéis la letra traducida en el enlace que os dejo, entenderéis por qué me gusta tanto.

Nada más por hoy. Voy a ver si sigo con mis "historias". La próxima semana os contaré qué tal sigue todo, y espero que como en esta, todo sean buenas noticias, y que la protagonista de este Blog poco a poco vaya siendo la que ya es no princesa, sino reina de la casa en toda regla. Yo de mi corona hace tiempo que abdiqué. Un fuerte abrazo, disfrutad del día... "y mañana más".





viernes, 18 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.07)


Reírse de todo es propio de tontos, pero no reírse de nada lo es de estúpidos
(Erasmo de Rotterdam)

Stars -Simply Red

A la una en punto de este viernes, dieciocho de enero, doy inicio al Blog. El día amaneció entre lluvias y a estas horas que os escribo, no parece que vaya a mejorar. Se anuncia fin de semana pasado por agua, así que habrá que tirar de paraguas si queremos salir a dar un paseo.

Esta mañana como ya os había anticipado tenía analítica y consulta en Oviedo. Sobre la analítica pocas variaciones, salvo que la hemoglobina sigue mejorando, de modo que aunque he dejado de administrarme EPO desde la pasada semana, mi nivel de glóbulos rojos en la sangre se encuentra mejor que nunca. Por su parte las defensas también están casi rayando la normalidad, por lo que todavía espaciaremos un poco más las inyecciones de Neupogen. Y de las plaquetas, ¿qué os voy a decir ya de mis plaquetas que no sepáis? Que ahí siguen, en valores ciertamente muy bajos, pero por lo menos estables lo que me sigue permitiendo "pasar el corte" sin necesidad de transfusiones. De todas formas si las necesitara, tengo a la mejor donante del mundo esperando: la futura madrina de nuestra pequeña Nadaya. Sus valores de plaquetas son de auténtico récord y a ella han recurrido en numerosas ocasiones cuando necesitaba de forma continua transfusiones de plaquetas.

En la consulta hemos aprovechado para comentar el resultado del escáner. Mi hematóloga me ha confirmado nuevamente que la impresión es que mi estado general es manifiestamente mejor respecto a todos los nódulos linfáticos que me habían surgido durante el año pasado, y que habíamos tratado con distintas líneas de quimio primero, y con algo de radio después. Continuaremos así con el tratamiento que tenía pautado, consistente en las infusiones de linfocitos -la próxima fijada para el próximo ocho de febrero- y de Rituximab -cada dos meses, la próxima el veintiuno de febrero. Seguiré asimismo con los corticoides, aunque intentaremos bajar un poco la dosis, concretamente de 30 a 20 mg en días alternos. A ver si con esta pequeña reducción mejoro a la hora de pasar las noches sin estar tanto en vela. Esta madrugada sin ir más lejos a las tres de la mañana estaba con los ojos abiertos como una lechuza. Afortunadamente, al tener a Nadaya también casi toda la noche activa, digamos que no hay mal que por bien no venga, y los corticoides me ayudan a estar más activo y despierto por si la pequeña necesita de cualquier cosa.

Y nada, que aunque no me lo crea, hasta el ocho de febrero no tendré que volver por el HUCA, día en el que como os acabo de anticipar, pondré una nueva infusión de linfocitos. ¡Hasta el ocho de febrero! Es una sensación extraña la que siento. Por una parte alivio de poder pasar tanto tiempo "despreocupado", pero otra, te sientes un poco "desprotegido" al no tener cada semana un control que te diga cómo están las cosas.  Pero ahora mismo la situación por suerte es la que es, y salvo cualquier imprevisto, sería innecesario que pasara por la Unidad antes de esa fecha. Que bastante trabajo tienen. Hoy aquello era un hervidero de gente. Uno lo piensa fríamente y no puedo sino pensar qué narices estaremos haciendo mal para que cada día surjan nuevos casos de personas que se ven afectadas por este tipo de enfermedad. No os niego que esta percepción in situ de realidad te hace por una parte sentir la tristeza de ver tanta gente enferma, y por otra, me hace también considerarme afortunado dentro de lo que cabe, porque estoy como estoy, y perfectamente podría no ser así.

La mejor noticia eso sí que hoy he tenido al visitar la Unidad ha sido ver de nuevo a una hematóloga que lleva largo tiempo de baja por enfermedad. Ella me trató al inicio de mi recaída, cuando nos preparábamos para el trasplante alogénico, y a ella le debo también el estar hoy escribiéndoos y contándoos lo bien que me encuentro. Un gran refuerzo -ahora que en el fútbol estamos en pleno mercado de invierno- para la Unidad, tanto a nivel personal como por supuesto, profesional. ¡Bienvenida!

No quiero enrollarme más por hoy, que además mi estómago me va pidiendo "combustible". Pero no quiero cerrar sin hacer referencia a mi encuentro también esta mañana con un buen amigo, nada menos que el vicecónsul italiano en Asturias, otro de mis incondicionales de este Blog. Aparte de servirme como clase intensiva de conversación en italiano -lo cual me viene de miedo para mis charlas con Nadaya-, hemos estado hablando de temas míos referidos a papeleos que tengo pendientes, y que son los que hacen que Mónica, cada vez que le hablo de ellos, le apetezca darme un buen tirón de orejas, para que de una vez por todas me deje según ella de tonterías, y me nacionalice español. Y yo os aseguro que quiero enormemente a este país, pero vamos, que por ahí va a ser que no paso...lo siento. Cada uno es como es. Y cómo decía el empalagoso personaje Flanders en los Simpsons a su fiel esposa, "ya sabías de mi carácter cuando te casaste conmigo". Es una frase que siempre que recordamos, hace que nos echemos unas buenas risas. Quien conozca la serie y al personaje me entenderá.

Un fuerte abrazo, buen fin de semana... "y mañana más":

martes, 15 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.04)


El éxito es aprender a ir de fracaso en fracaso sin desesperarse
(Winston Churchill)

We Are The Champions - Queen (Live Wembley 1986)

Cuando son las seis menos cuarto de la mañana de este martes quince de enero -ya se nos ha ido la mitad del primer mes del año-, doy comienzo a este Blog. La verdad es que no tenía pensado escribir nada hasta el viernes después del post que había publicado ayer mismo, pero las noticias que ayer recibí, y que muchos de vosotros ya conocéis, hacía obligatorio el que hoy publicara de nuevo.

Y es que ayer a mediodía, recibí la llamada de uno de mis hematólogos del HUCA. Teníamos el resultado del escáner. Os podéis imaginar mis nervios al teléfono antes de conocer el "veredicto". Y os podéis imaginar también el enorme alivio -porque eso fue lo primero que experimenté- al conocer que del escáner se desprende que mi situación actual ha mejorado notablemente con respecto al último realizado, justo antes de empezar con las sesiones de radioterapia. Las lesiones en forma de nódulos linfáticos que tenía presentes en buena parte de mi abdomen han desaparecido en su mayor parte, y apenas quedan mínimos restos sin importancia, que podrán ser tratados sin recurrir a quimio, simplemente manteniendo el actual tratamiento.

No os voy a negar que durante estas últimas semanas andaba con la mosca detrás de la oreja, y así os lo había comentado en más de una ocasión. Mis sensaciones no eran muy buenas, pero también es cierto que todo pareció desatarse con el estrés de los días previos al nacimiento de Nadaya, donde estuve bastante nervioso y liado. Y no menos cierto fue el hecho de que una vez nacida nuestra pequeña, mi estado ha ido mejorando paulatinamente, apoyado también en la ligera dosis de corticoides que me pautaron. Pero a pesar de esa paulatina mejoría, ni mucho menos me esperaba el resultado que ayer me dieron. Me imaginaba que algo habría y que bueno, tal vez hubiera que recurrir de nuevo a la quimio o algo de radio. Estaba ya mentalizado para ello. Por eso, al oír de boca de mi hematóloga que el informe del escáner indica que la enfermedad está controlada y que no hay ningún motivo para pensar en una recaída, he sentido como os digo, una sensación similar a si me hubieran quitado plomo de los pies.

Sin embargo, tengo que deciros que por quien más me alegré fue por Mónica. Ella es quien más se merece esta noticia, quien más se merece este pequeño gran éxito que ahora saboreamos. No es fácil la convivencia con un enfermo; no todo el mundo vale para ello. No hay recetas máginas. Cada persona es un mundo y nuestros cambios de humor en ocasiones son insoportables para quienes están a nuestro alrededor, pues son en ellos en los que descargamos nuestras frustraciones, miedos, iras... Sin embargo, ella ha sido mi apoyo inquebrantable durante estos tres largos años y sólo espero que esta tregua que ahora parece querer darme la enfermedad, nos permita tanto a ella como a mí, disfrutar al máximo de lo más importante que tenemos ahora: nuestra hija Nadaya. Espero que en esta ocasión, me perdone por publicar una foto suya sin su permiso. Como a todas las mujeres, eso de salir en una foto sin estar guapa -en su opinión por supuesto, porque en la mía siempre lo está- es tabú y está totalmente prohibido. Quedan exclusivamente para "consumo" doméstico.

Ahora más en serio, al final, y a pesar de como os digo, estar tan felices con la noticia recibida, tampoco podemos engañarnos: esto no es sólo sino una tregua como escribía antes. Como me comentaban el otro día en la Unidad de Trasplante, "aquí no se da nunca el alta". Y es que la enfermedad está y estará siempre ahí, ahora adormecida; y podría estar así años -¡ojalá!-, pero podría desatarse mañana. Eso es algo con lo que también hay que aprender a convivir y no perder el tiempo en pensar en esa posibilidad. Porque es inútil preocuparse en el presente por algo que no sabemos si va a darse en el futuro. Y en ese sentido creo que sí que he mejorado durante todo este tiempo. Y buena parte de la "culpa" de este aprendizaje, la tiene una persona que me ayudó desde el punto de vista psicológico, manteniéndome en pie y sin permitir que arrojara la toalla, por más que en ocasiones estuviera tentado de hacerlo. Yo siempre fui muy crítico y escéptico con eso de recurrir a la ayuda de un profesional de la psicología, pero con ella, que ahora es como si fuera una amiga de toda la vida, mi percepción ha cambiado por completo.

Y por supuesto, no puedo dejar de daros las gracias a todos los que me habéis animado y que habéis seguido mi lucha como si fuera la vuestra propia. En vuestras muestras de cariño muchas veces encontré la fuerza para no bajar los brazos. En cierto sentido me sentía en deuda con vosotros y quería demostraros que  vuestra apuesta por mi éxito, por nuestro éxito, no estaba equivocada. Como ayer le comentaba a un gran amigo de mi infancia, tal vez por primera vez en mi vida, el hecho de ser tan competitivo para todo, el tener tan mal perder, me ha servido para no rendirme. En fin, que comprenderéis por ello seguro el motivo de mi elección para la canción con la que abro el post. En el fondo representa mi agradecimiento para todos vosotros. Somos sin duda los campeones de este nuestro mundo.

Así que ahora, y a la espera de confirmarlo este viernes en la consulta, la idea es seguir con el actual tratamiento que consiste como sabéis en dosis periódicas -cada mes o dos meses; esto está por decidir- de Rituximab, combinadas con infusiones de linfocitos, la próxima de las cuales ya está programada para el próximo ocho de febrero. Por otra parte, de momento mantendremos igualmente los corticoides, aunque probablemente los vayamos disminuyendo progresivamente. A ver si con ello, puedo dormir algo más, porque desde que empecé con ellos, mis horas de sueño han disminuido de forma drástica. Me encuentro hiperactivo prácticamente día y noche, y eso, tampoco es bueno. El cuerpo necesita descanso, aunque los corticoides te hagan sentir lo contrario: que puedes con todo.

Esta noche sin ir más lejos me acosté pasadas las dos de la mañana. Hasta las doce que Nadaya acabó con su toma nocturna, estuvimos viendo la tele -seguimos con nuestras series bajadas en el disco duro; algún día os hablaré de con cuáles estamos concretamente-. A esa hora, no sé por qué, pero lo cierto es que me entró un hambre como si no hubiera comido en todo el día, así que de buenas a primeras, ahí estaba yo: a las doce y cuarto comiéndome un par de pasteles, que en teoría había comprado para desayunar esta mañana. Después, lógicamente estaba más despierto si cabe, y me dediqué entonces a montarle un pequeño juguete que nos han regalado para Nadaya. Así que entre una cosa y la otra, para cuando apagué la luz, eran cerca de las dos y cuarto. Y esta mañana, a las cinco y media ya me encontraba de nuevo en pie. No hace falta señalar que lo primero que hice fue dar cuenta de un copioso desayuno. No entiendo cómo es posible que con todo lo que estoy comiendo sea incapaz luego de llegar siquiera a los setenta kilos.

Bueno, ahora os dejo que voy a seguir con "mis cosas". A las nueve o así me iré como todas las mañanas a hacer unos recados. Estoy hecho una auténtica maruja yendo de tiendas de aquí para allá. A ver si tenemos suerte y el tiempo acompaña un poco y podemos salir luego a dar un paseo con Nadaya. Si os soy sincero no he visto ni la previsión, pero tiene pinta de estar como ayer, es decir, frío y con lluvias ocasionales, algunas de ellas de cierta intensidad.

Un fuerte abrazo, muchísimas gracias de nuevo por vuestro apoyo constante, y tened por seguro que... "y mañana más..."







lunes, 14 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.03)

Tú no te irás, mi amor; y si te fueras, aún yéndote, mi amor, jamás te irías
(Rafael Alberti)

Romanza - Andrea Bocelli

Cuando son las cuatro y diez de la madrugada de este lunes, catorce de enero, comienzo a escribir el Blog. Por la hora en que lo hago, seguro que os imaginaréis que sigo teniendo pequeños desarreglos con mi sueño, como consecuencia de la toma de corticoides, toma que por otra parte, me está ayudando a encontrarme mucho mejor desde que comencé con ellos. De todos modos espero que el viernes cuando vaya a la revisión, podamos disminuir en parte la dosis. A ver si así consigo dormir algo más. Ayer de noche, para que os hagáis una idea, no me entró el sueño hasta casi las dos de la mañana... y ahora ya veis, a las cuatro ya estoy por aquí dándole al teclao. Y por si fuera poco, desayunado; que desperté con hambre como si no hubiera cenado nada. Tengo que seguir vigilando mi peso para ver si esa pequeña tendencia negativa está controlada. La semana pasada había llegado a mi mínimo de sesenta y ocho kilos.

Os preguntaréis si no me aburro tanto tiempo despierto. ¡Para nada! Intento mantener la cabeza ocupada organizando mentalmente -o apuntando incluso- las tareas que habré de hacer al día siguiente, escribo alguna que otra cosilla, interneteo, respondo emails pendientes... En fin, que cuando quiero darme cuenta han pasado las horas y toca ya entonces vestirse para salir a hacer esos recados. Aunque ya veremos hoy si es posible, porque con el día de lluvias que se prevé, tal vez haya que posponer algunos planes. Ayer ya fue un día donde la lluvia y el frío fue protagonista durante casi toda la jornada.

De ayer sin duda destacaría que al final no pude resistirme y aunque vi la primera parte del partido del Sporting en el bar debajo de casa, al descanso, aprovechando que parecía que no tenía pinta de volver  a llover, me fui hasta el estadio para ver el segundo tiempo in situ. Eso sí, iba tan abrigado que pasé un calor como si estuviera en pleno verano. Pero mejor que sobre que no que falte... Estuve además viéndolo con Manolo, un gran amigo de la pandilla de siempre, así que no me arrepentí para nada de haberme acercado por la vera del Piles. La pena fue el resultado del partido: empate y a seguir de esta forma alejados del objetivo del ascenso, que podréis tildarme de optimista compulsivo, pero sigo teniendo esperanzas de que puede darse a final de temporada. Si algo he aprendido durante todo este tiempo es a que nunca hay que renunciar a los objetivos que te marcas. A veces pueden tardar en conseguirse, pero si se pone todo lo que uno tiene, y si la suerte pone su granito de arena, todo es posible. Es cuestión de fe y perseverancia.

Después del partido me volví a casa a buscar a Mónica y Nadaya para irnos juntos a Quintes, donde pasamos el resto del día. Nadaya sigue como siempre, o sea, para comérsela. Mi "papitis" es ya crónica, y lo que es "peor", parece que va a más a medida que pasa el tiempo. Es cierto que este primer mes ha sido muy duro sobre todo para Mónica, que apenas puede dormir, pero aun así, creo que hemos sido muy afortunados por tener una niña tan buena. La pobre se queja cuando hay que quejarse, o sea, cuando tiene hambre. Al final su padre no deja de hacer lo mismo, ¿no? Y sí, es verdad que ahora está cogiendo un poco el vicio de querer pasar cuanto más tiempo en brazos mejor y que caemos con facilidad en su "chantaje" emocional, pero, ¿quién no lo haría?

Ayer de tarde contamos además con la visita de la que será su madrina. No faltaron las fotos para inmortalizar el encuentro. Creo que tanto la madrina como su futura ahijada disfrutaron mutuamente de su compañía. En ese sentido, estamos convencidos de haber elegido inmejorablemente.

Para esta semana como os digo no tengo visita prevista a Oviedo hasta el viernes. No obstante mañana, o como mucho pasado, intentaré llamar para ver si tenemos algún resultado del escáner. No es que por llamar antes o después vaya a cambiar el resultado, pero es fácil de entender que uno quiere saber lo que hay cuanto antes.

Y nada más por este pequeño post. Me despido de vosotros deseando que tengáis una feliz semana. Los lunes son duros, lo sé, pero todo es relativo y depende con la actitud con la que se afronten. No tengáis prisa porque pase la semana, que día que pasa día que no vuelve. Particularmente me encantaría que se detuviera el tiempo para ver a Nadaya siempre como lo que es ahora: un precioso bebé que nos regala paz y felicidad. Un fuerte abrazo... "y mañana más".


Descansa,
Mi preciosa niña;
Que nada,
Perturbe tus dulces sueños;
Me basta,
Con ver tu carita;
De hada,
De un maravilloso cuento;
Que acaba,
Tan sólo de empezar;

Tranquila,
Que yo velaré guardia;
Mi vida,
Es ahora toda tuya;
Princesita,
Tu risa es mi savia;
Bendita,
Cuna de mi cuna;
Sonrisa,
Hurtada a la luna.

Descansa,
Mi preciosa niña;
Mañana,
Será un nuevo día;
Mas nada,
Hará que disminuyan,
Mis ganas,
De oír esa melodía,
Que cantas,
Cual jilguerillo libre de jaula.


sábado, 12 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 00.01.01)


Tú, que lo mereces todo, aunque todo te ofrezca, será siempre poco
(Schin 2013)


Justo a las tres y media de esta madrugada del viernes al sábado doce de diciembre, mientras escucho de fondo la música de André Rieu -hoy os traigo como propuesta uno de sus mejores conciertos-, comienzo a escribir el Blog.

Os preguntaréis cómo es que a estas horas me dedico a escribir en lugar de estar durmiendo como debería... La respuesta es muy sencilla: los corticoides me mantienen activos como si estuviera permanentemente dopado y como si eso no fuera bastante, a esto se le une mi inutilidad para ver la hora. ¡Me levanté pensando que eran las seis y cuarto en lugar de las tres y cuarto que eran en realidad! Y bueno, una vez levantado -menos mal que no me puse por el desayuno-, pues aquí me tenéis. Así gano algo de tiempo para más tarde, porque espero con todo poder echar una cabezaduca en cuanto acabe con este post. 

Antes de ir a las aventuras de Nadaya o a las más aburridas historias de su padre, quisiera tener un recuerdo especial para una persona, un amigo con el que coincidí desde mi época de Preescolar hasta acabar la Universidad, y que en el pasado jueves, se cumplía un año de su repentina e inesperada marcha. Cuando ocurre algo así, no existe forma material de llenar el vacío que su ausencia deja en las personas -muchas en este caso- que le querían y apreciaban. No obstante, quedará para su familia y amigos la mínima satisfacción de comprobar cómo el jueves la Iglesia de San Lorenzo estaba llena como si de un domingo se tratara. Es la prueba más evidente del valor que Vicente -que así se llamaba y sigue llamando mi amigo- se había ganado entre quienes tuvimos la suerte de conocerle.

Pero aunque sea un tópico a veces cruel, la vida sigue. La vida al final es una sucesión o combinación de alegrías y tristezas y lo que hemos de tratar es que las primeras, por pequeñas que puedan parecernos, consigan reducir y aplacar a las segundas, por grande que por el contrario éstas puedan ser. Fácil es decirlo; difícil lograrlo. Así pues como digo, la vida sigue y ayer se cumplía precisamente el primer mes de nuestra pequeña Nadaya. Para celebrarlo como se merecía, organizamos una comida familiar en Quintes, donde he de reconocer, quizás se me escapó un poco la mano con el vino, porque cuando acabamos a eso de las cinco, mi cabeza me pedía urgentemente una siesta, como así hice. Pero la ocasión lo merecía, así que por un día en el que cometa un pequeño exceso no pasa nada.

Nadaya cada día la veo más despierta. Con sus enormes ojos intenta explorar todo lo que tiene a su alrededor, y cuando arranca a llorar porque tiene hambre, o porque después de comer, queda por lo que sea mal a gusto, ¡hay que ver el carácter que tiene! Lo demostró ayer en el pediatra donde "a traición" le pusieron una vacuna. Pero por lo demás ella está muy bien. Ha superado ya ligeramente la barrera de los cuatro kilos y su estado es inmejorable.

Por la tarde, recibimos en Quintes la visita de un primo de Mónica con su mujer y con su pequeña de apenas tres años. ¡Qué niña más preciosa e inteligente! Pero además se comportaba como una persona adulta que entiende todo lo que le dices y es capaz de razonar conforme a lo que escucha. Ella en realidad no quería otra cosa que ver cómo Nadaya tomaba su leche y por ella se hubiera quedado con nosotros a pasar toda la noche. Me imagino lo orgullosos que se sentirán sus padres de tener una niña así.

Por lo que a mí se refiere deciros que sigo muy bien. No pude resistir la tentación y llamé a Oviedo por si sabían algo del escáner, pero como era de esperar, todavía no tenían nada. Así que habrá que esperar hasta la semana que viene. Ya os he dicho que no me espero un resultado de diez, pero sí que tengo cierta esperanza de que la cosa se pueda solucionar sin tener que recurrir de nuevo a tratamientos de quimio o sesiones de radio. Como hasta el viernes no tengo la consulta, lo que haré será volver a llamar hacia mediados de semana.

Para este finde, en el que se prevé una bajada considerable de las temperaturas, no tenemos ningún plan especial. En realidad el único y mejor plan posible es estar con Nadaya. De todos modos, si no hace demasiado frío mañana, tal vez me acerque por El Molinón a ver al Sporting que juega a las doce. Pero como el partido será retransmitido por Telecable, tampoco descarto verlo caliente en el sofá.

Y aunque todavía queda una semana por delante, empiezo a valorar la posibilidad de que después de tres años de ausencia, volver a reaparecer en el torneo de mus que cada año organiza la gente de Quintes. Ya veremos. De momento no tengo pareja, pero alguien siempre aparecerá. La última vez que jugué acabamos terceros, pero como como aquello de que "una vez el burro tocó la flauta por casualidad". Tampoco voy a pecar aquí de inmodestia, que fueron muchos años de Universidad dedicados al noble arte del mus, así que mi nivelito tengo, pero lógicamente hay gente que juega mucho mejor que yo. Aunque al final la suerte tenga un alto componente y por ello, nunca se pueda apostar quién podrá llevarse el gato al agua. Bueno, ya veremos. Queda toda una semana por delante para decidirlo.

Ahora os dejo, que no es plan de seguir desvelado a estas horas. Intentaré descansar otro poco. Lo malo es que no puedo tirar de más pastillas porque esta noche había ya tomado dos. Hay que tener cuidado no vaya a acabar como la Carmina Ordoñez.

Por cierto, que si os extraña o os preguntáis qué clase de acertijo encierra la nueva "codificación" de los post, prefiero dejar que os comáis un poco la cabeza pensando qué podrá ser, pero igual que con la adivinanza del nombre, sabía que era algo complicado que descubrierais la solución, en esta ocasión creo que es bastante fácil asociar Nadaya 00.01.01 a lo que significa...

Nada más, os envío un fuerte abrazo, buen fin de semana... "y mañana más".

P.D: os dejo una de esa nuevas "composiciones libres" con las que me entretengo cuando no tengo nada mejor que hacer... En este caso no hace falta ni que os diga a quién va dedicada.

Tú, que lo mereces todo,
Aunque todo te ofrezca,
Será siempre poco.

Pues sin ti me vuelvo loco,
Y tan grande es tu ausencia,
Que sólo deseo estar solo.

Tú, más valiosa que el oro,
Personificas toda mi riqueza,
Que no ose ni soñar otro.

Pues tuyo sería mi trono,
Si existiera un atisbo de realeza,
Digno a la luz de tus ojos.

Tú, que bebo amor por tus poros,
Al clamor de mi alma sedienta,
Que un día liberaste de su foso.

(10/01/13)

miércoles, 9 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 28)

Ojalá dejaras que me colara, en tus sueños al dormir
(Schino 2013)

Seal - Kiss from a Rose

A las seis menos cuarto de este ocho de enero, miércoles, comienzo a escribir el Blog. De fondo algo de música relajante -Seal en concreto-. Y mientras, a mi lado, Nadaya toma su "merienda". No podría encontrar mejor ambiente para descansar después de una mañana por el hospital.

Yendo al grano -por una vez a ver si lo consigo- deciros que a las ocho y media estaba ya en Oviedo para en primer lugar realizar la analítica, e inmediatamente después, irme a hacer el escáner. No he tenido apenas que esperar nada salvo lo estrictamente necesario para las tomas de contraste -tres, una cada media hora-. De modo que a las once ya estaba de vuelta en la Unidad de Trasplante para la consulta semanal.

Sobre la analítica destacar mi notable aumento en el nivel de hemoglobina. Lo cierto es que casi rozo los catorce puntos, cifra que no recuerdo haber alcanzado desde el inicio de mi enfermedad. Por este motivo mi hematóloga me ha suspendido la inyección semanal de EPO. Tener la hemoglobina demasiado alta conlleva un riesgo de poder sufrir un trombo, así que mejor ser precavidos. Con el nivel actual me encuentro lo suficientemente bien como para salir a correr. Es un decir, claro está; que de momento no entra en mis planes ir más allá de mis paseos tirando del carrito de Nadaya...

Por lo que se refiere a las defensas tampoco puedo quejarme. Están un valor seguro aunque en este caso sí que mantendré inyección de Neupogen -una cada cinco días- y habré de seguir teniendo especial cuidado a la hora de evitar ambientes cerrados donde pueda haber gente con catarros o gripes. Lo de siempre, vamos.

En cuanto a las plaquetas, pues nada, que no hay manera con ellas. Sí que es verdad que algo suben, pero muy pocas. Es cuestión de paciencia. Puede incluso que los tratamientos con Rituximab -el último lo hice hace menos de un mes- puedan influir en este aspecto, pero tampoco es seguro. Con las plaquetas lo único que podemos es confiar en no sufrir ningún golpe o corte porque en ese caso la hemorragia sería complicada de contener. Afortunadamente -y toquemos madera, hierro, o lo que sea- nunca me ha ocurrido.

Lo más importante sin duda será conocer el resultado del escáner, para lo cual tendremos que esperar hasta la semana que viene. No obstante, si hubiera algo antes, me llamarían para informarme. Con esos resultados será con los que decidamos si mantenemos el actual tratamiento -Rituximab e infusiones periódicas de linfocitos-. Lo que sí que vamos a continuar es con la toma de corticoides, que sin duda me han ayudado enormemente a superar esos pequeños síntomas que me estaban dando la lata desde justo antes del nacimiento de Nadaya. Tanto la febrícula como las sudoraciones han remitido.

Por otra parte hemos recibido el resultado definitivo sobre la biopsia que me habían practicado hace algunas semanas. Dada la poca cantidad que se pudo analizar, el resultado no es del todo concluyente, pero en cualquier caso, en lo que se ha podido analizar no se ha encontrado resto alguno del linfoma original. Es una buena noticia, aunque insisto en que no es concluyente al cien por cien.

Al final como siempre os he dicho, de lo que más me fio son de mis sensaciones, y ahora, bien por los corticoides, bien por la felicidad de tener con nosotros a Nadaya, mis sensaciones no pueden ser mejores. Así que esperando a conocer la semana que viene lo que dictamina el escáner, voy a seguir mientras tanto disfrutando de estos días con nuestra pequeña. Ya estoy pensando en ver qué montamos este viernes para celebrar su primer mes. A ver qué se me ocurre.

Hablando de celebraciones, en el último post os hablaba de la cantidad de regalos que habíamos recibido en nuestra casa para Nadaya. Pues todavía seguimos recibiendo... ¡Menudo ajuar que está atesorando! Hoy sin ir más lejos, al ir a comer con unos amigos, ex compañeros del trabajo, se me presentaron en la mesa con un detallazo. Si es que me la vais a mal acostumbrar...

Nada más por este post. En principio si no hay novedades hasta el próximo viernes dieciocho no tendré que volver por el hospital. ¡Por un fin unas "vacaciones"! No obstante, para vuestra desgracia, si me aburro, os iré contando alguna cosilla más. Que ahora con Nadaya tengo tema inagotable. Espero no acabar transformado en el típico padre pesado que piensa que es el único que ha tenido un hijo en este mundo. ¡Prometed que me lo diréis si veis que caigo en ello! Un fuerte abrazo... "y mañana más".


lunes, 7 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 27)


Y ahora que estás aquí, siento que, simplemente, te amo.
(Schino 2013)


Son poco más de las diez y cuarto de este día siete de Enero, de 2013 -por si alguien lo ha ya olvidado-, cuando comienzo a escribir el Blog. Mientras organizo mi cabeza para ver qué os cuento, tengo a Nadaya a la vista, durmiendo plácidamente en su cuna. Pero no es penséis que todo el monte es orégano, que por la noche sigue dando algo de guerra a la hora de coger el sueño, sobre todo a Mónica, porque yo al final, lo admito, me duermo incluso en mitad de un terremoto. Eso sí, luego también es verdad que despierto mucho por culpa de los dichosos corticoides, aunque esta noche necesitaba dormir sí o sí, así que me metí ración doble de pastilla y quedé casi como la Carmina Ordoñez. Y es que ayer no sé si por los nervios de los Reyes -soy como un niño- o por lo que fuera, estuve despierto desde las cinco de la mañana hasta que a las cinco de la tarde, después de comer, logré echar una pequeña siesta de apenas media hora.

Sobre la fiesta de Reyes podría deciros tantas cosas... Para empezar que la Cabalgata la vimos en primera fila asomados a las ventanas de nuestro antiguo piso. Fue verdaderamente emocionante. Vinieron además a verla con nosotros mis padre y mi hermano con su mujer y mi pequeña ahijada Carla, y se nos sumó además mi tía. La gente miraba para arriba cada vez que nos oía gritar como niños, y lo mejor de todo es que también lo hicieron los Reyes Magos cuando pasaron cada uno de ellos en su carroza. Normal que luego se acordaran de nosotros y se portaran tan bien.

Porque lo de ayer fue el mayor despliegue de paquetes de regalo que recuerdo. Ya no habló de lo nuestro, sino de lo de Nadaya. Creo que por ejemplo tiene más ropa que su padre,,, que ya es decir. Y con los peluches y demás juguetillos tengo para llenar ya su habitación. Y yo feliz y orgulloso de ello.

Con lo que no tuvimos demasiada suerte, aunque no puedo quejarme, fue con la Lotería del Niño. Digamos que recuperé lo jugado, lo que no está mal. La gracia es que ese dinero que ahora recuperas lo tomas como algo que has ganado, cuando en realidad lo habías ya gastado. El resultado es que al final te lo fundes en Rebajas o en lo que sea y si te he visto no me acuerdo... 

Ayer aprovechamos también para subir a Quintes. El día estaba precioso y además nos íbamos a juntar unos cuantos con pequeños... así que al final aquello era como una guardería. Está claro que el mundo no se acaba por mucho que dijeran los Mayas. Es una bendición ver a tanto crío corriendo y jugando y emocionado con todos sus regalos. Como siempre digo, la mejor cura para cualquier aflicción.

Y por si el día no había sido ya perfecto, se cerró con el pelotazo futbolero del día. No, no hablo de esos equipos de barrio como el Madrid o el Barcelona. Hablo de nuestro Sporting, en este caso del filial, de un equipo de guajes -algunos en edad juvenil- que ayer le metieron cuatro a uno a los carbayones en El Molinón. Por favor, si no habéis visto el cuarto gol de Guerrero -el guaje metió los cuatro- no dejéis de verlo en este enlace que os pongo. Si lo mete el Messi ese o el CR de las narices, lo estaríamos viendo toda la semana. La victoria de ayer -humillación llamémosla mejor- tiene una dedicatoria muy especial: va para el Carliños Slim, ese mejicano, que será el hombre más rico del planeta, pero sin duda ha invertido también en el equipo más ridículo.


Para acabar, comentaros que al final la consulta que tenía prevista para mañana, la hemos pasado al miércoles, aprovechando que por fin me llamaron para hacer el TAC justo ese día. Así me ahorro de ir dos días seguidos a Oviedo. Tengo muchas ganas de hacer el escáner y conocer exactamente el estado de mi enfermedad para poder tomar las medidas que sean necesarias. Pero lo cierto es que ahora mismo me siento lleno de fuerzas, así que no espero tampoco que salga nada del otro mundo. Quizás algún restuco que podamos combatir con buena comida y la mejor sidra del mundo.

Bueno, os dejo. Sigo escuchando a Simply Red, grupo de pop famoso en los 80 y 90, que conoceréis muchos. Buena música y relajante como la que os propongo al inicio del post. Nadaya con ella se me queda KO. Y yo con ella... Un fuerte abrazo... "y mañana más".

viernes, 4 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 24)

La verdadera energía que mueve el mundo es la felicidad de un niño
(Schino)


Son las nueve y cuarto de este cuatro de enero, viernes -o eso al menos creo-, cuando comienzo a escribir este Blog. Esta noche no he dormido demasiado bien pero he descansado las horas suficientes que luego ya habrá tiempo de complementar con una buena siesta. Los corticoides que por un lado me están ayudando a mitigar las pequeñas molestias que venía padeciendo tienen como sabéis el efecto secundario de activarte y cuanto más quieres coger el sueño, más pones a trabajar la cabeza. Así que al final te pasas horas tumbado en la cama haciendo cantidad de planes o programando qué harás al día siguientes, aunque muchas veces sabes que el verdadero programa te lo irá marcando el día sobre la marcha.

En esta ocasión he querido dejaros un enlace a una preciosa canción de Adriano Celentano, compuesta por franco Battiato y de la que os dejo también el enlace a su traducción al castellano. Seguro que entenderéis por qué me gusta tanto. Letra y traducción La Cura

El pasado miércoles inauguré mis visitas al hospital de este nuevo año. Tenía cita como os había anticipado para infundirme inmunoglobulinas, unas defensas que tenemos en nuestro organismo y que tienen como misión identificar y neutralizar algunos bichos tales como bacterias, virus o parásitos. Cada dos o tres meses necesito un pequeño empujoncito para mantenerlas a un buen nivel. Del otro tipo de defensas de las que suelo hablaros más, los neutrófilos, las últimas inyecciones de Neupogen han logrado por fin subirlas a unos niveles que serían los de una persona por decirlo así, normal. También en la misma analítica del miércoles se mantuvo la trayectoria al alza de la hemoglobina. Por cerrar el "parte hemográfico" -¡menudo palabro acabo de inventar!-, respecto a las plaquetas, poco que añadir a lo habitual: siguen en huelga.

Pero como os digo yo sigo encontrándome bastante bien. Los corticoides han atajado la fiebre y las sudoraciones son cada vez más insignificantes. Lo que sí estoy observando -es otro de los síntomas a vigilar- es que estoy perdiendo de nuevo algo de peso. Esta mañana después de ducharme la báscula, esa "amiga" infalible, marcaba sesenta y ocho kilos. He de confesaros que no pude resistir la tentación de hacerme una foto porque seguro que dentro de unos años echaré de menos estar tan delgado. Ahora la verdad es que desearía coger por lo menos cinco o seis kilos, que son los que me colocarían en mi peso ideal.

En cuanto a mis próximas visitas al hospital, hasta el próximo martes libro. Ese día me pasaré por Radiología para ver cómo va mi cita con el escáner. En caso de que me den largas tengo decidido ir a la privada para que me lo hagan. Quiero saber cuanto antes si hay algo, en cuyo caso, el tiempo de reacción es un factor muy importante para que luego las cosas no se compliquen innecesariamente. Entiendo que las listas de espera se hayan alargado infinitamente con todas las movilizaciones y huelgas, pero comprendiendo y respetando los problemas de cada uno, el mío, aunque suena egoísta, es el que me importa. De lo que no me cansaré de señalar es que por lo que se refiere a la Unidad de Trasplante nunca, absolutamente nunca, he notado falta de atención por causas laborales, sino todo lo contrario. Son un equipo entregado a su labor y que defenderán como es lógico sus intereses, pero por encima de todo, priman la atención y el cuidado de sus pacientes. Y como ya sabéis que a veces me gusta meterme en charcos -no es que me caiga accidentalmente en ellos-, dejo aquí una frase que leí el otro día en un periódico y que me hizo reflexionar: algunos profesionales que se movilizan contra la privada por las mañanas, por las tardes, se enriquecen con ella. 

Pero yendo a temas mucho más agradables, y como sé que en realidad es lo que os interesa más en estos momentos, deciros que Nadaya cada día está más guapa. Esta mañana precisamente nos toca un par de visitas con ella. Primero al pediatra y después a la matrona. Así que estaremos toda la mañana en danza con ella. A ver si conseguimos que antes de marchar tome su ración de leche para que luego no se nos ponga a pedir en el peor momento. Pero ya sabéis cómo funciona esto: a demanda del consumidor. Aquí sí que es cierto eso de que el cliente siempre tiene la razón.

Bueno, sólo me queda desearos que los Reyes sean generosos y espléndidos y que los recortes no les hayan afectado demasiado. Mañana por primera vez podré ver la cabalgata desde mi ventana, pues casualmente pasará justo por debajo de nuestro antiguo piso, así que nos iremos ahí con la peque a verlos pasar y lanzarles algún caramelo. Estaba pensando con cierta maldad comprar caramelos del Caserío... o incluso ver si tengo alguno por ahí de los típicos de Covadonga, ya sabéis, eso que no te cogen en la boca. Es broma por supuesto, que de los Reyes no tengo ninguna queja ni la he tenido. En realidad yo creo que si me preguntáis qué fiesta disfruto más, si Nochebuena, Nochevieja o Reyes, os diría que me quedo con ésta última. Nochebuena tiene su parte entrañable de que se suele reunir toda la familia, pero también tiene su dosis de nostalgia por los que ya no están. En cuanto a Nochevieja pues la disfrutaba más seguramente cuando era un chavalete, que casi con la última uva todavía en la boca, salía ya disparado por la puerta. Pero como a mí siempre me ha encantado lo del los regalos, pues eso, que me quedo con Reyes. Y no os confundáis, que seguro que a muchos os pasa lo mismo: me hace casi más ilusión darlos que recibirlos, por aquello de la curiosidad de ver la cara de quien los recibe. Todavía recuerdo el primer regalo de Reyes que le encargué en su carta a Mónica: un cachorro de pastor alemán. Linda, que se llamó, estuvo a un tris de ser devuelta, pero al final se quedó en la familia durante doce años. Era el prototipo de pastor alemán: inteligente, fiel, cariñosa... Siento mucha pena de no poder haberle dedicado todo el tiempo que me hubiera gustado. 

En fin, que ahora sí que me despido de vosotros. Disfrutad de este fin de semana que tenemos ya con nosotros y no dejéis de ir a la cabalgata de Reyes -que es lo nuestro, no esos gordinflones barbudos vestidos de rojo-. Un fuerte abrazo... "y mañana más".

martes, 1 de enero de 2013

Génesis MMXIII (Nadaya 21)

Si la felicidad puede encontrarte en un simple instante, tenemos más de 300 millones de segundos, de instantes, en este Nuevo Año por delante... ¿te parecen pocos para quejarte?
(Schino 2013)

Van a ser las once de la mañana de este uno de Enero de 2103 cuando comienzo a escribir el Blog. Acabo de levantarme y de hecho no he aún desayunado. Voy a esperar a que se levante Mónica que ahí sigue la pobre con su Nochevieja un tanto especial, que no ha consistido en otra cosa que en darle de comer a Nadaya. Anoche fuimos a cenar los tres a casa de mis padres, donde nos juntamos además con mis suegros. Y puedo decir con orgullo que Nadaya se portó como una señorita de lo más educada: no lloró ni se quejó en ningún momento mientras estuvimos ahí. Eso sí, fue entrar por la puerta de nuestra casa a eso de  la una, y empezar con su particular fiesta. ¡Pero qué alegría da verla cada día! Los que hayáis tenido la suerte de ser padres sabéis a qué me refiero, así que no voy a pecar de señalar no tópicos, sino auténticas verdades que todos conocéis. En mi caso, por mucho mejor que pudiera haber sido el 2012 hay algo que hace de él el mejor año de mi vida: el nacimiento de nuestra pequeña. Y estoy seguro de que todos tenéis un momento, un instante, que por sí mismo, ha hecho que este año pasado haya merecido la pena. Y si no, siempre os podéis quedar con el más modesto, pero al tiempo precioso: que os ha permitido caminarlo para comenzar este 2013.

Esta noche he dormido bastante bien. Ayer os prometo que estaba completamente exhausto. Ya desde primera hora anduve con recados y luego apenas dormí la siesta porque había quedado con una maravillosa amiga, ex compañera del trabajo, para tomar un café. Estuvimos un buen rato charlando y como no podía ser menos viniendo de ella, me apareció con una bolsa para Nadaya. Los que tenéis cuenta en Facebook habréis seguramente conocido a la nueva amiga de Nadaya, una preciosa muñeca que ahora mismo, casi le saca una cabeza. De momento se llevan bien y yo creo que ya se cuentan confidencias sobre chicos.

Después, antes de la cena, teníamos el brindis habitual que hacemos todos los años la pandilla. Alguno llegaba de correr la San Silvestre, algo que no deja de darme mucha envidia lo reconozco. Primer objetivo para este 2013: correr la última carrera del año. A ver si en esta ocasión puedo cumplirlo. Pero dejando el deporte a un lado, lo más divertido de encontrarnos los amigos ahora, es que la familia crece. En el bar donde quedamos juntamos tres carritos que aquello parecía una exposición. La gente que entraba no podía sino quedarse mirando con cara embelesada mientras nosotros lucíamos peques.

Y de la cena poco que comentaros: lo habitual en una cena de Nochevieja, o sea, comida, comida y más comida. Yo reconozco que estuve un poco apagado porque de verdad que notaba que se me habían acabado las baterías. Eso sí, me reí de lo lindo viendo la pinta de Imanol Arias en La Primera. ¿No tiene estilista este hombre? Y como decía un primo mío, ¿qué se había tomado que no hacía sino decir estupideces? ¿Confundiría el maquillaje con otros polvos?

Alguno os preguntaréis si tomé o no las uvas, porque ya sabéis que no soy de ello. Digamos que lo solucioné con doce sorbitos de cava, uno por campanada, y una última uva que me dio Mónica de sus doce. Lo mismo establecemos una nueva tradición...

Para este día de Año Nuevo habrá que hacer otro pequeño esfuerzo, en lo que a la tripa se refiere, porque por supuesto que tenemos otra comida familiar, en este caso por Quintes. De momento el día parece que no será tan lluvioso como lo fue el de ayer.

Y para mañana vuelta al hospital, pero para nada importante. Recordaréis que os dije que tenía pendiente poner inmunoglobulinas, unas defensas un tanto especiales que de vez en cuando me infiltran cuando las tengo un poco bajas. Lo más latoso del asunto es que son casi cuatro horas enchufado a la máquina, pero bueno, ya me llevaré algo para entretenerme. Y aprovecharé para descansar y seguir recuperando sueño.

No quiero dejar pasar este post sin señalar el comentario anónimo que en el último me dejó una persona con el que al parecer coincidí en mi época de universitario. ¡Qué tiempos aquellos! Leyendo su comentario me he reforzado más aún si cabe en que pase lo que pase, tengo que seguir escribiendo. Porque egoístamente en primer lugar me ayuda a mí, pero porque creo -y que no suene presuntuoso- que a alguna gente le puede resultar útil saber que no está sola en este tipo de lucha. En este caso, le diría al amigo de esta persona que me escribe, que tenga la más absoluta de las convicciones que está en las mejores manos, tanto profesionales como personales para superar su enfermedad. Y sobre todo, que va a hacerlo. Habrá momentos buenos y menos buenos, pero siempre habrá un futuro al que aferrarse. Y hay que hacerlo siempre. Luego, que sea la vida, el destino o como queráis llamarlo el que juegue sus cartas. Nosotros tendremos la seguridad de haber jugado las nuestras lo mejor posible. Os dejo aquí el enlace a ese post anterior.

Y nada, que me despido en este primer día de un 2013 que promete. Podrán recortarnos tantas cosas, pero lo que nadie puede es recortarnos nuestra felicidad. Esa es nuestra, y que yo sepa, de momento no se ha encontrado la forma de que pague impuestos por ella. Como cierre a este post os dejo una sugerencia musical y que quiero dedicar a una prima muy especial que en este año que viene se irá a trabajar nada menos que a Cuba. Es el nuevo disco de Zucchero, La Sesión Cubana. Ya sabéis la debilidad que tengo por el artista de Reggio Emilia. Este es el primer single correspondiente a este trabajo: Guantanamera

¡Ah!, deciros eso sí que tal vez en los próximos post introduzca algunas novedades o cambios. Que hay que renovarse para mantener las audiencias. O eso dicen los entendidos...

Un fuerte abrazo a todos, que tengáis de verdad un muy feliz Año Nuevo... "y mañana más".